Abro los ojos lentamente, y los cierro de golpe. Las cortinas de mi cuarto están abiertas y el sol me llega directamente a la cara. Cubro mi cara con la almohada.
¿Que hora es?
Retiro lentamente la almohada y miro sobre la mesita el reloj. 8:45. Oh bien, yo solo...
- ¡LLEGO TARDE!
Tiro las sabanas al suelo, me levanto y tropiezo con ellas.
Me las arreglo para levantarme y entro al baño. Me lavo la cara rápidamente, me seco, la toalla se cae al suelo, la recojo, se vuelve a caer.
- No te quería colgar de todos modos - dije mirándola con desprecio y sacando la lengua
Voy hacia mi armario cuando toalla ninja aparece. Vuelvo a caer de cara al suelo.
Pateo la toalla vengativa y abro mi armario. Me visto y luego me miro al espejo. Estoy decente para despertar así, ¿No?
Bajo las escaleras saltando de tres escalones y llego a la cocina. Mamá me sirve el desayuno
- ¿Te quedaste dormida? - dice mientras coloca unas tostadas frente a mi.
-Si yo... - olvidé mi mochila arriba - ¿¡POR QUE!?
Subo las escaleras, cojo la mochila... la miro fijamente...
Y la lanzo escaleras abajo.
Me coloco la mochila al hombro, cojo una tostada, le doy un mordisco.
- Que la suerte este siempre de mi lado - digo para luego despedirme de mamá y caminar a la puerta.
Comienzo a correr como si tuviera a tres asesinos detrás mio, ¿Mencione que voy caminando a la escuela? ¿No? ¿No? Pues, es una maratón ahora mismo. Y no soy atlética. Parezco cualquier cosa menos algo normal.
Al llegar a la escuela estoy jadeando, y debo de parecer perro ahora.
Pero solo fueron unos metros... no es mucho.
Calla. Consciencia, no es el momento.
Voy pensando en que excusa dar "Profesor, es que... el pez del primo del amigo del vecino del tío del abuelo del perro se murió... y si, es trágico." cuando no noto a una persona caminando frente a mi. Chocamos y al recuperar el equilibrio solo tiendo a bajar la cabeza.
- Lo siento - me disculpé y seguí caminando. Era un chico (o un gigante), pero no me importó parar a ver quien era.
Y llegué a clases. Toco la puerta y el profesor me mira fijamente. ¿Me va a dejar entrar o algo? Me indica con la cabeza que entre, y eso hago.
- Oh señorita Park, es una sorpresa verla, creí que no vendría.
- Es que... me quedé dormida. - respondí incómoda bajo la mirada del profesor.
- Bueno, entre. ¿Piensa quedarse ahí todo el día? - dice con ironía.
La clase suelta unas risas y yo bufo aburrida.
Entro y me dirijo al asiento de atrás junto a la ventana. Scott, mi mejor amigo, esta sentado junto a mí.
- ¿Te quedaste dormida? - asiento - ¿Te caíste? - asiento nuevamente
- ¿Tienes cámaras en mi cuarto? - pregunto.
- Sip - lo miro sorprendida - ¡ES MENTIRA! -me calmo y río.
- Voy a revisar mis peluches por tu culpa - digo y ahora el ríe.
- ¿No te gustaría tener un acosador tan lindo como yo? - pregunta.
- ... No... gracias por la oferta - me guiña un ojo
- Sigue en pie - dice
Cuando suena el timbre, me despido de Scott y me dirijo a la cancha de fútbol y espero a mi amiga Julie, que esta en Matemáticas.
- ¿¡POR QUE LENGUA Y MATEMATICAS TUVIERON QUE TENER UN HIJO Y LLAMARLO ALGEBRA!? - ahí está. Julie me mira - Oh, hola. Es lo peor. ¿No crees?
- Supongo. - miro a la cancha - ¿Tan difícil estuvo la clase? - vuelvo a mirarla
- La señorita Jefferson nos tortura. Y Marvin le recordó la tarea que "casualmente" - hace comillas con los dedos- todos olvidamos hacer. Pero "casualmente" - comillas de nuevo - el no. ¡Y "casualmente" le pusieron la mejor nota mientras "casualmente" a nosotros nos castigan! No es justo - suspira
- Oh si, la vida casualmente es tan dura. - digo sarcásticamente, bromeando.
- Ahí esta Alex - dice y volteo hacia todos lados buscándolo - ¡Mentira! ¡JAA!
- No es gracioso - murmuro, ella se ríe levemente - Es tema confidencial.
- Está bien, ¿Vamos? - pregunta, yo asiento.
Caminamos entre las gradas, subimos unos pocos escalones y nos sentamos al centro de todas. Unas chicas que venían nos observaron con odio, y se fueron a sentar en las gradas mas alejadas de nosotras.
El equipo entra a la cancha y no puedo evitar soltar un chillido, son tan... Pero especialmente Alex, el co-capitán del equipo de fútbol, el que siempre últimamente ha logrado captar mi atención y pensamientos, pero el ni si quiera sabe que existo.
Al comenzar el partido, Alex recorre todas las gradas y me queda viendo, luego de eso se acerca a uno de sus compañeros.
- ¿Viste eso? ¡El te miró! - dice sorprendida Julie - Ahora tienen que vivir felices para siempre.
- Julie, creo que-
- Felices. Para. Siempre. - dice lentamente
- Ok, ok, calma - digo nerviosa - además, nunca me presta atención ¿por que cambiaría ahora?
Algo me golpea la cara, justamente en la nariz. La pelota. Comienzo a sangrar, coloco una mano sobre la nariz, y la retiro al sentir la sangre.
- ¡OH DIOS MIO ME ESTOY DESANGRANDO! - digo alterada - ¡ME DESANGRO! Y estoy mareada... ¡PERO ME DESANGRO!
Traté de avanzar pero casi caigo, así que me apoyo en el respaldo del asiento de enfrente.
- ¿Estas bien? - dijo un chico a mis espaldas, me doy vuelta y veo a Alex hablándome - Lo siento, golpeé mal y bueno, te golpeó a ti... Oh, te esta sangrando la nariz. ¡Mira! ¡Acabo de rimar! - dijo contento.
- ¿Me vas a enseñar a rimar o algo? - dije aburrida de su actitud infantil.
- Ah, es que al parecer si te sangra la nariz, y te he golpeado yo, tengo que llevarte a la enfermería - dijo obvio
- Puedo caminar sola - di un par de pasos, casi caigo de nuevo, pero Alex me sostuvo.
- Pues... Parece que no.
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Mi idiota, ¿Mi problema?
RomanceAmy y Alex son polos opuestos. Una chica tímida y un idiota de primera. Lo único que tienen en común es que ambos nombres comienzan con la misma letra. ¿Por qué habrían de juntarse ahora? "- Aguafiestas - Idiota - ¿Es que no te cansas de llamarme as...