ZONA 127 (Neo Zone)

C A P Í T U L O 1: L A M I S I Ó N (P A R T E II)

05:05 PM

Una vez fuera de la sala de vigilancia, Mark estacionó el carrito. Gracias a las indicaciones dadas por Haechan, y a que Taeil había apagado las cámaras del trayecto, sin dificultad Mark logró llegar hacia su primer objetivo.

_ Estoy afuera _ habló Mark a través del intercomunicador. 

_ De acuerdo, la puerta debería tener un sistema de control de acceso. Usa la tarjeta que te di y podrás abrirla, pero debes ser rápido porque emite un sonido cuando la cerradura se abre _ indicó Taeil.

Sin hacerse esperar, Mark deslizó la tarjeta. La cerradura se abrió, y el sonido alertó a los dos hombres que yacían en la habitación.

_ ¿Qué demonios? _ articuló uno de ellos.

Sin embargo, con total velocidad, Mark abrió la puerta y dejó caer dos esferas al interior, para luego volver a cerrar la puerta. Ambos hombres se miraron extrañados, y antes de que pudiesen hacer algo al respecto, ambas esferas dejaron escapar un gas que inundó la habitación.

_ Listo _ dijo Mark.

_ Cuenta hasta 120 y podrás entrar de nuevo _ dijo Haechan.

_ Solo avísame cuando pasen dos minutos..._ resopló Mark.

Al pasar aquellos minutos, el pelinegro pudo hacer ingreso a la sala de cámaras. Como el gas era de rápida dispersión no iba a generar ningún daño a Mark, sin embargo a aquellos dos hombres los había hecho dormir profundamente.

_ Estoy dentro _ dijo el pelinegro.

_ Muy bien. Como las cámaras de seguridad están conectadas a un sistema de alerta, si todas son apagadas simultáneamente pueden emitir una señal y avisar que ha ocurrido un apagón...o que alguien las desconectó. Por lo tanto, debemos apagarlas luego de desactivar el código de seguridad _ habló Taeil.

_ ¿Y cómo demonios hago eso? _ preguntó Mark, observando las máquinas y aparatos que yacían frente a él.

_ Tú solo sigue mis instrucciones _ dijo Taeil, y luego se dirigió a Haechan _ te dejo a ti el mapa por un momento, concéntrate.

Mark suspiró.

_ Debimos dejarle esto a Haechan...

_ ¡Se los dije! _ habló el aludido.

05:25 PM

Dentro de la habitación de Max Changmin, Jungwoo movía sus caderas rítmicamente sobre este. Lo habían hecho alrededor de tres veces, y de no ser por el somnífero que había puesto el castaño en la bebida de Changmin, estaba seguro de que podrían durar más tiempo de esa forma, pues su objetivo era bastante insaciable en la cama.

Lo que más le gustaba a Jungwoo de aquel trabajo era acostarse con los apuestos hombres que debía enganchar. Claro que en más de una ocasión había tenido que acercarse a hombres que no eran de su total agrado, sin embargo, Jungwoo era astuto, y sabía exactamente qué hacer para no acostarse con ese tipo de hombres y hacerles creer que si. Pero Changmin era diferente, era totalmente su tipo. Pero la droga...ya lo había mandado a tierra.

_ ¿Ya te dormiste? _ preguntó Jungwoo, cesando su actividad cuando notó que Changmin no respondía a sus movimientos, y golpeó sutilmente su cara para cerciorarse de que así era _ eh...que desperdició _ se quejó el castaño.

Se puso de pie, y buscó su chaqueta, en la que yacía el micrófono que utilizaba para comunicarse con los chicos, para encenderlo.

_ Changmin ya se murió _ habló, lo que fue oído perfectamente por Haechan, Doyoung y Taeil que seguía indicando a Mark como apagar las cámaras.