EL REGRESO DE ZOE.

13. El desmadre

EL REGRESO DE ZOE

Capítulo 13.

—Especial Nathaniel—

Dicen que el amor no se puede ocultar y justamente eso fue lo que yo hice todo este tiempo. Desde que conocí a Esmeralda me gustó pero me di cuenta que no era tan buena persona y por eso decidí dejar todo por la paz, aunque eso no me sirvió de nada porque me gustaba cada vez más aunque la ignoraba lo más que podía. Cuando Zoe me contó lo que hizo Esmeralda para que ella estuviera con Alex me hizo sentir bien porque eso solo quiere decir que no es tan mala y me alegra que puedo ir a buscarla.

Me bajo del auto en un enorme apartamento y toco la puerta sin pensar, sigo tocando pero nadie abre así que doy media vuelta para irme, estoy por irme en el auto cuando veo a Esmeralda bajarse de un auto pero vine acompañada de un chico. Se da cuenta de mi presencia y parece un poco nerviosa, le doy una sonrisa y no sé que le dice al chico que se va y camina hacia mí.

—Disculpa si interrumpí algo —me excuso—. Si quieres puedo venir después.

—Quédate —se me acerca más—. ¿Por qué siempre tienes que huir de mí?

—Somos adultos y creo que debemos hablar con la verdad, Zoe me ha dicho que te gusto...

—No te mintió —me interrumpe—. Nunca me has prestado atención, a pesar de que buscaba cualquier excusa para hablarte.

—Pensé que tú no eras para mí, pero debo decirte que me gustas, me has gustado siempre —me acerco más—. No sé si me voy a arrepentir por hacer esto, pero debo hacerlo o créeme que moriré.

Antes que reaccione me adueño de sus labios, la pego a mi cuerpo y Esmeralda me corresponde el beso con más intensidad. La pego al auto mientras devoro sus labios que hasta hora son los mejores que me han besado. Su mano se mueve en mi cabello para intensificar el beso y gime cuando tiro de su labio.

—Dios... —sonríe—. Besas malditamente bien, valió la pena la espera.

—Sí que la valió —suelto una risita.

—¿Después de esto qué somos? No soy de andar en relaciones serias, pero si tú quieres algo conmigo yo me arriesgo porque en serio te quiero, ya sé que me he portado como una idiota pero lo que siento por ti es real.

—Tan real como que quiero que lo intentemos —suelto de repente y se me tira encima para abrazarme—. Eso es un sí entonces.

—Claro que es un sí, bobo —se aleja—. Espera, Zoe no estará de acuerdo, nunca hemos sido amigas.

—Por ella es que estoy aquí, me dio un sermón y mírame aquí —me mira sorprendía—. Zoe es como una hermana y la quiero demasiado, no quiero que haya problemas entre ustedes.

—Se nota que la quieres, por eso sentía odiarla porque los veía muy juntos, pero después me di cuenta que la chica no es mala y que tampoco es todo lo que dice Clarine.

—¿Dime algo, sabes dónde está Clarine?

—De hecho, me llamó para que le llevara comida y ropa, está en una cabaña que alquiló, le dije que no llevaría nada porque siempre me trata como quiere.

—La vas a llamar y le dirás que sí le llevarás todo eso, Clarine intentó matar a Zoe, y terminó dándole el tiro a Tyler.

—Ella nunca cambiará. Haré lo que me pides, pero me da miedo que me vaya hacer algo.

—Prometo que te cuidaré, la llamarás y le dirás lo que te dije y yo llamaré a los chicos y a la policía, ¿okay?

Asiente no muy convencida y llama a Clarine mientras yo llamo a los chicos y les cuento todo. Hoy es el día de Clarine y pagará por todo el mal que ha hecho.