El novio de mi mejor amigo|Emiliaco|

No es libre tu corazón

Me sentía demasiado cansado, eran las ocho de la mañana y María ya se había encargado de levantarnos a todos. Definitivamente quedarme despierto hasta las 3 de la mañana no había sido una gran idea, pero no me arrepentía porque la compañía de Emilio lo valía todo, además tuve la oportunidad de stalkear un poco a Niko, quizá eso no estaba del todo bien, pero necesitaba descubrir si las sospechas de Emilio eran reales.

-Pero mira las ojeras que te cargas- se burló mi mejor amigo mientras me miraba.

-Calla Nikolás- contesté de mala gana.

-Uy, eso te pasa por no dormir bien. Pues ¿qué tanto hiciste?

Mi mirada fue a dar a Emilio, él también me miró y pude ver nerviosismo en sus ojos.

-Solo estuve leyendo hasta tarde- mentí.

Al terminar el desayuno Javier propuso dar un paseo por la playa, María llevó una pelota para jugar voleibol y después de nadar un poco nos dispusimos a jugar.

-¿Quién con quién?

-Pues obvio Emilio conmigo- contestó mi mejor amigo mientras María me jalaba del brazo hacia ella.

-Tú conmigo- dijo abrazándome.

-Ay no mamen, yo no tengo pareja.

-Puedes ser el árbitro.

A Javier no le quedó de otra más que hacer caso a Niko. Cuando estuvimos listos comenzamos el juego. No sabíamos jugar muy bien, tampoco sabíamos las reglas, pero estábamos divirtiéndonos a nuestro modo. Media hora después, Mari y yo íbamos ganando, incluso Javier había dejado su puesto de árbitro para unirse al equipo contrario. Los gritos y las risas predominaban, el juego estaba en lo mejor, todo estaba bien. Estaba.

-Ay ya me cansé- dijo Niko deteniéndose a media jugada de su equipo.

-Amor no, la estamos pasando bien- pero obviamente él no hizo caso, comenzó a alejarse hasta que estuvo lo suficientemente lejos para dejarse caer en la arena- ¡Emilio!- lo llamó.

Pude verlo dudar y estoy 90% seguro de que él quería seguir jugando. Al ellos irse, dejamos el voleibol para simplemente irnos pasando la pelota. María y Javier platicaban de experiencias en la playa cuando eran pequeños, los acompañé en sus risas solo porque los veía reír, en realidad no estaba concentrado en la plática, en mi mente solo había una persona. Emilio. No había podido averiguar nada revisando sus perfiles y solo había de dos: 1. no estaba engañando a Emilio y 2. se cuidaba demasiado bien para no dejar evidencia. Quizá Emilio solo estaba exagerando al creer que Niko lo engañaba. Pero vamos, Nikolás es mi mejor amigo, lo conozco y antes de Emilio, él parecía tener un edificio por corazón, con suficientes habitaciones disponibles para todo el que quisiera entrar a pasar un buen rato.

La hora de la comida llegó, fue todo un caso decidir lo que comeríamos, pero al final no hicimos nada tan complicado, una simple pasta en salsa de champiñones cortesía de Javier. Sí, nada que ver con la playa, pero ya mañana nos encargaríamos de salir a un buen restaurante.

-De-li-cio-so.

-Totalmente de acuerdo con Joaquín, cocinas delicioso ¿verdad amor?

-Sí, ellos tienen razón- sonreí. Estaba bien tonto por el rizado, pero era novio de mi mejor amigo y eso era algo que no podía olvidar.

-¿Y qué haremos en la noche? porque estuve averiguando y hay un antro llamado "Rain" que está muy de moda- propuso María, nadie se opuso.

Después de comer, subí dispuesto a leer un capítulo de mi libro favorito. Puse un poco de música y me senté en medio de la cama. Estaba tan concentrado en la lectura que no me di cuenta cuando alguien irrumpió en mi habitación hasta que ese alguien me tocó suavemente el hombro, no pude evitar dar un pequeño brinco por el susto. 

-Perdón- susurró. 

Retiré mis audífonos y lo miré parpadeando un poco, quizá estaba alucinando por tanta lectura.

-Nikolás se durmió hace un rato y pensé que tal vez podríamos platicar un poco- continuó en un tono bajo.

-C-claro que sí- me hice a un lado para dejarlo sentarse en la cama.

-¿Qué escuchas?

-Un poco de todo- me sonrojé.

-Apuesto que estabas escuchando Ariana Grande.

-No- mentí, pero obvio él no me creyó. Hace mucho habíamos platicado acerca de nuestros gustos musicales y a él le había quedado demasiado claro que amaba a Ariana Grande después de media hora de platicarle de ella.

-No sé porqué te da pena, no es algo malo. Además ella es increíble.

-Lo sé, pero a algunas personas les resulta raro cuando les digo que su música me gusta.

-Pero yo no soy algunas personas, soy el chico choque y me puedes decir lo que sea, siempre- me regaló una de esas sonrisas que tanto me gustaban de él.

-Gracias, tú también me puedes decir lo que sea siempre.

-Hace rato ustedes se reían mucho.

-¿Quienes?

-Ustedes, cuando Niko y yo nos fuimos- lo vi jugar con sus manos.

-Ah sí, ellos estaban contado historias graciosas de su infancia.

-Me hubiese gustado escucharlas- no podía evitar sentir como mi corazón dolía al escuchar su tono tan triste.

-¿Por qué te fuiste entonces?

-Nikolás ya no quería jugar.

-¿Y tú?- no respondió- no porque sea tu novio tienes que hacer lo que él quiera ¿sabes?

-Ya he escuchado eso antes, pero no puedo solo dejarlo solo. Es mi novio.

-¿Lo quieres mucho, verdad?- él suspiró.

-Sí- algo dolió en mi pecho- creo que me gustó desde el primer día que lo vi.

-Bien- sí, no se me ocurrió nada mejor que decir. Sentía mi pecho contraerse hasta dejarme sin aire.

-¿Y tú? ¿aún no hay nadie en tu vida?

-Sí, bueno no. 

-¿Cómo?

-Es más un platónico, un imposible.

-Eso es triste- asentí- para él- lo miré confundido- eres un chico increíble. Eres divertido, humilde, inteligente, cariñoso, guapo, sensible. Eres algo así como el chico perfecto- para todos excepto para mí, le faltó añadir.

-Gracias- sonreí tímido, podía sentir mi corazón comenzar a bombear de prisa, mis mejillas arder en fuego y mi memoria tatuando sus palabras en mi alma. 

-¿Sabes? Si no...

-¡Emilio!- se escuchó desde el pasillo.

-Creo que es mejor que me vaya- se levantó de prisa caminando a la puerta.

-¡Espera!-lo detuve antes de salir- ¿qué ibas a decir?- me miró por un par de segundos que se sintieron como una eternidad.

-No es nada- dijo antes de girarse de nuevo- tal vez en otro momento- terminó y se marchó.

Me dejé caer en la cama mientras abrazaba mi libro con fuerza- tal vez mañana- susurré.

+++++

¡Hola!

Tarde pero seguro jaja espero que les haya gustado mucho, mucho.

¿Qué será lo que Emilio quería decir?

Pd: el libro que estaba leyendo Joaquín se llama "Tal vez mañana" y es mi libro favorito de la vida (por si tenían el pendiente ah).

Pd2: voy a estar actualizando mis fics toda la cuarentena una o dos por día, depende de como esté de tiempo xd

Pd3: tomen agua, lávense las manos y no salgan de casa si no es necesario♥

Les mando un chorro de besos y mucho, mucho amor♥

¡Nos leemos pronto!