Capítulo 23.

6 6 5
                                    

Hoy era el día de Nochebuena. La madre de Logan desde que se levantó ha estado cocinando muchas cosas para la cena de esta noche. Me ofrecí varias veces en ayudarla, pero su respuesta siempre era la misma: "De eso nada, tú eres la invitada." El padre de Logan fue quien ayudó con la comida mientras que Logan y yo jugábamos con Luca.

-Estoy lleno.- Dijo Luca tumbándose en el sofá y poniendo una mano en su estómago.

-Has comido demasiado.- Dijo Logan. Yo asentí mientras reía.

-¿Podemos salir al jardín y jugar a algo?- Preguntó Luca.

-Vale.- Respondí yo poniéndome de pie.

Los tres salimos al jardín y nos tumbamos en la hierba.

-¿A qué quieres jugar enano?- Preguntó Logan revolviendo el cabello de Luca.

-Veo veo.

-¿Qué ves?- Pregunté y después de hacer la rima completa, Luca nos dijo que lo que veía empezaba por la letra A.

-¿Árbol?- Preguntó Logan.

-No.- Dijo Luca negando con la cabeza y riendo.

-¿Arbusto?- Pregunté yo.

-No, tampoco. Sois pésimos jugando.- Volvió a reír.

-Luca no hay nada más que empieza por A aquí.- Protestó Logan.

-Sí lo hay, solo que no se ve.- Dijo el pequeño cruzándose de brazos.

-El juego se llama 'veo veo' por algo.- Dijo Logan.

-No se ve con los ojos pero se sabe que está presente.- Comentó Luca jugando con las pequeñas hojas.

-Eres un tramposo.- Mencionó su hermano en ese entonces. Yo me reí.

-Está bien. Pues cambio de palabra.- Dijo un poco molesto.- E.

-¿Estatua?- Pregunté.

-¡Sí!- Exclamó Luca alzando los brazos.

-Genial, me toca.

Estuvimos jugando durante un buen rato hasta que Luca se aburrió de jugar. Me encantaba pasar tiempo con él, era muy tierno. Lenna había venido a buscarle para ir al parque y él lucía muy nervioso. Se levantó corriendo y entró en la casa.

-Por cierto.- Volvió a asomar la cabeza y Logan y yo le miramos.- La palabra que no se veía era amor.- Dijo y corrió escaleras arriba.

-Me encanta tu hermano.- Dije mirando a Logan.- Es el niño más adorable que existe.

-¿Me vas a cambiar por él?- Preguntó Logan haciendo un puchero.

-No.- Respondí pasando mi mano por su nuca.- Nunca haría eso.

-Eso espero.- Se acercó a mí y me besó.- ¿Qué te apetece hacer?

-No sé, cualquier cosa.- Contesté.- ¿Tú quieres hacer algo en especial?- Logan negó con la cabeza y se tumbó en la hierba agarrandome de la muñeca para que me tumbase junto a él.

Me dio un beso corto en los labios, lo que me hizo sonreír. Logan iba a decir algo pero en ese momento mi teléfono comenzó a sonar. Iba a cogerlo pero Logan se me adelantó.

-Hola rubia.- Dijo cuando descolgó el teléfono.

-Decidme que estáis igual de aburridos que yo y que vamos a quedar ahora mismo.- Oí decir a Andrea.

-Eres lista.- Escuché decir a Logan y reírse al instante.- Estamos en mi casa, vente.

-¡Voy!- Dijo mi amiga, y oímos cómo corría escaleras abajo para ir a casa de Logan. En menos de dos minutos sonó el timbre y Logan fue a recibirla.- Hola amiga.- Sonrió y se tiró encima de mí.

-Pesas mucho.- Me quejé. Ella solamente río, sin apartarse de encima.- Eres una pesada, quítate.- Dije y la empujé haciendo que rodase.- ¿Sabes? Tu hermana tiene novio.- Dije sonriendo con maldad. Andrea siempre quería el bien para Lenna y no quería que nadie la lastimase.

-¿Quién?- Preguntó mirándome. Logan se sentó enfrente mío.

-Su hermano.- Dije y señalé a Logan.

-¿¡Qué!?- Exclamaron los dos a la vez. Este momento era demasiado gracioso.

-Es broma.- Reí al ver sus rostros.- Vuestras caras.- Me puse una mano en la boca para intentar dejar de reír.- No son novios, pero sé que a Luca le gusta Lenna y de seguro a Lenna también le gusta Luca.

-Qué bonito.- Mencionó Logan.

-Son pequeños pero son tan tiernos.- Dije sonriendo.

-¿Voy a ser tu cuñada?- Preguntó Andrea de repente.- Tiene gracia el asunto.- Logan se quedó pensativo durante unos segundos, y después se levantó y se sentó al lado de mi amiga.

-¡Cuñada!- Exclamó Logan revolviendo el pelo de Andrea.

-¡Quita!- Gritó mi amiga.- No voy a poder con esto.- DIjo cruzándose de brazos. Yo reí a carcajadas al ver esa escena. Eran demasiado graciosos.

-Le voy a decir a Luca que haga lo que sea por gustarle a Lenna.- Guiñó un ojo a mi amiga quien simplemente le miró mal.- Seremos grandes cuñados, además vivimos al lado y nos veremos muy a menudo.

-No puede ser real esto.- Comenzó a decir Andrea.- Menos mal que ahora ya me caes bien, porque sino tendríamos más de un problema.- Acabó sonriendo.

-Son más maduros Luca y Lenna que vosotros.- Reí al verles, era una situación muy graciosa.

-No te lo voy a negar.- Dijo Logan.

Un rato después Andrea fue a por Lenna y se fueron a su casa ya que tenían que ayudar a su padre con los preparativos para la cena. Logan y yo estábamos en el salón con Luca mientras que su madre estaba duchándose y su padre estaba poniendo la mesa.

-¿Te ayudo?- Pregunté.- Me sabe mal que pongas la mesa tú solo.

-Solo queda de poner los cubiertos.- Respondió.

-Voy.- Contesté antes de que pudiera decir algo más. Me solté del agarre de Logan y me dirigí a la cocina a coger los cubiertos para colocarlos.

Cuando bajó la madre de Logan la ayudamos con todos los preparativos que faltaban. Realmente me sentía muy cómoda, sus padres me trataban genial y me hacían sentir como en casa, aunque debo admitir que todavía me encontraba algo nerviosa.

-¿Falta algo más?- Preguntó Logan.

Su madre negó con la cabeza.

-Pues venga, a cenar.- Dijo su padre. Nos sentamos todos en la mesa y empezamos a comer. Ya eran casi las nueve y media de la noche.

-Alex, cariño, ¿qué vas a estudiar el año que viene?- Preguntó la madre de Logan.

-Diseño de interiores.

-Qué genial, yo estudié arquitectura. Podemos formar un equipo, yo diseño el edificio y tu lo decoras.- Bromeó.

-Me encantaría.- Sonreí y miré a Logan quien me miraba con una sonrisa en su rostro.

La cena transcurrió de manera muy agradable. Hablamos sobre muchos temas y Logan estuvo en todo momento muy atento conmigo. Al acabar, recogimos entre todos la mesa y nos sentamos todos en el sofá a esperar que fueran las doce de la noche. Luca, mientras tanto, se puso a contarnos chistes, los cuales eran bastante malos, pero he de confesar que a mi me hacían mucha gracia.

Sobre las doce menos diez, el padre de Logan nos indicó a todos que fuéramos al jardín. Al parecer siempre tiraban algún fuego artificial por el cumpleaños de Logan.

-Ahora vuelvo.- Dije y me subí a todo correr a por los regalos de Logan, así, cuando dieran las doce ya los tenía abajo preparados.

Cuando bajé, los posé en el sofá y me dirigí al jardín donde estaban todos. A las doce en punto, los padres de Logan encendieron el fuego artificial y en pocos segundos el cielo estaba iluminado por colorines. Se acercaron a felicitar a su hijo y Luca corrió hacia su hermano. Aproveché para entrar a por la bolsa con los regalos y volví a salir. Los padres de Logan y Luca nos dejaron solos. Me acerqué a él.

-Feliz cumpleaños y feliz Navidad.- Me puse de puntillas y le di un pequeño beso para luego entregarle los regalos. 

InefableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora