-Yo, no quiero incomodarte más. Así que ya me voy- dice acercándose al sofá. -No- le miro- no te vayas. Hablemos- miro al suelo- Porfavor. -Enserio, no tienes porque hablar conmigo si no quieres- me mira nervioso. -Quiero hablar, de veras- le hago sitio a mi lado. -Quiero una explicación lógica. -Esta bien- se sienta en el sofá, manteniendo distancias. -¿Qué quieres que te explique?. -El porque me dejaste sin ningún motivo estaría muy bien- me echo a un lado para poder mirarle a la cara- Y no me mientas, porque lo sabré. -Tu no hiciste nada malo, todo lo contrario. Eras increíble y en la vida te hubiese dejado ir.- dice lentamente sin dejar de mirar sus manos. -Es Justo lo qui hiciste- susurro. -Sabes hace 5 años, cuando estábamos juntos. Las cosas eran muy distintas a ahora. Eras una cría, apenas comenzabas el instituto y yo acababa de terminar la carrera, mi padre estaba en casa y tú mejor que nadie sabes que clase de persona es. Cuando descubrieron nuestra relación se volvió loco, le lavo el cerebro a Kate y lo intento conmigo, pero el amor que sentís y siento por ti me hizo fuerte. Me amenazó con que o cortaba la relación o él te cortaría por la mitad.No quería que acabases mal por mi culpa, que te mataran por ser lo que eres y por yo no querer dejarte ir. -Un monstruo- levanta mi mirada hasta conectarla con la suya. -No, no eres un monstruo. Eres lo más increíble del mundo y no podía permitir que ocurriese algo por mi culpa, no me lo habría perdonado jamás. Cuando te deje mi familia decidió volver a Francia. Fue lo mejor para intentar olvidarte, pero mírame, 5 años después he vuelto, solo por ti.-coge mis manos y no puedo evitar romper en llanto cuando lo hace.
Me atrae hacia él y me abraza con fuerza. Le correspondo el abrazo, escondiendo mi cara en su pecho. Dejo que todo lo que tengo dentro salga. El simplemente me acaricia la espalda y me repite una y otra que lo siente y que no debería de haber vuelto a Beacon Hills. Me separo lentamente de él, y conectó su mirada con la mía.
-Lo siento- digo refiriéndome a su camisa- te he empapado y no creo que sean solo lágrimas.-Sonrío a penas -No te preocupes- me devuelve la sonrisa.- Estás preciosa- susurra agachando la mirada. -Sigues mintiendo Chris- rio silenciosamente. -No, no miento- sonrie- has cambiado muchísimo. Eras una niña y ahora mírate, debes de ser la envidia de todas las chicas de la universidad. Seguro que tienes una cola interminable de pretendientes.-coge mi mano. -No seas exagerado- digo mirándole a los ojos- No estoy yo para tener relaciones. -Tiempo al tiempo- acaricia mi mejilla. -No puedo sacarte de mi jodida cabeza- susurro fijándome en sus labios. -No me digas estas cosas- se acerca lentamente a mi. Estamos cerca, muy muy cerca. Demasiado diría yo.
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Papi Argent las ama❤️🔥
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