𝙼𝚢 𝚏𝚒𝚛𝚜𝚝 𝚕𝚘𝚟𝚎 ━ 𝚃𝚘𝚛𝚍 𝙻𝚊𝚛𝚜𝚜𝚘𝚗 & 𝚝𝚞́ (P A U S A D A)

Ｕｎｏ

Ya era costumbre levantarse a las cinco para un desayuno nutritivo, era una rutina común de siempre y cada día se levantaba solo antes de que Edd , Matt o Tom se levantasen.
Tord era alguien más atento de si mismo a comparación de sus amigos, a decir verdad, era el tipo de persona que prefería levantarse muy temprano ya sobre las cinco de la mañana y realizar una buena rutina de ejercicio a escondidas de sus amigos, comer sano y cuidarse lo necesario en lo que trataba su cuerpo. Además de que deseaba prepararse para su futuro, sus sueños de ir a la armada.

Era algo que surgió el día que Edd como los otros habían decidido ir de "vacaciones" y terminaron en un lugar lleno de soldados, la había pasado genial entre tanta adrenalina y euforia de lo que había aprendido ahí. Desde allí, Tord supo muy bien, que ese era su lugar...

━ Oh Ringo... buenos días. ━el noruego habló cuando sintió a la mascota del hogar refregar su lomo contra su pierna.━ ¿Tienes hambre, pequeña?

Un maullido fue suficiente para Larsson saber que aquel felino gris tenía hambre y claramente, no iba a tardar en darle de comer al igual que servir agua. Al parecer Edd podrá ser tan buen amo dando mimos pero olvidaba de darle agua y dejar comida a mano para la mañana. Total, Gould sabía muy bien que su mejor amigo era madrugador, por lo tanto, tenía el la suerte de que Tord pudiese darle de comer a su gata y miren, si que tenía bastante suerte.
Las croquetas de forma de pescado cayeron haciendo ligero ruido en el tazón del minino, quién, daba vueltas o movía la cola viendo al noruego guardar la bolsa de comida para gatos. Así fue como el de cuernos delicadamente agarraba los platos de Ringo para dejarlos en el costado de la pared, no se hizo esperar que aquel felino se lanzase a pasitos al plato mientras maullaba.

━ Parece que anoche Edd o Tom se olvidaron de alimentarte...━rodó los ojos hasta que volvió a lo suyo, hoy debía prepararse para salir a dar su trote de la mañana. Total eran las seis menos veinte minutos, tenía tiempo hasta para ir al centro a comprar algo para comer y las coca colas de Edward.

Decidió prepararse con su conjunto deportivo un poco mas abrigado, ya que en las mañanas siempre hacia un frío que te congelaba hasta el cabello y Tord ━pese ser nacido en Noruega y vivido unos años.━ no toleraba con orgullo ese clima jodido, bueno, es raro pero cierto.
  Luego de ajustar sus zapatillas y con auriculares al igual que el agua a mano, salió afuera para proseguir su día.

🌻

Su paseo fue de lo más normal, no había gente en la calle salvo algunos chóferes de autobuses que empezaban su jornada laboral. Unos cuantos perros que hurgaban en la basura en los callejones escondidos y donde tiran los restaurantes de comida rápida. Gente que trabajaba en empresas importantes y uno que otro imbécil intoxicado que se encontraba yendo por la calle o saliendo de un boliche ━discoteca, para algunos━.

Tord no se preocupaba mucho por ello, él sólo hizo su trote como siempre hasta que consiguió en el horario justo comprar las cosas necesarias para la hora del almuerzo. Compró las gaseosas necesarias, ya que decían que haría calor pese que en la mañana hacía frío pero, bueno, ¿Para que discutirle al clima? Y también logro conseguir hamburguesas y un poco de verduras, tal vez haría eso para los chicos.

De vuelta a casa y ya caminando con calma podía revisar su celular dónde vigilaba su lista de reproducción de canciones, era fan de la música J-pop o lofi-hiphop, o sólo escuchaba algo de rock, como Green Day. Era un chico de buenos gustos y eso, no hay que negarlo.
 Todo estuvo normal, llegó al vecindario dónde de a poco fue reconociendo las diversas casas de la calle donde Edd y él como el resto del clan viven, pensaba en que habrá sido de aquellas rubias que son o eran pareja, claramente el centro de entretenimiento de Edward y Tord ━en casos así cuando andaban bien pubertos━. Digamos que su ida fue inesperada, para el dúo, el noruego le dolió un poco ya que aun tenia un crush en ambas chicas, pese a ser lesbianas.

Fue duro en su momento, pero aquello se borró cuando vio a lo lejos y justamente en la vieja casa de Kim & Katya, llegaba un camión de mudanzas junto a ello un auto pequeño que, podría deducir en su lejanía, podría ingresar cuatro o cinco personas en el vehículo. Tord le llamó la atención la llegada inesperada de un nuevo o nueva vecina al lugar, justamente pensó que nadie habitaría al lado nuevamente aparte de Eduardo. Al acercarse fue viendo como los hombres bajaban y se hablaban para apurar el tráfico de las cosas a la casa.

Se quedó observando cuando pasó al otro lado, llegando a su terreno hasta ver que del auto salía una chica. Prestó atención al detalle de ser una mujer, pues mantenía una figura llamativa para el noruego lo cuál provocó que arrugara la nariz y se quedó parado como idiota viéndola, a ver como era...
Claro, aquél chico no esperaba que una niña nueva le fuese a cautivar por una sonrisa dulce y feliz. Un rostro con pequitas que daba hasta por la nariz y cabello negro, ojos celestes como zafiros. Era bella...