cuarentena • ateez

día 02

Seonghwa despertó a las 5:17 am. O al menos eso decía su celular cuando lo fue a ver después de que sus ojitos se abrieron. Estaba cómodamente acostado en el piso, ya que tristemente le tocaba dormir ahí, pero en realidad no se quejaba, tenía a un Yeosang acurrucadito en su costado, quien lo mantenía cálido y con una felicidad intensa en su interior.

Pero aún así se sentía ansioso, el encierro le estaba afectando lentamente, y sentía la necesidad de hacer algo más que solo dormir, o saldría corriendo por la puerta delantera sin importarle nada.

Se levantó con cuidado de no molestar a Yeosang, y maniobró entre los cuerpos abrazados y enredados de Wooyoung y San, quienes también les había tocado dormir en el piso. Cuando finalmente estuvo fuera de la zona de peligro, se dispuso a caminar por la acogedora casa del líder de Ateez.

Observó lo que parecía ser su sala de composición, con distintos intrumentos, varias libretas y hojas, algunos lápices, y su laptop en el escritorio.

Avanzó hasta llegar al baño, donde aprovechó de lavarse las manitos, porque ahora con el Covid-19 hay que tener buena higiene en las manos, lavándoselas más de veinte segundos dicen por ahí, cantándose desde el hakuna matata ya hasta el geochin padoreul neomeo. Y después se lavó su carita con agua y con jabón como pimpón, porque era un muñeco igual de guapo que él.

Bajó las escaleras y pasó por la sala, donde había un desastre producto del intento de los integrantes en jugar mafia la noche anterior, claramente eran un fracaso con ese juego.

Posó sus brazos en sus caderas y miró con el ceño fruncido aquella suciedad y desorden. Nop. No podía dejar que eso estuviera así.

Y como que se llamaba Park Seonghwa, comenzó a limpiar la sala a las 5:30 am, mientras todo el resto de Ateez dormía en el piso de arriba.

Para cuando el primero de los chicos llegó arrastrando sus pies con cara de zombie, ya eran las 9:45 am, y la sala con la cocina estaban relucientes, mientras un ansioso Seonghwa estaba cocinando miles de platillos distintos para el desayuno.

—Hyung —Murmuró un zombificado Yunho, causando que Seonghwa chillara y lo apuntara con la espátula caliente, asustando de paso a Yunho igual y que este gritara también, haciendo que Jongho apareciera rápidamente mientras soltaba un grito de guerra y llevaba una silla en sus manos.

—¿dÓNDE ESTÁ EL MALDITO QUE QUIERE DAÑAR A MI YUNHO? —Jongho tenía una expresión de furia en su rostro, pero también los ojitos entrecerrados por estar recién despertando, además de un rastro de baba marcado en su mejilla y su pijama ligeramente desarreglado.

—¡Jongho, baja esa silla! —Lo regañó Seonghwa mientras ponía sus brazos en su cadera y lo miraba con los ojos entrecerrados. —Resulta que tu novio es un zombie al despertar, y me asustó

—¡Usted me asustó a mí, hyung! —Lloriqueó Yunho acercándose a un adormilado Jongho para recibir mimos.

—Mejor vayan a la sala a ver caricaturas, que yo estoy haciendo el desayuno —Suspiró Seonghwa mientras se disponía a seguir cocinando.

Jongho observó todos los platillos que su mayor había hecho, se veían bastantes, demasiados en realidad, y eso que eran ocho personas y comían como si fueran veinte.

—Hyung, creo que ya son suficientes plat–... —Jongho fue interrumpido por una fría mirada de su mayor, causando que le dieran escalofríos y se escondiera detrás de su alto cachorrito.

—Dije que vayan a ver caricaturas —Murmuró Seonghwa intentando estar tranquilo.

—Eso haremos, hyung —Y Jongho se llevó rápidamente arrastrando a su novio hasta la sala.

Luego de un rato bajaron Wooyoung y San, los dos tomaditos de la mano mientras venían arrastrándose con rostros adormilados, simplemente para tirarse en el sofá donde Yunho y Jongho veían caricaturas, y así seguir durmiendo abrazados por un rato más.

Luego bajó Yeosang, quien al oler la comida a lo lejos, corrió hasta la cocina y suplicó a Seonghwa para que le diera de probar lo que hacía. Y como el mayor era débil ante sus pucheritos, terminó cediendo y alimentando a aquel pobre bebé.

—Ok, zoológico, ¿por qué están todos amontonados aquí? —Bufó Hongjoong mientras bajaba las escaleras y miraba a casi todos los chicos sentados en un solo sofá y viendo Scooby Doo.

—Estamos esperando que Seonghwa hyung termine el desayuno —Dijo Wooyoung medio dormido con su cabecita apoyada en el hombro de San.

—Desde hace como una hora —Bufó Yunho casi a punto de hacer una pataleta, si no fuera porque Jongho comenzó a acariciar su cabello y lo tranquilizó.

—Aunque creo que hyung se está desayunando a Yeosang —Dijo Mingi burlón sentado en el piso a un costado del sofá.

—¿Tú desde cuándo estás aquí? —Preguntó Jongho algo asustado al no haberlo visto antes.

—Yo dormí en el sofá, estoy aquí desde anoche... en teoría —Murmuró Mingi mirando de reojo a Hongjoong.

—Estos niños hormonales —Bufó Hongjoong dispuesto a parar lo que sea que estuvieran haciendo Seonghwa y Yeosang en la cocina.

Solo para encontrarse con la escena de Seonghwa cocinando frenéticamente y a Yeosang con la boquita llena de chocolate mientras comía uno de los panqueques que Seonghwa había hecho.

—Hoda hyund —Saludó Yeosang tiernamente sin poder articular bien por la comida en su boca.

—Seonghwa... creo que eso es suficiente para todos esos monos —Murmuró Hongjoong algo asustado al ver tantos platos de distintas comidas.

—Sí... creo que acabo de hacer el desayuno, almuerzo y cena —Respondió Seonghwa con un pequeño deje de timidez.

—Como para una semana —Murmuró Jongho mirando todo desde la puerta.

Y solamente era el segundo día de aquella larga cuarentena.

🌻｡y desde aquí comenzamos con los capítulos largos pq ya se está poniendo buena la cosa, ahre.
espero que les esté gustando y gracias por leer. uwu♡