The Miserable Squad (DESCONTINUADO)

18.¿Quién es Alissa?

Brooke:

Uno, dos, tres... respira.

Me miro otra vez en el espejo. Mi peinado está bien, mi maquillaje está bien, mi vestuario está bien.

Cuatro, cinco, seis... respira.

Hoy era mi presentación de ballet. He estado ensayando por meses. Era mi primera presentación desde que me mudé, en una nueva academia. Me dieron la oportunidad de hacer un solo, y eso me ponía muy emocionada. Practiqué un montón y me esforcé mucho.

Siete, ocho, nueve... respira.

Una presentación más y seguía yo. Me había estado preparando desde la mañana. Mis papás estuvieron ayudándome. Sam iba a recoger a Sabrina porque no todas la chicas cabían en el carro de Mandy. Cuando lo supo se ofreció inmediatamente a llevar a Brina. Esos dos juntos era algo caótico.

Diez, once, doce... respira.

Como siempre antes de una presentación me sentía muy nerviosa, también tenía ganas de vomitar. Para poder relajarme empiezo a contar, luego respiro. Tenía miedo, lo usual. Temía caerme al frente de todos o que se fuera la luz en media presentación. Me calmaba un poco saber que mis amigas iban a estar ahí para apoyarme. Escuché los aplausos de la gente y supe que era mi turno.

Trece, catorce, quince... respira.

Puse una sonrisa en mi rostro y entré al escenario. Me puse en posición, vi rápidamente al público hasta que encontré a mis amigas. Ellas me saludaron emocionadas, tenían sus celulares en mano. La música empezó a sonar y yo comencé a bailar. Siempre cuando estoy bailando me siento muy nerviosa al principio, pero, poco a poco me voy relajando y me siento segura de mi misma. Al final de la presentación sentí que la punta de mi zapatilla se doblaba. Me balanceé un poco, pero logré mantenerme en posición hasta que cerraran el telón. Todos aplaudieron. Bien, espero que nadie haya grabado eso.

Al final de todo el recital me cambié y salí. Mis amigas estaban esperándome, unas traían unos pequeños regalos, como unos chocolates.

—Te salió súper bien.—me dice Liv mientras me abrazaba.

—Te veías muy linda. Toda perra empoderada.—dijo Brina.

—Ninguna grabó cuando se me quebró la zapatilla, ¿verdad?—dije yo horrorizada. Que pena. Todas me vieron con una mueca.

—¿Y eso cuando pasó?—dice Mandy desconcertada.

—Al final, ¿no lo vieron?—estaba confundida. Aunque es mejor así, me ahorro la vergüenza.

—Nopi, estábamos muy ocupadas aplaudiendo.—el comentario de Alex me hace sonreír.

—¿Qué les parece si vamos a comer pizza, chicas?—dice mi mamá. Todas asentimos emocionadas como si fuéramos unas niñas pequeñas.

Fuimos a una pizzería que quedaba cerca. Pedimos como tres pizzas para todas. Sam pasó con nosotras, aunque era obvio el porqué.

—Estoy feliz de que todas hayan llegado a tiempo. Gracias, esto era muy importante para mí.—les digo sonriendo. Las chicas y Sam abren mucho los ojos y asienten lentamente.

—Apenas...—susurra Clair.

[...]

Amanda: