Capítulo 1: ¿Me estas escuchando?

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Mis ojos estaban fijados en el vidrio frente a ellos, observando las hojas que caían de los árboles al mismo tiempo que pequeñas gotas caían y se escurrían.

— ____, ¿Me estás escuchando? —gire mi cabeza hacia mi madre quien me venia hablando hace bastante rato pero no preste atención a lo que decía, estoy muy distraída.

Hice una pequeña mueca en respuesta y ella simplemente suspiró, deteniendo el auto frente a una enorme casa.

— Escucha, Min Yoongi es tu profesor de Piano, ¿Si? —asenti mirando la gran casa que tenía un patio de lo más bonito. Me pregunto cómo hizo mi madre para conseguirme clases en un lugar tan lujoso con el poco dinero que poseemos— portate bien con él y hazle caso —me quito el cinturón y me entrego mi mochila con un paraguas—. Yo me voy ahora, ¿tienes idea de cómo llegar a casa?

Mmm.. usaré mi gps y iré en bus —me acomode la mochila en la espalda antes de abrir la puerta y bajar—. Te enviaré mensaje antes de ir a casa, si llego antes prepararé la cena —sonreí y luego baje cerrando la puerta con cuidado.

Movi mi mano despidiendome de mi madre para pronto alejarme abriendo el paraguas, entrando por las enormes rejas que me llevaban a la casa tan inmensa.

Parecía una academia más que una casa, ¿Será un viejo? ¿Hace cuánto conoce a mi madre? Mejor me guardo mis preguntas para mucho más tarde.

Detuve mis pies sobre un tapete bastante bonito de color beige y toque el timbre que estaba junto a las puertas tan grandes, esperando a que me abrieran.

— Que frío... —susurre cerrando el paraguas a la vez que notaba que una de las puertas se abría, dejándome ver a un hombre bien vestido. Me quedé estática, mirando al chico tan pálido con facciones que jamás en mi vida había visto— H-hola, soy Xen ____ y vengo por las clases de piano...

¿Que me pasa? Nunca tartamudeo, esto parece ridículo viéndolo desde mi perspectiva, calmate ____, concentrate en tus clases.

— Oh, soy Min Yoongi —su sonrisa era sumamente encantadora a la vez que sus ojos se hacían más pequeños.

Trague saliva y intente sonreír pero más bien me había salido una mueca.

Un silencio se formó entre nosotros hasta que él se hizo a un lado y que pudiera pasar a la casa. Realmente los nervios estaban abundando en mi cuerpo, temblaba hasta para quitarme mis zapatillas.

En silencio me llevo a una gran sala donde había un gran piano color negro con pequeños detalles blancos que le daban un toque marmolado.

— Deja tus cosas en el sofá —apunto al que estaba allí e hice caso dejando mi mochila al igual que mi celular y el paraguas. Mis piernas delataban lo nerviosa que estaba—, ahora sientate aquíindicó.

Una vez estuve sentada acaricie las bonitas teclas que poseía el piano, podría decir que era mi instrumento favorito pero para mi mala suerte no tengo el dinero suficiente para comprarme un instrumento tan caro.

— Comenzaremos con una canción bastante fácil, —podría decir que la calma que traía me la estaba transmitiendo ya que mi cuerpo estaba relajado— iré a buscar la partitura, ¿Conoces la canción Arirang no? —asenti con suavidad y el sonrió, acelerando mi corazón y pulso.

Tan pronto como se marchó me dediqué a mirar todo lo que había a mi alrededor; pinturas, muebles, decoraciones y libros en estantes.

Pensé en preguntarle cuanto había costado la clase ya que me preocupaba el hecho de que mi madre hubiera pagado demasiado por las mismas.

Suspire dejando mi cabeza agachada, acariciando la tela suave que estaba bajo mis piernas, el pequeño banco era color negro y la almohada era color grisáceo. Realmente todo era muy elegante, pero se siente tan vacío esto.

Pronto escuché pasos y vi que frente a mis ojos dejaba una partitura que apenas conocía.











Este capitulo es corto porque es más una introducción a la historia, espero le den amor porque fue y es la primer historia que hice.

Los quiero.♡

Querido profesor •MYG&____•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora