Yo la pecadora y tu mi angel - NNT Au melizabeth

Cap 6

Llegar al templo abandonado de las diosas no fue muy difícil, la verdad es que estaba muy mal resguardado al ya no ser protegido por nadie, igual era una ubicación inútil que sólo servía para recordar lo que en algún momento habían sido ellas.

Se abrió pasó por unas cuantas enredaderas y ahí lo vio, sentado de espaldas, admirando el paisaje desde una de las partes más altas del lugar. Sus cabellos rubios revoloteavan con el aire que transitaba, y sus bellos ojos verdes admiraban con paz el lugar.

Oh por las estrellas...¿porque debía ser tan bello?

- ¿Meliodas?

El joven se volteó sorprendido, como si no hubiera sentido que la princesa del clan demoníaco se había acercado tanto...o llegado en primer lugar.

En cuanto la vio, su expresión de sorpresa pasó a ser una más calmada, y a sonreirle de esa manera que la ponía nerviosamente feliz...

- Oh, señorita Elizabeth, no note que llegó...

- Llevamos tiempo conociendonos, porque aún me llamas así?

- simple cortesía..

La muchacha rodo los ojos y empezó a caminar rumbo al joven, para luego sentarse a su lado, admirando el paisaje también.

- ¿Para qué necesitabas verme...?

- hay...hay algo que quiero decirle..

Eso llamo la atención de la peli plata, quien volteó su oscura mirada hacia el rubio, cuyos ojos esmeralda también la estaban observando.

Nuevamente chocaron miradas como el primer día que se vieron, de nuevo sintieron esa extraña sensacion de no querer despegar la mirada del otro, de estar ahí, como si nada más importará..

La peli plata se obligó a si misma a desviar la mirada, o lo más probable es que siguieran en esa situación por un bien rato más.

- em.. que es ?...

Pudo ver por el rabillo del ojo que las mejillas del heredero del clan de las diosas se habían tornado levemente carmesí, a la vez que miraba en otra dirección como si quisiera esquivar la mirada de la chica, pese a que está nisiquiera lo estaba observando directamente.

- um ....bueno...es..es algo vergonzoso...

- Meliodas, tu me llamaste aquí...ahora dilo

El rubio trago saliva mientras recogía el valor necesario para decir lo que deseaba expresar. Sinceramente tenía miedo de hablar, tenía miedo de que al decir lo que tenía en mente, ella se alejara de él, y que todo el progreso por ganarse el aprecio de aquella demonio se fuera al carajo sólo por esas palabras...

- Bueno...lo que sucede es que..últimamente me siento extraño a su lado...me hace muy feliz poder estar con usted, su sonrisa que casi nunca muestra se ve como mil estrellas para mi...y nunca me había sentido de está forma con absolutamente nadie más...

La demonio escuchaba atentamente cada una de las palabras del miembro del clan de las diosas, sin saber porque, poco a poco sus propias mejillas empezaban a tomar una coloración carmesí, como si..inconsistentemente supiera a que iba todo esto..

- Meliodas....

- Lady Elizabeth...la verdad es que...

El chico alzó la mirada, encontrándose con los ojos oscurecidos por la materia oscura de la joven, que lo miraban con genuina curiosidad...

- Yo..creo que me enamoré de usted..