Ahogado •Nara Shikadai•

[VIII] Entrelazando mis manos con las suyas

Después de dar el pequeño paseo por el centro del pueblo, de a poco fuimos parando en tiendas del mercado para comprar verduras y demás alimentos para poder hacer la comida y la cena;Pobre Okoto le habíamos cargado con las bolsas, aunque decía que no le importaba a mi me parecía que si pero cuando le iba a quitar el peso de las bolsas del lomo me daba un sutil cabezazo apartandome, será bestia.

Ante los cabezazos que me daba al final desistí en quitarle las bolsas de encima, puse cara de fastidio y seguí a Sasame que se encontraba a un puesto más adelante de nosotros, camine despacio hasta ella con las manos en mis bolsillos y me agache a su altura para ver que estaba viendo, se encontraba comprando carne, como filetes y tal.

Mientras tanto mire de reojo al hombre que llevaba, miraba a Sasame con cara de descaro de arriba a bajo parando la mira en su pecho ya que llevaba un suéter con un escote raro pero sin ser tan insinuando, me comencé a cabrear por como la miraba de esa manera pero cuando hablo fue la gota que colmó el vaso.

Oye niña ¿Te apetece hacer algo esta noche? Tomamos algo. -Dijo con una sonrisa burlona sin dejar de mirar su pecho. -

¡¿Eh!? Yo no.. No quiero. -Dijo desviando la mirada hacia abajo incómoda. -

Oh venga. -Dijo entre risas. -

El hombre extendió la mano hacia Sasame para agarrarla pero lo de tuve a tiempo con la técnica del la sombra imitadora.

Técnica de la sombra imitadora ejecutada. -Fruncí el ceño mirándolo. -

¡¿Pero que..!? ¡Sueltame muchacho! -Me exigió el hombre cabreado. -

No. -Mi rostro se iba tornando oscuro a medida que me iba cabreando más. -

grrrhgg... -Gruñio enfadado mirándome furioso. -

Jutsu de la sombra imitadora: Sombra extranguladora. -Una sombra en forma de mano iba subiendo por el cuerpo de aquel hombre ahogandole poco a poco dejándole al final inconsciente en el suelo. -

Okoto se acercó más y miro al hombre tendido en el suelo para luego mirarme a mi alzando una ceja algo impresionado al haber dejado inconsciente a aquel tendero.

Agarre inconscientemente a Sasame por la cintura pegandola a mi aún con el ceño fruncido poniendo una mueca de enfado.

Al momento dejamos el dinero encima de la mesa, cogimos las bolsa de carne y nos fuimos de allí directos para casa, habíamos comprado de todo para poder preparar la comida y la cena en condiciones;Cuando nos quedaba un calle para llegar, mientras que iba caminando junto con Sasame y Okoto, acerque mi mano rozando la de Sasame con la mía y entre la celebración mi mano con la suya, ella correspondió con un leve sonrojo haciendo lo mismo.