Érase una vez nosotros

Capítulo 30

Las últimas clases avanzaron rápido, y al final del día, como de costumbre, Austin me llevó a casa.

- Este fin de semana iré a la playa con mis amigas -

- ¿Enserio? ¿A cuál playa irán? -

- No lo se, Cristi dijo que era un secreto. Ella pagó el viaje, pero sólo nos dijo que iríamos a la playa. Al parecer quiere mantenerlo en secreto hasta que estemos ahí -

- Ha, entonces existe la posibilidad de encontrarnos ahí -

- Sería mucha casualidad. Si nos llegamos a encontrar pensaría que me estas siguiendo -

- ¿Entonces no crees en el destino? -

- Solo digo que sería mucha coincidencia encontrarnos allá, y más aún cuando sabes que iré a una playa -

- Jajaja no soy un acosador Lydia, se darte tu espacio -

- Bien entonces - dije y comencé a desabrochar mi cinturón.

Él bajo del auto y camino rápidamente para abrirme la puerta.
Colocó su mano en la parte superior del marco de la puerta del auto para evitar que me golpeara y me dio la mano para ayudarme a bajar.

- Como siempre eres todo un caballero ¿Cuantas novias has tenido antes que tienes tanta experiencia en quedar bien con las mujeres? -

- Eres mi primer novia, y la primera con la que hago todo este tipo de cosas ¿Sabes? Cuando estoy contigo actúo de manera automática. Es como si supiera que hacer -

- Eso es lindo... Pero no quita el hecho de que hayas estado con otras antes - dije haciendo una mueca para después caminar a mi casa

- ¿Te vas a poner celosa por algo como eso?

Le saque la lengua a modo de juego y entre a casa

Por su parte solo alcance a ver una sonrisa de ironía.

Si, en cierto modo me molestaba, pero prefería dejarlo, pues no valía la penas molestarme por cosas del pasado, después de todo nada se podía hacer.

Bien, ahora tengo que arreglar mi maleta

Aliste todo lo necesario para el fin de semana y después hice mis pendientes de la universidad.

Me esperaba un fin de semana de descanso y diversión.

Al siguiente día me levante temprano y después de recibir un mensaje de Ana, el cual decía que pasaria por mi, salí de casa y me dirigí a su coche.

- Lamento que siempre seas tú quien conduce - dije caminando hacia el maletero del auto

- No pasa nada, igual es mejor a arriesgar mi vida - dijo ayudándome a subir mi maleta

- Jaja tienes razon, eres la mas indicada para mantenernos con vida - dije y cerramos el maletero para después entrar al auto.
Yo iba de copiloto

Pasamos por las demás para finalmente comenzar nuestro viaje

- ¿Ana sabes a donde vamos? - pregunto sarahí curiosa

- No

- Pero yo si, asi que yo conduzco - dijo Cristi

Ana estacionó el auto y cambio de lugar con Cristi para después comenzar a conducir

- Solo con cuidado - dijo Sarahí

- ¿Así? - dijo mientras comenzaba a golpear el volante con ambas manos