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-Lucky Lucania-

La sala estaba en silencio, no se oía más que la chimenea quemar, John aún estaba enfadado, y Arthur ni siquiera me miraba, parecía dudar de que sea verdad que estuviera sentada junto a él

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La sala estaba en silencio, no se oía más que la chimenea quemar, John aún estaba enfadado, y Arthur ni siquiera me miraba, parecía dudar de que sea verdad que estuviera sentada junto a él.

Las tazas de té estaban esparcidas por la pequeña mesa y el vaso de burbon de Thomas las acompañaba.

-Ese bigote es desastroso .—Los tres se voltearon a verme, pero mis ojos solo hacían contacto con Arthur .—Cuando bebés, o comes una tarta, se queda todo allí, es como una cola de gato en tu cara

Él balbuceó varias veces intentando formar una oración, una gran sonrisa se formó en mi rostro, me incliné sobre la mesa y tomé su mano .—Ahora me vez, Arthur, no soy un fantasma, no vengo a jalarte de los pies

Arthur inclinó su cabeza y con sus ojos cerrados habló .—Te vi caer sobre la trampilla, el rostro de Tom estaba manchado con tu sangre, te vi morir en Francia, y ahora estás aquí

La vena de su frente se marcaba demasiado, sus ojos brillaban y sus manos se estrujaban entre sí.—Vi el túnel explotar, por muchos años e creído que los tres habían muerto allí, créeme que para mi también fue una gran sorpresa verlos, casi me hago pis encima

Arthur río, sorbiendo su nariz volvió a mirarme, la puerta sonó, dos golpes en esta, los tres hermanos se pararon de la mesa y con sus armas en sus manos se dirigieron hacia la salida.

El cuchillo que había ocupado para cortar el pan estaba en mi mano, no podía fiarme.

Las maderas rechinaron, y él entró. Lucky estaba allí, su camiseta impecable y sus lentes de sol, totalmente innecesarios en la mitad de la noche, mi pulso se alivió.

-Que lío has armado

-Hice lo que tenía que hacer

-Rose, hay algo que debes saber

Deje salir el aire de mi cuerpo, sabia lo que Lucky estaba a punto de decir .—No puedo volver a casa

- No, tomaríamos un riesgo innecesario, tampoco podemos enviarte a Nápoles, pero tenemos una operadora lista para que hables con los niños

-¿A donde me enviaran?

-Frank hará algunas llamadas, irás a un lugar seguro

-Puedes quedarte aquí

John habló, los hermanos se encontraban detrás de Lucky, Arthur aún mantenía la mano dentro de su chaqueta .—No lo creo John, el cartel De La Fuente es poderoso, y se esta abriendo paso rápidamente, aún no sabemos con quienes tiene alianza, y eso podría poner en peligro a sus familias, no puedo aceptarlo

-Nadie nos vio cuando te sacamos de allí .—Arthur habló dando dos pasos hacia delante, sus manos ya no se encontraban dentro de su chaleco.—Podría ser un buen comienzo para una, muy buena y duradera alianza. Te quedarías aquí con Pol, hablaremos con ella, no se opondrá

Mire a Thomas, el asintió levemente .--¿Que dices, Lucky?

-Podemos intentarlo, será solo un tiempo, Frank y Salvatore quieren terminar con esto rápido, podemos...

-¡Eres el diablo, Rose Mary Costello!

Los tacones golpearon contra el piso de madera, los hermanos se movieron hacia los lados, dejando ver a la pequeña de cabello rojizo y grandes ojos. Sus delgados brazos se enredaron sobre mí cuello, su perfume de sandía atacó mi nariz, su abultado estómago presionaba contra el mío .—e he dicho que nos vengas aquí Lissa, es peligroso, Lucky

-¡No! Lucky nada, tome una decisión, no iba a dejarte, esta completamente loca, como has podido hacer algo así, sabes lo que sucede ahora, tendrás que quedarte escondida como una rata, y no podré verte, y si esto se alarga más de lo debido y no estás ahí cuando Isobell venga al mundo, a quien le gritare, no quiero a Lucky allí dentro y vea la guerra entre mis piernas

-Sera el tiempo que tenga que ser, Lissa

-Dejare a alguien aquí, se asentará en el centro, solo acude a él cuando realmente estés en problemas, te dejaré el número de la casa donde se encuentran los niños, puedes llamar una vez a la semana, Dorothy estará cuidando de ellos

Podía ver como Lissa se tambaleaba hacia los dados, hasta encontrar la punta de la pequeña mesa y sostenerse de esta, su rostro estaba rojo y sus manos estaban sobre su estómago .—Lissa, debes salir

-No, yo, solo, ¿Te quedarás aquí? .—Asentí repetidamente, su rostro había cambiado por completo, ella estaba viviendo el pasado, John estaba allí, vivo .—Esta bien, prepare un bolso de ropa, esta en el carro, debemos ir por él, lo siento, necesito sentarme

Sus manos estaban sobre sus rodillas y su respiración era agitada, me volteé, John mantenía sus ojos sobre Lissa, mientras apretaba su boina entre sus manos, Arthur estaba en un rincón, sus manos formaban un puño y la vena de su frente se marcaba, Thomas, él solamente estaba allí, observando lo que estaba sucediendo.

-Esto es para ti .—Sobre sus manos estaba un revólver colt, mi fuerte no eran las armas .—Y esto, escúchame, solamente lo usarás cuando estés acorralada, no le des el gusto a estos mal nacidos de matarte

Las pequeñas patas de la silla rechinaron contra el piso de madera .—No,  si estás acorralada, te lías a tiros y sale de esa mierda, pasamos por muchas cosas y tu final no será morir como una maldita rata, esto irá mejor contigo .—De su bolsa tomó la navaja de plata, "Adrien", aún estaba allí, algo gastado pero aún legible .—Volveré por ti, y si no estás viva, juro por mi maldita alma, bajaré al infierno y pateare tu maldito trasero

Lissa volvió a acurrucarse sobre mi, cruce mis brazos sobre su espalda, luego de la guerra nunca nos habíamos separado tanto tiempo, Lissa se había casado con Lucky, el cual tenía una Omertá con la familia, habíamos remontado nuestras vidas juntas, y separarnos de esta manera, volvía a revivir los miedo del pasado.

Uno de los hombres de Lucky había traído el equipaje, Lissa aún no se soltaba de mi .—Lissa debes irte, Lucky esta esperándote fuera

Ella se soltó de mi, sin siquiera verme.

-Cuídela por mi, Sargento

Dio un leve apretón sobre el brazo de Thomas y salió de la casa sin decirme una palabra.

La colt estaba sobre la mesa, la navaja sobre mi cintura y la píldora de cianuro sobre mi mano.

CostelloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora