Capítulo 15

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-Cielo, debemos irnos. Ya son las tres de la mañana y el camino de acá  a Jefferson es largo.

-Nos despedimos del jefe y nos vamos.-La agarré de la cintura. Nos despedimos de McCalister y fuimos al carro. Ibamos de camino a la casa, Sheryl se quedó dormida. Paré en un área de servicio y aproveché para arroparla con una manta que guardaba en el maletero, estaba haciendo frio y todavía faltaban cuarenta minutos para llegar.


-Sheryl...amor...gorda...-Intente despertarla pero nada.-Sheryl vamos... amor por favor despierta.-Abrió lentamente los ojos.

-¿Ya llegamos?

-¡Mija! Llevo que si quince minutos llamandote y no despertabas. Parecías muerta.-Se rió.

-Lo siento. Estoy cansada, muy cansada. ¿Me llevas en brazos?-Negué con la cabeza mientras sonreía.  Me acerqué a su puerta y la cogí en brazos.  Entré como pude a mi casa y la acosté en la cama. Cuando me iba a levantar ella me agarró del cuello y me tiró hacia ella. Me besó.  Reí.

-¿No que estabas cansada?

-¿Yo? ¿Cuando dije eso?-Me reí y la volví a besar. Le acaricié la espalda, ella introdujo sus manos entre mi camisa. Le quité lentamente el vestido. Ella se sentó para facilitarme el trabajo. Solo estaba en su ropa interior. Le di un corto beso en los labios.

-Ahora, a dormir.- Dije levantandome. Fui a mi armario y saqué una camiseta mia y se la pasé.  Ella se cruzó de brazos.

-¿Es en serio?

-¿Que cosa?-Pregunté.

-¡Victor!-Me reí.- No se vale que me dejes asi.

-Dijiste que estabas cansada ¿no? Ahora te duermes y listo.-Dije con una sonrisa. Me daba gracia su cara de indignación.  Parecía una niña chiquita lloriqueando por una paleta de dulce.-Deja de hacer morros y ponte eso que te va a dar frío.

-¿Y si no que me haces?

-¿Yo? Nada, es cosa tuya mi amor.

-Perfecto.- Tiró la camiseta al piso y se arropó nada mas que con el edredón. Negué.  Esa mujer era demasiado desesperante. Me acoste al lado de ella, me daba la espalda. No quería que se enojara conmigo así que empecé a darle besos en el cuello.

-Gorda no te enojes.-Ella gruñó. Le seguí dando besos en el cuello y en la espalda. Se giró y me miró.  Sus ojos verdes a la luz de la luna se veian mas hermosos de lo que ya eran.-Amor...

-Callate y abrazame.-Sonreí y la abracé. - Victor...

-¿Sí?

-¿Puedes cantarme "in my veins" porfa?

-Claro preciosa.-Comencé a cantar.- "Nothing goes as planned. Everything will break. People say goodbye, in their own special way. All that you rely on And all that you can fake Will leave you in the morning But find you in the day . Oh you're in my veins. And I cannot get you out. Oh you're all I taste. At night inside of my mouth.Oh you run away. Cause I am not what you found. Oh you're in my veins. And I cannot get you out."- Noté que respiraba más lento. Se había quedado dormida. Le di un beso en la cabeza, la abracé y me quedé dormido.


-¿Por qué no me habían contado?-Preguntó Carlos indignado cuando llegamos a la comisaría.

-Dejanos llegar por lo menos.-Le dijo Sheryl. Me reí.

-¡No! Soy uno de sus mejores amigos, okay entiendo que lo escondieran  por la prohibición aquella de los noviazgos dentro de la misma jurisdicción, pero pues ustedes saben que yo no digo nada. No dije nada la vez anterior ¿Qué me haría decir algo ahora?

-Ya Carlos, deja el drama que ayer desmontaron la tarima.

-No me parece justo.

-Ya Carlos, ya sabes, ya calmate, no acoses que molestas.- Carlos bufó. El jefe lo llamó y se fue. Sheryl y yo reimos.-Tengo papeleo atrasado. Luego te veo.-Le guiñé un ojo y me fui.

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