U N O

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Capítulo piloto. (Ya saben cómo es, si les gusta, la sigo) 🧡🌞 

• El Tráiler de la novela lo pueden ver aquí arriba en Multimedia. 👆

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-¿Recuérdame como llegamos aquí?

-Ah si claro, deja que te recuerde, ¡me dijste que iríamos a una maldita cascada! Y ahora estamos hace horas caminando en medio de un bosque lleno de ramas, palos, árboles, piedras y ¡mierda! ¡¿eso es una araña?! -se escondió espantado detrás de un gran árbol.

-Disculpa que te corrija, pero dije que yo iría a una cascada, tú me seguiste -avanzó entre las ramas que cada vez se hacían más tupidas-. ¿Recuérdame tu nombre?

-¿Estás insinuando que no querías que viniera? -frenó sus pasos apoyando ofendido su mano en su cadera-. Y por tercera vez, mi nombre es Jimin.

-Bueno, escucha Jimin, acabo de conocerte en el hotel en el que me hospedo, y ¡oh, vaya coincidencia! también te hospedas tu ahí, y eso no nos hace mejores amigos -continuó su caminata tranquilo, observando hacia la copa de los árboles, para ver si en un milagro encontraba el camino de vuelta al hotel.

-Tendría que haber ido a la piscina con mi madre -murmuró Jimin mientras caminaba esquivando las piedras y los troncos caídos-. ¡¿Por que diablos tuve que pelearme con ella y salír solo?!

-¿Puedes acaso lamentarte en silencio? -frenó y volteó para mirarlo-. No ayudas en nada para regresar al hotel y está por caer la noche -le recriminó en el rostro. ¿Acaso ese niño no entendía la gravedad del asunto? Pasarían la noche en un maldito bosque a la intemperie si no encontraban el camino de regreso al hotel.

-Bueno -quiso cooperar tomando el celular de su bolsillo trasero-, salimos del hotel a las tres de la tarde, y son las siet-

-¡¿Tuviste un maldito teléfono todo el tiempo?! -levantó los brazos decepcionado, definitivamente Jimin no era la persona más avispada del mundo. Lo arrebató de sus manos sin siquiera pedir permiso y miró la pantalla: el celular no marcaba ni siquiera una raya de señal-. Escribiremos un mensaje a mi padre, cuando ésta cosa agarre señal se enviará, mientras tanto esperaremos aquí -se sentó sobre una roca a escribir.

Los minutos pasaron. Jimin se sentaba en una roca frente a él.

-No es por ofender tu gran intelecto, Yoongi, pero si no nos movemos, el teléfono no agarrará señal jamás...

Yoongi frente a él pestañeo repetidas veces y empujó su mejilla con su lengua: al parecer, Jimin si tenía algo dentro de su cabeza. Se levantó de la roca y comenzó a caminar entre los árboles.

-¿Acaso no discutiremos en qué dirección ír? -preguntó Jimin siguiéndolo apresuradamente.

-No.

-¿Por qué? -le recriminó.

-Porque tu puedes ir en la dirección que tu prefieras.

Jimin giró los ojos. Se había encontrado por pura casualidad con el único coreano en todo Portland, y tenía que ser un imbécil.

-Te seguiré -suspiró pesado-. Solo porque me comeré tu carne cuando mueras -dijo intentando imitar la voz de algún psicópata.

-¿Acaso eres un asesino? -Yoongi largó una carcajada burlona mientras abría las ramas frente a él para avanzar.

-¡Claro que no soy un asesino! -gritó-. Soy un maldito caníbal -susurró estirandose para hablar cerca de su oído. Esperó por una reacción, una mueca, una palabra, pero Yoongi ni siquiera se inmutó-. ¿No reaccionaras a eso?

PERDIDAMENTE © (Libro 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora