Esperaré Lo Que Tenga Que Esperar...

Amanecer

Su respiración, su aliento, siento como cada vez acerca más sus labios a los míos e intento parecer tranquila, pero mi pecho exhibe palpitaciones tan aceleradas que se podrían escuchar en toda la habitación, su mano acaricia mi rostro de una manera tan sutil. Siento su tacto tan cálido, pero de pronto mi cuerpo no responde y se paraliza por completo, mis ojos se abren y una sonrisa se dibuja en su rostro, se aproxima a besarme...

­­­­­­­Rrnn Rrnn suena el despertador.

Me quedo observando los primeros rayos de luz que atraviesan la ventana y arriban a una parte de la cama. Siento una brisa refrescante y relajante que me incita a quedarme en la cama todo el día, sin embargo mi lado responsable me obliga a levantarme, aunque mi mente divaga en ese extraño sueño.
¿Porque soñé con Jorge? es un amigo y nunca lo he visto de otra manera, aunque no negaré que es atractivo. ¿Será verdad que los sueños son deseos comprimidos? En esta ocasión no lo creo.

Me dirijo a la ducha y tardo más de lo normal, mi madre siempre me lo ha dicho, soy una lentitud... Pero una lentitud responsable al menos eso me digo.
Nunca me he preocupado por lucir a la moda, me pongo lo que me sienta cómoda; una camisa, jeans y unos converse.
Miro la hora exaltada ya es muy tarde, corro hacia la parada de autobuses y después de unos minutos de cardio por suerte alcanzo uno.

El tráfico de todas las mañanas es un caos, accidentes de personas conduciendo sin límites, el ruido ensordecedor de los autos, sin contar el exceso de humo contaminante que desprenden. Después de una hora he llegado a mi destino "La universidad".
Ya ha pasado un mes desde el inicio y todo marcha bien, he hecho pocos amigos es una tarea que me cuesta mucho trabajo por mi falta de confianza y malas experiencias.

Me gusta mi carrera, siempre he querido aprender muchos idiomas y este es un pequeño comienzo especializándome en inglés y francés. El aula está llena en su mayoría de chicos, no tengo ningún problema con eso, hay de todo tipo pero ninguno ha llamado totalmente mi atención, aún me estoy acostumbrando y no he ha quedado tiempo de pensar en ello.

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—Angie no te he visto en toda la mañana— escucho a Cristina acercándose a mí y derrochando su alegría de siempre.

—Hola Cristi, fue una mañana pesada.

—Ya lo veo, luces tan emocionada como siempre— Ella y su particular sentido de humor— vamos a la cafetería.

Nos acercamos y vemos a Mafer y Jorge esperándonos, por una extraña razón me siento nerviosa al ver a Jorge y recordar mi sueño, pero trato de ocultar muy bien mis nervios, así que todo fluye con total normalidad.

Charlamos sobre ir a "Teyork"
Una cervecería que está muy cerca y comentan que la comida es muy rica.

— ¡Listo iremos mañana! — dice Jorge exaltado. Es un chico bastante extrovertido.

— ¡Por supuesto!, sean puntuales— Dice Mafer de forma burlesca, porque ella es la persona más impuntual que he conocido, pero sobre todo buena amiga.

A las chicas les gusta la idea también y quedamos en ir a conocer el lugar.
Nos despedimos y cada uno se dirige por diferentes caminos.

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Me dirijo hacia la parada de autobuses y al esperar percibo la mirada de un chico que está a escasos metros de mí.
El autobús tarda demasiado y cuando volteo me encuentro con ese chico justo a mí lado.

— ¿Disculpa que horas tienes? —Lo miro extrañada respondo con cordialidad —Son las 12:40—

—Muy amable, Gracias.

—De nada—Observo que se aleja unos metros, pero continúa buscándome con la mirada.

En ese momento llega mi autobús y al subir noto la mirada intensa de ese chico sobre mí, su interés me resulta inquietante por lo que no puedo evitar verlo de nuevo, él sonríe con calidez y simplemente no reaccionó solo sigo mi camino.