Eterna

Morir Sin Amarte

Hace tan solo unos minutos que Selena y yo regresamos a mi casa. La rubia se quedó con todos los chicos explicándoles lo que está ocurriendo, lo que haremos y todo lo relacionado a ese tema, yo por mi parte decidí venir a ver a la unica inmortal que me interesa, ella que como ha sido desde hace tantos días sigue dormida, tan bella y perfecta como siempre pero con los ojos cerrados... sumida en ese sueño que me está quitando tiempo con ella. Le conté toda la historia como si ella pudiera escucharme y por un segundo tuve la sensación de que era así... sentí que ella no estaba dormida y podía saber que apesar de todo yo haré lo que sea por despertarla y proteger a los nuestros.

No estoy tan segura de todo esto, Lexi... -admití mientras tomaba su mano helada- yo haría lo que fuera por proteger a nuestra especie, pero por lo que me han dicho encontar a una bruja puede ser muy complicado y mi corazón no está listo para decepcionarse otro poco de la inmortalidad...

Esperaba esas clásicas palabras de aliento que ella me daba cuando las cosas se ponían complicadas en nuestra vida humana, pero en vez de eso solo obtuve un silencio que rompió un poco mas a mi inservible corazón.

Decir que no estoy realmente furiosa y desesperada sería mentir descaradamente, por qué me encuentro tan harta de esta situación que he sentido que ya no tiene sentido seguir teniendo la vida que llevó, y no, no es una exageración por qué literalmente el único motivo que tuve para regresar y apoderarme de esta vida fue la castaña que se encuentra en ese limbo entre la vida y la muerte... Que ella no esté en el mismo mundo que yo me deja sin motivos para seguir siendo una vampira.

¿Otra vez estás pensando tonterías, Gianna? -pregunto Selena a mis espaldas-

Déjame tranquila... cada quien decide cómo sobrellevar su dolor ¿No? -acaricie suavemente el dorso de la mano de Alexandra-

Ella no desearía que terminarás con tu vida y lo sabes -asentí con un recuerdo en la mente-

Cuando éramos humanas... teníamos apenas quince años cuando descubrimos nuestros sentimientos por la otra -sonreí débilmente- fue de verdad horrible... -mire a la rubia que mantenía la seriedad en su rostro y la mente concentrada en mis palabras- estábamos en una época dónde ser homosexual era castigado con la muerte o con el encierro en un manicomio por el resto de tu vida... Yo estaba muy asustada, pensé que era mejor morir por mi propia mano que en manos de un grupo de personas desconocidas o que estar encerrada por siempre -observe efímeramente a Lexi- pero ella jamás tuvo miedo... me dijo que le tenía más miedo a morir sin haberme amado que a morir sabiendo que no pudo elegir a alguien mejor para enamorarse -mis ojos se cristalizaron al recordar nuestro primer beso- ella me salvó de el suicidio y en ese momento me di cuenta de que apesar de que el mundo se nos vendría encima algún día, si ella estaba conmigo nada más importaba...

La amabas mucho... -dijo con la voz entrecortada-

Aún la amo... siempre lo haré -bese el dorso de la mano de Lexa- ella para mí es ese amor que jamás se olvida... -me levanté de la cama y me encaminé hacia la rubia-

Tiene suerte de que la ames -le sonrió con dulzura-

Pensé que me odiabas por quitartela -sonreí con cierta diversión-

No te odio -devolvió la sonrisa- la amo y pienso que ese sentimiento se quedará ahí por un largo tiempo, pero creo que ella jamás fue para mí... -dijo sincera- desde el inicio fuiste tú la que debía quedarse con ella, sobre ti caerá el peso de hacerla feliz cada día desde que despierte y confío en que sabrás cuidarla de todo... hasta de ella misma

Lo haré -la rubia me abrazo- gracias por perdonarnos... La verdad te has convertido en alguien importante para mí y sin duda eres importante para ella

No hay que agradecer -sonrió- ahora vamos, los creadores quieren hablarnos y no creo que vaya a ser una charla agradable -sin más desapareció dejando una ráfaga de aire frío a su paso-

Mire una última vez la silueta de el amor de mi vida y luego fui detrás de Selena. Pase por el pasillo y baje por las escaleras, al final de estas ya me esperaban los cuatro creadores junto a la rubia.

No pueden ir a buscar a una bruja -dijo Silvana en cuánto me vió- es un delito contra nuestra especie

Es para salvar a nuestra especie -respondi- por si no lo saben una guerra entre humanos y vampiros terminaría con todos nosotros -nadie hablo- nosotros tenemos fuerza y somos incapaces de envejecer como ellos, pero aún así pueden matarnos y hay dos pruebas de ello, una está encadenada en un calabozo y la otra postrada en una cama allá arriba

Solo haces esto por regresar a Alexandra -dijo Elian con evidente molestia-

Si, también lo hago por eso, pero pondré por encima el que la bruja rompa el lazo entre Tessa y sus creaciones ilegales -todos se quedaron callados observandome-

Lo haremos apesar de que se opongan -declaro Selena- y más les vale no meterse por qué les recuerdo que nosotras juntas podemos terminar con ustedes en un segundo -dijo sonriente-

De eso no se trata, Selena -dijo Aura con tranquilidad- no planeamos ponerles trabas o evitar que ayuden a nuestra especie, es solo que si un vampiro se acerca a una bruja podría ocasionar otra lucha entre nuestras especies... Tratamos de evitar eso

Seremos cuidadosas -afirme- no planeamos herir u obligar a nadie, si una bruja no acepta nuestro trato iremos en busca de otra y así será hasta que encontremos a alguien que esté dispuesta a ayudarnos

Y seguimos investigando sobre ellas para no ser irrespetuosas con sus especie en ningún momento -acompleto Selena-

Bueno... Creo que son conscientes de que de ustedes depende la paz de nuestra sociedad -afirmo Aura- está bien, pueden hacer su búsqueda... Tienen mi confianza y la de mis compañeros