¿Cuántas mujeres famosas de la historia de Chile conoces?
Aunque no lo creas, la historia de Chile es generosa en este aspecto. Muchas grandes mujeres han dedicado su vida persiguiendo sus sueños.
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Carmen Vilches, al igual que su amiga Filomena Valenzuela, fue una destacada cantinera del batallón de mineros Atacama.
Al estar en un batallón que siempre estaba en el frente de batalla, su trabajo era mucho mayor. Como todas las cantineras usaba uniforme compuesto de dormán azul y bombachas rojas embutidas en botas cortas bajo la rodilla.
El 2 de noviembre de 1879, el Atacama participó en la primera acción de guerra en terreno extranjero, la toma de Pisagua. Fue una acción anfibia, los soldados del Atacama llegaron en buques de la marina y desembarcaron en botes tras nutrido fuego enemigo.El Atacama tuvo una destacada actuación. Carmen al igual que sus compañeros, saltó al agua bajo una lluvia de balas y logró llegar a la playa. Los soldados peruanos fueron forzados a dejar sus posiciones de combate.
Ahí comenzaron a seguirlos, escalando un cerro de fuerte pendiente, hasta llegar a la cumbre donde estaba el campamento peruano de 2.000 hombres. Rafael Torreblanca y sus soldados cargaron a la bayoneta y se definió la batalla. Los soldados peruanos, abordaron un tren y el héroe Rafael Torreblanca iza la bandera chilena, ya ganada la posición.
Carmen Vilches siguiendo a los valientes del Atacama, curaba a los heridos y ayudaba a bien morir a los camaradas que dejaban su vida en el campo de batalla. Labor no menor en un batallón de héroes, en que el 70% de ellos resultó herido.
El Batallón Atacama tenía un debut glorioso, el presidente de la república no podía sino felicitar al intendente de Atacama por dar a la patria tan valeroso Regimiento.Un par de semanas después, el 19 de noviembre de 1879, el Atacama nuevamente tuvo una destacada participación en la batalla de Dolores.
Las cantineras del Atacama fueron las que más heridos y fallecidos atendieron durante la campaña Tarapacá
En la Batalla de Los Ángeles, batalla en que el ejército peruano estaba en la cima de una cuesta, rodeada por 2 acantilados y desde donde la defendían evitando que los soldados chilenos accedieran a ella por el único sendero posible, por donde solo se podía ir en una fila de una persona. La posición era considerada inexpugnable.
Los peruanos consideraban que acceder por los acantilados era imposible, y así se mantuvieron defendiendo esta posición sin mayor problema.
Los mineros del Atacama, ayudados por sus corvos empezaron a escalar el acantilado y se ayudaban unos a otros, haciendo una verdadera pirámide humana. Toda la acción era guiada por Rafael Torreblanca, y en el grupo iban 2 mujeres, las cuales lograron llegar a la cima y a la carga de bayoneta hicieron huir al enemigo.
Carmen llegó a la cima entre los primeros, sin demostrar cansancio ni vacilación. En el informe oficial, el comandante del Atacama, Juan Martínez, informa al General Baquedano los soldados que tuvieron un comportamiento heroico. En el parte se destacaba el accionar de Rafael Torreblanca, y también el de la mujer héroe, la Cantinera Carmen Vilches:"Creo un deber de mi parte, hacer presente a Ud. que los méritos contraídos por la cantinera Carmen Vilches, durante la penosa jornada del Hospicio al Valle, dando agua y atendiendo a los que caían rendidos por la fatiga, como igualmente peleando en el asalto de la cuesta de Los Ángeles con su rifle e infundiendo ánimo a la tropa con su presencia y singular arrojo, obligan nuestra gratitud y la hacen acreedora a un premio especial".
En la lista de heridos del Batallón Atacama en Los Ángeles, figuró la cantinera Vilches con una contusión en la mano izquierda, siendo: "ejemplo de gran valor, trepando con los atacameños la empinada cuchilla y haciendo fuego sobre el enemigo con su rifle, como cualquier otro soldado".
Su hazaña no pasó inadvertida por la opinión pública; prueba de ello es la carta que se publicó en el diario El Constituyente, donde se insinuaba que se le tributara un homenaje porque "ayudó a detener a los peruleros".
Al derrotar a los soldados peruanos, como era tradición había que izar la bandera chilena, para avisar al resto del ejército chileno, para que detuvieran el fuego de artillería y para celebrar la victoria. No había una bandera chilena. Carmen Vilches se sacó sus bombachas rojas, las que se pusieron en lo alto de un mástil, esa fue la bandera chilena que usó el Regimiento Atacama.Carmen Vilches pasa a la historia como héroe de la Guerra del Pacífico.
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