Mi pie temblaba contra el suelo constantemente provocando un ligero movimiento en mi pierna. Noté como la mano de Logan se colocó un poco más arriba de mi rodilla, intentando calmarme. Pero yo no levanté mi vista del suelo. Seguí llorando. Los cuatro nos encontrábamos en un silencio completo, lo único que se escuchaba eran los pequeños sollozos de Danielle.
Oliver llamó a los padres de Andrea, quienes ya estaban de camino. Eran las 05:00 am y llevábamos en el hospital desde la 01:43 am, y aún no teníamos noticias de Andrea. Lo único que sabíamos es que la caída hizo que se diese un fuerte golpe en la cabeza.
Cuando llegaron los padres de Andrea, nos dijeron que nos fuésemos a casa, que su labor era quedarse allí. Danielle decidió quedarse con ellos, cosa que les pareció bien.
-Cuando sepais algo por favor decidme.- les recordé antes de irnos.- Y lo siento por todo lo ocurrido.
-Tranquila, eso haremos.- Me dijo su padre. Oliver, Logan y yo, nos dispusimos a salir del hospital.
-Yo me voy a casa.- Dijo Oliver.- Descansad. Hablamos mañana.- Me dio un abrazo y se marchó, dejándome sola con Logan.
-Bueno, hasta mañana.- Dije sin mirar a Logan. Me di la vuelta y comencé a caminar.
-No voy a dejar que te vayas sola.- Me dijo agarrandome del brazo.- Vamos a mi casa, queda más cerca que la tuya.
Asentí sin fuerzas y me rodeé el cuerpo con mis brazos como pude, estaba helada. Con las prisas, cerré el local dejando todas las cosas dentro. Iré a buscarlas mañana.
-Toma.- Me dijo Logan ofreciéndome su chaqueta.
-Gracias.- Cogí su chaqueta y me la puse. Me quedaba enorme, pero servía para quitar el frío.
-Estamos llegando.- Comentó Logan. Ya llevábamos varios minutos caminando. Con todo lo que había pasado, no me di cuenta que de verdad me había invitado a dormir en su casa.
Pocos minutos después entramos en su casa. Mandé un mensaje a mis padres para que no me esperasen a desayunar y les dije que llegaría a la hora de comer. Logan hizo un par de cosas abajo, cerró la puerta y me dijo que le siguiese, y así lo hice hasta que entramos a su habitación.
-Te voy a dejar una camiseta para que duermas más cómoda.- Me dijo sacando una camiseta negra del cajón.- Puedes ir al baño a cambiarte; es la puerta de enfrente a la mía.
Asentí y salí de la habitación. Fui al baño y me quité el conjunto desganada. Me puse la camiseta de Logan y al instante un olor masculino me invadió. Olía demasiado bien. La camiseta me llegaba a la mitad del muslo, pero me daba igual. Recogí mi ropa y volví a la habitación de Logan.
Al entrar, cerré la puerta y me percaté de que Logan estaba sin camiseta. Joder, tenía un cuerpazo de escándalo. Le miré a los ojos y vi que me estaba mirando sonriente. Mierda.
Deje mi ropa en la silla del escritorio y me senté en la cama con la cabeza mirando al suelo.
-Ven aquí.- Dijo detrás de mí. Me abrazó por detrás. Me giré entre sus brazos como pude, rodeé su cintura con mis brazos y escondí mi cabeza en su pecho. Él me abrazó fuerte, haciéndome saber que estaba ahí, apoyándome.- ¿Dormimos un poco?- Preguntó mientras me cogía del mentón para que le mirase a la cara.
-Sí.- Susurré, pero mi voz se quebró. Logan se separó de mí y se metió en la cama. Le imité y me metí junto a él. Ambos nos quedamos mirando al techo, hasta que me giré hacia él y lo abracé.- Gracias.- Murmuré y le di un beso en la mejilla. Agaché la cabeza y cerré los ojos.
Cuando me desperté Logan no estaba a mi lado. Empecé a mirar a todas partes, era la segunda vez que estaba en su habitación pero en la primera no me dio tiempo a fijarme en nada. Me di cuenta de que no tenía ninguna foto de su familia, pero sí de una chica. Miles de preguntas se me pasaron por la cabeza, como era normal cuando estaba con él.
Me levanté de la cama con intención de acercarme a la foto, pero en ese momento Logan entró a la habitación.
-Buenos días.- Dijo sonriendo y cerrando la puerta.- ¿Estás mejor?
-Hola.- Sonreí y asentí con la cabeza.
-Me alegro.- Contestó sentándose en la cama.- Vi que Oliver me mandó un mensaje, al parecer va todo bien. Dentro de lo que cabe claro.- Suspiré aliviada y me senté a su lado.
-Me duele la cabeza. Ayer bebí demasiado.- Dije haciendo una mueca y poniendo una mano sobre mi frente. Me dejé caer hacia atrás, haciendo que mi espalda descansase sobre el colchón.
-Lo sé, no paré de mirarte todo el rato.- Confesó. Le miré a los ojos, pero decidí cambiar de tema.
-¿Por qué te presentaste con Isabella?- Pregunté decepcionada.
-No lo sé. Me mandó un mensaje cuando llegue a casa preguntándome si iba a ir a la fiesta. Yo la dije que sí, y me preguntó si podía ir conmigo. No caí en el hecho de que no estaba invitada.
-Está bien.- Suspiré.- No pasa nada.- Dije.- ¿Por qué ibais de la mano?
-Me la dio cuando llegamos a la puerta. Y no sé porque no la aparté.- Dijo mirándome. Me incorporé y le miré.
-Tengo borrosas algunas escenas, pero... Casi nos besamos, ¿no?
-Sí.- Respondió sonriendo.- Pero el grito de Danielle hizo que nos separasemos.
-Si no nos hubiese interrumpido, ¿me hubieras besado?
-Supongo que sí, pero no paraba de pensar en el beso que le diste tú a Adam.- En ese momento el beso con Adam apareció en mi cabeza. Se me había olvidado por completo.
-Lo hice para ponerte celoso.- Susurré tan bajo que casi no me escuché ni yo misma y agaché la cabeza.
-Pues lo conseguiste.- Respondió.- Aunque también me dijiste que no querías tener nada conmigo.
-Me gustas, Logan.- Le dije mirándole a los ojos.- Pero no sé cómo tratarte.
-No entiendo el por qué, ayer tenías razón, no te trato como te mereces.- Soltó.- Y para que lo sepas, tú también a mi.
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Inefable
Teen FictionEn ese momento Logan me cogió la cara con las dos manos para que le mirase. Me limpió las lágrimas en silencio y me acarició las mejillas con los pulgares. Juntó su frente con la mía y a los pocos segundos, sus labios rozaron los míos. Tenía muchas...