Debería estar celebrando por todo lo alto que he podido pasar casi todo el rato con Adrien gracias a la actividad por parejas. Sin embargo, desde que me he dado cuenta de que no llevaba mi cuaderno encima que no puedo evitar pensar en dónde demonios lo he metido.
Seguramente está en casa y ando dándole más vueltas de lo debido al asunto. Aunque, en verdad, no recuerdo haber sacado la libreta de la mochila en ningún momento de ayer.
Cuando suena el timbre anunciando la hora del descanso, una caricia en mi nuca me hace estremecer y virar el rostro a mi lado, donde la razón de mis delirios se encuentra sonriéndome con su habitual galantería.
- ¿Vamos afuera?
Me quedo algo aturdida y sacudo la cabeza, incorporándome de mi asiento con una sonrisa dispersa.
- Sí, vamos...- avanzo con él hacia la puerta, mirando en todas direcciones con incertidumbre-. ¿Dónde está Nino?
- Hoy venía a verlo su novia...
- ¿Novia?- me sorprendo con los ojos bien abiertos-. ¿Desde cuándo está saliendo con alguien?
- Mm... Hará ya un par de semanas.- se pasa los dedos por el cabello, ojeándome de refilón-. ¿Por qué? ¿Es que te interesa?
- ¿Có-cómo? ¡No!- me cruzo de brazos y pongo la vista en blanco sin detener mis pasos-. Solo lo preguntaba por simple curiosidad, tampoco es que él sea mi tipo ni nada por el estilo.
- Ajá...
Caminamos unos instantes en silencio hasta que llegamos a la entrada principal del recinto, yendo hacia las escaleras exteriores y sentándonos en uno de los escalones.
No sé por qué de repente el silencio nos envuelve, esquivando en cierto modo el contacto visual mientras otros alumnos pasan por delante y conversan entre risas.
- Y... ¿Cuál es tu tipo?
Esa pregunta atrae mi atención hacia él y nuestras miradas se cruzan en el acto, provocando en mí ese nerviosismo del cual Adrien es el único responsable.
- Mi tipo... ¿De chico?- él confirma sin volver a cruzar palabra y yo tengo que esforzarme en no comenzar a desvariar-. Oh-eh... Pues no sé... No creo tener algo en mente algo que me haga decantar por alguien en concreto...
«Mientras sea rubio, alto, de ojos verdes, sonrisa encantadora, amable, dulce, irresistible y lleve el nombre de Adrien Agreste...»
- Ya ves, soy un desastre incluso en decidir lo que me gusta o no.- añado con una leve risita, notando mi pulso acelerado al fijarme en lo sereno, y a la vez serio que él luce-. Y... ¿Qué hay de ti? ¿Qué clase de chicas te gustan?
Me estoy metiendo en la boca del lobo, y lo más probable es que salga mal parada por querer seguir el hilo de la conversación. Aún así, y usando mi mejor talante, me aventuro a indagar.
Él no contesta de inmediato, apoyando los codos en el escalón de más arriba y adoptando una postura más despreocupada.
- Se supone que tú eres mi mejor amiga, ¿no?- me muestra una faceta traviesa que intensifica el calor en mis mejillas-. ¿No deberías ya saberlo?
- Esto... No tiene por qué.- me abrazo a mis rodillas, conteniendo mis manos inquietas-. Nunca hemos hablado del tema, y tú tampoco has tenido novia... Al menos que yo sepa...
La tristeza me invade al pensar que puedo estar equivocada, y sin ser consciente de ello, mis facciones decaen con mis ánimos.
- Si tuviera, tú serías la primera en saberlo, Bichito.- lo ojeo por el rabillo del ojo y su forma de mirarme me hipnotiza-. Al fin de cuentas, no hay secretos entre nosotros.
ESTÁS LEYENDO
𝐀𝐃𝐑𝐈𝐍𝐄𝐓𝐓𝐄⋆ ❁ 𝙎𝙚𝙘𝙧𝙚𝙩 𝙤𝙛 𝙢𝙮 𝙝𝙚𝙖𝙧𝙩 ❁
FanfictionPara Adrien, ella es su amiga de confianza. Para Marinette, él es su sueño frustrado y platónico amor. Una amistad puede verse amenazada si una de las partes alberga sentimientos contradictorios; unos sentimientos que bien pueden ser confesados o at...