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Capítulo 6: Un caso perdido

Presente.

Sus dedos temblaron sin poder evitarlo, arrugado el papel sobre sus manos. Sus ojos de color ámbar ni siquiera podían leer las letras escritas en ese documento, todo fue muy borroso y palabras danzando una sobre otras. Manchas de tinta negra que no tenían ningún significado para él, sin embargo lo hicieron.

Lo único que los ojos de Lan Wangji pudieron captar, fue la primera frase escrita en letras mayúsculas y en grandes.

ORDEN DE ALEJAMIENTO.

Esas palabras estaban ahí, escritas en grandes para que pudiera leerlas bien. Para que las letras pudieran burlarse de su suerte.

No ahora, no podía ser en ese momento que lo tenía tan cerca. Que después de tantos años por fin pudo encontrarlo.

—¿Qué es esto? —Finalmente pudo hablar, reuniendo el valor para enfrentarse a la persona delante de él.

Su propio hermano, Lan Xichen.

—Una orden de alejamiento, Wangji. —Aún si encontraba serenidad en la forma que su hermano habló, no dejaba de sentir una mirada fría y en advertencia.

Lan Xichen no solamente era su hermano mayor, también era el jefe del departamento de policías en Gusu. Por lo tanto, también era su jefe.

—Wen Ruohan no te quiere cerca de su familia, no te quiere cerca de su esposo. —Lan Xichen continuó hablando.

—Pero Wei Ying... —Fue demasiado rápido en intentar contradecir las ordenes, pero no le dio tiempo de excusarse cuando Lan Xichen volvió a hablar.

—Wangji... Es una orden.

—No me puedes hacer esto.

—Puedo, soy tu jefe. Y como jefe te digo, que ya has hecho demasiado por buscar a Wei Wuxian. —Dentro de esas palabras, que debieron ser dichas como un jefe, hubo un hermano mayor regañando a su hermano pequeño. —La persona quien piensas que es Wei Wuxian no lo es, tiene parecido pero no es él.

—¿Qué? —No lograba comprender la situación, él lo había visto y escuchado. No había forma de que su hermano no pudiera creerle.

—Ese día... Wen Ruohan habló conmigo, prometió no ponerte ninguna demanda por allanamiento de propiedad privada a cambio de...

—Una orden de alejamiento. —Terminó las palabras sin necesidad de saber la respuesta final por su hermano.

Lan Xichen solo asintió, viendo como la decepción y un toque de dolor se escondió en esos ojos. Mirada que ya había visto antes, todo el tiempo cuando se trataba de la búsqueda sin resultados de Wei Wuxian. 

—Wen Ruohan también me presentó a su esposo. —Lan Xichen continuó hablando, Lan Wangji sintió un nudo en la garganta al escuchar la palabra esposo. —Es un omega masculino, muy bonito... Tienes rasgos parecidos a Wei Wuxian.

Lan Wangji sintió que no le gustaría lo que vendría a continuación.

—Pero no es él.

No otra vez.

Fue lo único que pensó, cuando la poca esperanza que le quedaba, se estaba escapando entre sus manos, al no poder sostenerla por más tiempo.

—La razón por la que el esposo de Wen Ruohan es ocultado al público... —Su hermano siguió hablando, como si eso fuera a encontrar una solución, una calma para mantenerse estable y que fuera un mal entendido. —Es porque es muy tímido, además por su seguridad... Wen Ruohan es un hombre con bastantes enemigos y muy poderoso... Lo mantiene en secreto para mantenerlo a salvo... Ese día solo asustaste a su esposo.