[XIV] Besos con sonrisas

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Al parecer tendríamos que permanecer ocultos para que no se supiera que Sasame estaba en la villa.

Desperté con un ligero peso en mi pecho,abrí lentamente lo ojos para encontrarme con Sasa durmiendo encima de mí, esa mañana;Al rato volví a quedar  otra vez dormido,me moví por toda la cama despertando de repente con la baja colgando de lo dormido que me encontraba, salí de la cama y camine descalzo hacia el baño, de a poco podía oír el sonido del agua de la duchar caer, entre con un movimiento rápido, lave mi cara con agua y me mire al espejo, pero me hera imposible estaba totalmente empañado por el vapor, me quité la ropa para después abrir la manpara de par en par y entrar apegandome así a Sasa que pego un grito del susto que le propine recibiendo un manotazo en la cara de su parte.

Perdón Sasame. -Dije sobando la parte señalada de mi rostro con cara cansada. -

Lo siento shikadai me diste un susto. -Habló sonrojandose dándome la espalda. -

Me acerque a ella y la abrace dejando que el agua de la ducha también cayera por encima de mi, tiempo después salimos de la ducha totalmente
empapados, comencé a sacarme el pelo con la toalla el pelo y lo recogido en  mi colega habitual, por su parte Sasame ya se había vestido y se había ido a la Sala de estar, ya que yo iba a hacer el desayuno, baje y la ví descansar con el rostro pegado a la mesa un poco aburrida mirando el buen día que hacia fuera dando así un suspiro.

Jo Shikadai hace buen día. -Se quejó inflando los mofletes molesta. -

Lo se pero hasta que no haya nada arreglado no podemos salir, me tienen vigilado. -Hable  dejando los platos con el desayuno para los dos. -

Al menos invoca a Okoto por fa. -Me pidió mirándome como una niña pequeña ilusionada. -

Claro.. por qué no. -Hice unos sellos y salió una nube blanca. -

Detrás de esa nube salió un pequeño ciervo como de si un peluche se tratara.

¡Hola! -Habló el cervatillo con una voz  distinta a la habitual que estaban acostumbrados a oír. -

¡Okoto! ¡Que adorable te ves! -Exclamó Sasame sonriente abrazando a este. -

Me asfixias Sasame. -Dijo el cervatillo dándole con las pezuñas en las mejillas. - ¡Sueltame ya!

Perdón pero te ves tan adorable, que dan ganas de achucharte jo. -Sonrió tocándole con un dedo su nariz. -

Ya ya pero eso no da excusa para asfixiar. -Se quejó dandola suave con los cuernos. -

Venga vale ya. -dije riéndome de la escena. -

Comenzamos a comer mientras que Okoto corría por toda la casa debido a su diminuto tamaño, le encantaba estar por ahí corriendo.

En la tarde nos quedamos jugando a algo por el enorme aburrimiento que teníamos encima, pero el timbre sonó al momento en hizo que Okoto corriera hacia la entrada volviendo  a su tamaño original  para atacar, yo por mi parte indique a Sasame que se escondiera y intentara esconder su chakra también, ella hizo caso a lo que dije y se escondió, yo mientras tanto saque un kunai y libere el sello del Byakugou, me posicione a lado de Okoto para atacar con técnicas conjuntas.

Cuando el individuo intento entrar dejó asomar una oreja y luego el hocico.

Koei sensei ¿Qué haces? -Pregunte con una gota de sudor resbalando por mi nuca. -

Tuve que abrir con las uñas. -Se disculpó con una sonrisa nerviosa. -

Da igual. -Habló Okoto volviendo a su diminuto tamaño. -

Vaya pero si es el Rey ciervo ¿Qué tal? -Pregunto acercándose al ciervo. -

Bien. -Contestó irritado, ya que Koei cuando lo veía se lo quería comer. -

Ya vale Koei sensei ¿A que vino? -Pregunte cruzandome de brazos. -

Venía a deciros que salada sabe toda la verdad sobre el clan Fhuma. - Decía el zorro sentándose. -

Genial ¿y que? -Volví a preguntar integrado. -

Eso quiere decir que sabe que esta aquí y puede quedarse. -Sonrió ampliamente contento. -

Eso esta genial. -Sonreí aliviado. -

Quiere decir que puedo quedarme. -Habló esta vez Sasame asomada  viendo que era Koei el que había llegado. -

Si, claro que si. -Sonreí y para ir abrazarla y levantarla del sitio. -

Al levantarla le robe un beso sonriendo, dándole otro y otro.

Hasta quedar los dos a casi la misma altura sonriendo entre besos.




Ahogado •Nara Shikadai•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora