Capitulo 18

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(POV Lydia)

Después de salir del edificio en donde se estaba hospedando Austin me dirigí a la oficina de mi madre.
Tenía que hablar con ella... Tenía que arreglar todo.

Presente mi identificación y pude entrar de manera rápida al edificio debido a que, al ser la hija de la directora ejecutiva de la empresa, tenían la orden de permitirme el paso en todo momento.
Después de entrar me dirigí a la oficina de mi madre.
Y ahí estaba... Sentada en su escritorio revisando documentos.

Me acerque hacia ella hasta estar frente a su escritorio.

- ¿Qué necesitas? - preguntó sin mirarme

- Hablar contigo... Más específicamente arreglar las cosas...-

Antes de que dijera algo más un hombre apareció en la puerta y habló

- Directora la reunión comienza en 5 minutos -

- Voy para allá - dijo y colocó los documentos en una carpeta para después levantarse.

El hombre se quedó esperando a por ella.

Cuando mi madre estuvo delante de mi me miró y habló.

- ¿Qué has venido a decir? Si no es importante puede esperar para más tarde

- Es importante... Pero posiblemente me lleve más de los 3 o 4 minutos que tienes antes de tu reunión...

- Entonces puede esperar

- Mamá...

- Sabes que no me gusta dejar de lado mi trabajo - dijo al pasar a mi lado y se fue.

Lo había intentado... Aunque probablemente pude haberlo hecho mejor...
Aún así, para mí, fue conveniente que aquel hombre apareciera... Porque no tenía idea de lo que le iba a decir a mi madre.

Después de eso salí de su oficina.
Hablaría con ella más tarde, pero aún así tenía que pensar con exactitud lo que le iba a decir.

Comencé a caminar por la orilla del mar cuando recordé a Austin.
Tal vez debería llamarlo y agradecerle por todo lo que había hecho por mi...

Cuando saque mi celular del bolsillo de mi pantalón, este se encontraba apagado.
Inmediatamente lo encendí pero más tardo en encender que en volver a apagarse.
Era evidente que la batería se había agotado.

Al final me dispuse a ir al muelle a pasar el rato. Tal vez relajarme me ayudaría a pensar mejor las cosas.

Me senté en un muro pequeño que formaba parte del muelle.
Me dedique a solo mirar el mar.
Justo en ese momento una parte de mi comenzó a cuestionarme... Comencé a captar la situación en la que me encontraba.

¿Estás segura de esto?
¿Realmente vas a hacerlo?
Esta sucediendo ahora
¿Qué vas a hacer?
¿Sabes que realmente puede salir mal?
¿Realmente es lo que quieres?
¿Vas a poder sobrellevar lo que ocurra?
¿En verdad está pasando esto?
¿Todo va a terminar aquí?
¿Y si mejor lo olvidas?
¿Y si mejor continuas como si nada hubiera pasado?

Estaba asimilando todo. Tal vez antes había tomado las cosas a la ligera...

El tiempo paso rápidamente.
Cuando note que el sol comenzaba a ocultarse me decidí a ir a casa.

¿Y si mejor acabamos con esto... Si ahora enserio terminamos con esto?

Este último cuestionamiento me paralizó... ¿Debería?... No. No podía permitirme esa debilidad.
No de nuevo... O volvería a arrepentirme.
Me precipite a bajar de aquella parte de cemento en la que me encontraba sentada y al levantar la mirada pude encontrarme con la de Austin, el cual se encontraba bastante agitado.

Érase una vez nosotrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora