14장

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Jimin caminó hasta la parada de autobuses aún tomando la mano de Jungkook. Ambos estaban nerviosos, esperando que en cualquier momento alguien reconociera a Jungkook, pero la realidad es que las personas simplemente pasaban de ellos.

Cuando abordaron el autobús, Jungkook se relajo un poco, sin embargo, nunca soltó la mano de Jimin.

-Jungkook... ¿te gusta la historia?.

El castaño lo miro en su dirección y se retiró los lentes oscuros. Con una expresión de total felicidad y ojos brillosos. Lo cierto era que Jungkook amaba saber sobre la historia, visitar museos o monumentos histórico, pero su apretada agenda y su condición de idol no le permitían mucho disfrutar de esto.

-¡Claro! ¿A quién no?.

-Maravilloso porque vamos a Gyeongbokgung.

-¿En serio? Tantas veces he querido entrar.

Jimin asintió, contemplando lo hermoso que era el rostro de Jungkook cuando estaba genuinamente feliz. El rubio se levantó en su parada, Jungkook se colocó de nuevo los lentes oscuros y sostuvo fuertemente la mano de Jimin cuando llegaron frente a uno de los más hermosos y grandes palacios de Corea.

Jungkook tomo más fuerte la mano de Jimin cuando se acercaron más a las puertas de entrada, el lugar estaba lleno de personas. Todo el cuerpo de ambos chicos se tenso, deteniéndose luego de un par de pasos dentro del palacio.

-Creo que será mejor ir a otro sitio, aquí está lleno de personas.

Jungkook asintió en dirección al rubio y caminaron fuera del lugar hasta una de las estaciones del metro más cercana. Jungkook preguntó durante todo el viaje a dónde se dirigían pero Jimin se negó a responder alegando que era una sorpresa.

Jimin sonrió ante la impaciencia de Jungkook, parecía un pequeño niño siendo todo insistente y a la vez tierno. Por momentos Jimin creía que moriría de ternura ahí mismo. No estaba seguro de si al castaño le gustaría el lugar, pero él había amado ir ahí cada verano cuando lo llevaban sus padres.

Viajaron por más de una hora en metro. Cuando llegaron a su destino Jimin arrastró a su idol fuera de la estación y volteó a mirarlo expectante.

-¿Te gusta?

-Me encanta. Gracias Jimin.

Jungkook corrió en dirección al parque Taejongdae, la fresca briza salada golpeaba sus rostro a medida que se acercaban más al lugar. Jungkook retiró las gafas oscuras y tomó la mano de Jimin a medida que avanzaban por el parque.

Ambos chicos caminaron a traves del lugar, sus manos firmemente agarradas mientras riendo y bromeando. Tan distraídos iban que no notaron a la chica que caminaba de espaldas, alejándose un poco de la barandilla tratando de tomar una foto del paisaje.

La chica chocó fuertemente contra Jimin, ambos perdiendo el equilibrio. Jungkook trato de evitar que la chica cayera al piso que rápidamente la tomo por la espalda. Con el rápido movimiento su capucha calló y dejó al descubierto su rostro.

Jimin cayendo de espaldas sobre él duro pavimento se quejó un poco.

-¿Esta bien?

-Estoy... bien

Jungkook soltó a la chica y subió rápidamente su capucha alejándose lo más posible de la castaña que lo miraba intensamente.

- Estoy bien no se preocupen -Dijo el rubio desde el suelo, llamando la atención de la chica quien la ayudó a levantarse.

-Debe de tener precaución, usted se pudo haber caído.

Lo chica lo observaba sin decir ni una sola palabra, Jimin le hizo una reverencia y salió corriendo queriendo alcanzar a Jungkook.

Luego de eso llegaron a uno de los balcones que daba vista al mar. Había pocas personas, tomando fotos del lugar, sin prestarles ninguna atención a ambos chicos.

-¿Verdad qué es bonito?.

Preguntó Jimin sin mirar a Jungkook, recargado sobre el barandal de metal y mirando con una sonrisa el hermoso paisaje frente a él.

-Si es muy bonito y más ... la vista

El aire puro jugaba con el cabello del rubio, él sol golpeando suavemente cada relieve de su bello rostro. Todo alrededor de Jungkook desapareció, fue consciente de la belleza que poseía ese hermoso chico que en un par de semanas se había convertido en una persona muy importante para él.

Su corazón estaba acelerado y lo único que podría oír eran los latidos de su corazón. Nunca se había sentido tan perdido y a la vez tan feliz y libre.

-¿Estas bien Jungkook?- preguntó Jimin un poco confundido por la forma en la que Jungkook lo miraba.

-Yo, lo estoy- Jungkook le dio una sonrisa al rubio.

-Tomémonos una foto aquí, Jungkookie.

El rubio jaló del brazo al castaño, sacó su teléfono y hizo una cara graciosa con la vista maravillosa de fondo, miro la foto y pudo ver qué Jungkook no observó en ningún momento la cámara si no a él.

-¡Jungkookie! Otra foto, pero mira a la cámara.

Pasaron el rato tomándose fotos, bueno Jimin tomaba las fotos mientras Jungkook "admiraba la vista", lo cual consistía mayormente en Jungkook mirando al hermoso rubio a su lado.

-Muy bien ¡vamos!.

-¿A dónde vamos ahora?.

-Siempre he querido ir a Songdo Cloud Trails ¿Podemos?

-Claro, nunca me he ido a un balneario, sería bueno tener mi primera experiencia.

-¡Entonces en marcha!

Ambos entrelazaron sus manos y comenzaron a caminar.

El sonido del flash de un teléfono hizo que Jungkook se detuviera, y volteara a ver a su alrededor, había personas tomándose fotos pero frontales y esa sonó directo a ellos.

-Pasa algo Kookie.

-¿No lo oíste?

-¿Oír que?

-Nada creí haber oído algo, sigamos.

✎୭·࣭࣪̇˖❝OPPA❞⭟ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora