Taehyung
Dos Meses Antes
Por primera vez en semanas había caído la lluvia durante todo una mañana, era un día como aquellos en que rara vez se veía una gran tormenta venir. Desde la muerte de su padre Taehyung había pasado mayor parte de su tiempo a la orilla del mar, observaba a los percadores, solía ayudarlos a pescar. Mientras que por las tardes le encantaba tejer canastas con las abuelas de la isla. Por las noches, solía estar hasta tarde bailando con la gente de la isla, a veces tocaba su tambor y preparaba la cena con algunas señoras. Cualquier cosa era mejor para el joven príncipe, con tal de estar lejos del catillo, no había habitación que no le recordara a su padre, el recuerdo lo atormentaba por las noches al igual que una punzada de una astilla tan pequeña que es difícil sacar, pero aun así continúa lastimando. El joven podía durar noches sin dormir, con solo su llanto haciéndole compañía, estaba solo mientras que su hermano pasaba mayor parte del tiempo arreglando asuntos de gobierno, viendo como mejorar los caminos de la isla, evitar los pocos crímenes que había y mejorar su relación con las islas vecinas. El nuevo rey se había vuelto una neblina matinal que aparece y desaparece cuando quiere, algo que puedes ver por momentos, pero rara vez se mantiene contigo. Taehyung lloraba no solo por su padre sino por su hermano, por la vida que había tenido antes, la libertad de su hermano, su alegría por la vida, todo aquello había muerto junto con su padre.
Aquella mañana, el rubio príncipe no podía salir del catillo pues la lluvia impedía que pudiera ir de pesca, si llegaba la tormenta, el joven no podría ir con las abuelas, tampoco podría ir a bailar a la luz de las fogatas y aun menos cocinar con sus amigas. Esto le dio mas pesar al joven, pero aun así su tristeza no arruinaba su hermoso rostro, nadie podía negar su belleza y de cierta manera aquellos ojos que se esforzaba por contener las lágrimas lucían con un brillo. El único lugar al cual él podía ir era una vieja cueva escondida entre las montañas, estaba siempre desierta, aunque la tenía decorada con poco lucia acogedora aún más que el enorme castillo.
Sin pensarlo dos veces, el rubio muchacho tomo su mochila y la lleno de lo que creía necesario, un par de libros y unas cuantas frutas que había recogido la noche anterior antes de llevar a su casa. Creyó que seria necesario llevar una vela por si las que tenia en la cueva no servían. Sin mucho en su mochila y con su ropa mas vieja de lino, el príncipe salió por las puertas traseras del castillo, tratando evitar contacto con los guardias y los sirvientes. No era como si no quisiera estar con ellos, mas bien este deseaba no tener que dar explicaciones sobre sus sentimientos y así evitar que los demás le tuvieran lastima. Trato de ser lo mas silencioso posible, algo que le tomo mucho esfuerzo pues solía ser muy ruidoso al entrar a las habitaciones, tardo mas de veinte minutos el poder salir sin que fuera notado o interrumpido, aunque una parte del pensaba que las sirvientas notaban su presencia, pero preferían ignorarlo pues lo conocían lo suficientemente bien como para saber que no quería ser visto.
Una vez fuera, el príncipe pudo sentir sobre su piel la humedad de la lluvia y del mar, no era una combinación agradable, pero podía soportarla hasta que llegara a la cueva donde estaría más fresco y podría sentirse con mas tranquilidad. Mientras caminaba por la pequeña selva de la isla, Taehyung jugaba con una pulsera de perlas que le habían regalado la noche anterior una familia que tenia poco de haber llegado a la isla, en tan pocas semanas ya le habían tenido un gran cariño al joven hasta el punto de recibirlo siempre con abrazos. Eran esos momentos en los que el compartía con el pueblo en los que se sentía como con una familia, amado y querido, un sentimiento que su hermano había alejado desde meses atrás.
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Corona De Mentiras (Vkook/Taekook)
FanfictionLa piel de un lobo gris estaba sobre la cama del hijo más joven del rey, era su piel favorita pues el mismo había matado al animal mientras este cuidaba a sus crías. Jungkook había disfrutado tanto ver como la sangre del animal teñía la blanca nieve...