Capítulo 15

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Ver a Alex irse así me dolió, si Lucas no hubiese aparecido ahorita estuviera caminando con Alex y con... por cierto, ¿como le pondré a este perrito tan tierno?

Mientras lo pensaba me imaginaba discutiendo con Alex el nombre del perrito juntos y una sonrisa se dibujó en mis labios.

—Entonces...¿vamos al cine? —dijo Lucas sacándome de mis pensamientos y trayéndome de vuelta a la realidad.

—Eh, no puedo, tengo que ayudar a mi padre con unas cosas.

Por supuesto era mentira, no tenía ánimos de ir al cine, en mi cabeza solo estaba Alex y en cómo iba a solucionar toda esta confusión.

—Pero otro día vamos —agregó con honestidad.

—Está bien, pensé que era por ese chico que —

—No, claro que no —digo interrumpiéndolo mostrando una risita.

¿A quien quieres engañar? Porque tú misma sabes que la razón de no ir al cine es por Alex.

Nos vemos pronto —dijo Lucas despidiéndose amablemente.

Al entrar a la casa suelto el aire contenido en mis pulmones, en realidad estaba pensando en decirle a Alex lo que sentía por él, pero apareció Lucas.

...
Al siguiente día, llegue tarde al colegio, pero dispuesta a decirle a Alex lo que sentía por él. La clase ya había comenzado, entre lo más cuidadosa posible sin hacer mucho ruido pero tropecé con un pupitre sin querer.

— ¡Auch!

Alex me miro y me saludo haciendo un gesto con su mano y luego bajo la mirada nuevamente a su cuaderno.

¿Porque tan indiferente?

Le regresó el saludo y me siento en mi puesto. Si es por lo de Lucas yo no tengo nada con él y ni siquiera fui al cine.

Estaba impaciente, quería que la clase terminara lo más pronto posible pero las horas pasaban lentas.

Genial.

Por fin sonó el timbre y es cuando comienzan a salir todos apresurados del salón, busco a Alex con mi mirada pero ya se había ido.

—Supongo que se fue rápido a su clase de fútbol —pienso mientras guardo mis cosas en mi morral.

Salgo del salón y camino apresurada, a lo lejos pude ver a Alex entrar al baño de chicos.

Me quede sentada en una banca mientras esperaba que saliera del baño.
Mi corazón latía con fuerza, estaba asustada y nerviosa a la vez, no sabía cómo iba a reaccionar Alex cuando le dijera eso, aunque tenía mis sospechas que él también gustaba de mí.

Al rato salió, me quede viéndolo embobada con una sonrisa tonta en mi rostro, Alex se veía hermoso con ese uniforme deportivo, automáticamente mis mejillas se sonrojaron y los nervios se apoderaron de mi.

—Es ahora o nunca Ellie —me digo a mi misma armándome de valor.

Pero de pronto veo algo, pestañeo varias veces y es cuando la veo a ella y mi sonrisa se desvanece, Mónica saliendo del baño y subiéndose los botones de su camisa.

¡¿Que?!

Ese dolor que te da en tu pecho y en tu estómago cuando sientes que el mundo se cae a tus pies. Sentía mi pecho apretado y mis ojos humedecidos de la rabia. Mi respiración comenzó a entrecortase, mi sangre hervía de los celos de imaginarme lo que esos dos estaban haciendo en el baño.

Me levanto de la banca y limpio con el dorso de mi mano las lágrimas que corrían por mi rostro.

—¡Está más que claro lo que acabo de ver, me siento tan estúpida! —digo con mi voz quebrada y mi pecho a punto de un colapso.

Voy tan perturbada caminando apresurada que no me doy cuenta con quien tropiezo.

—Lo siento —digo sin mirar a la persona.

—¿Ellie?

Esa voz inconfundible me hizo detenerme por un momento y mirar hacia atrás.

—Liam —digo soltando un suspiro pesado y giro nuevamente siguiendo mi camino.

—Necesitamos hablar.

—No tengo nada de que hablar contigo —digo sin voltear pero sentía sus pasos atrás de mi.

—¿Porque me ignoras? —dice alcanzándome y poniéndose en frente de mi.

—No deberías estar hablando conmigo no vaya a ser que llegue tu novia Paty y se moleste —digo con sarcasmo.

—¿De que hablas? —dice haciéndose el loco.

—No me hagas reír —digo riendo con ironía.

—Te vi besándote con Paty el día que fuimos a la excursión, pero ¿sabes que? En realidad me da igual lo que hagas con tu vida.

—Ella me beso a las fuerzas porque le dije que no quería nada con ella.

Solo lo mire y le hice un gesto mostrándole que en realidad no me importaba en absoluto lo que decía.

...

Llegue a la casa triste pero quien me recibió con mucho amor fue mi perrito el cual aún no tenía nombre.

—Te llamaras Coker —digo agarrándolo mientras lo acariciaba felizmente.

Después de comer y darle de comer a coker me cambie de ropa y me quede en el sofá con un pote de helado mientras veía mi serie favorita.

De pronto escuchó el timbre.

—¿Quien será? —pienso al instante.

Anna no podía ser porque ella iba a salir con Robert.

Abro la puerta y lo veo a él.

—Liam... ¿Que haces aquí? —digo confundida.

—¿Puedo pasar?

Me hago a un lado para darle paso.

—¿Quien te dio mi dirección?

—Eso es lo de menos, vine porque en realidad me gustas y lo que te dije ahora es verdad —dice con sinceridad en sus palabras.

—Bueno está bien, no pasa nada —digo restándole importancia.

Y de pronto así sin anestesia me dice: —¿Quieres ser mi novia?

Mi cara de sorpresa fue muy evidente, Liam baker, mi amor de toda la vida, ese que no me volteaba a ver, me está diciendo que sea su... ¿novia?

Automáticamente Alex se vino a mi mente y esa imagen de Mónica y él saliendo del baño me hizo remover todo mi estómago.

Si él está con Mónica, ¿porque yo no puedo darme una oportunidad con Liam? —pienso en ese preciso momento.

—Si, si quiero —digo así nomas sin pensar en las consecuencias de mi decisión.

Espero no arrepentirme de lo que acabo de hacer porque no hay vuelta atrás y con ese pensamiento Liam se acerco a mi y unió sus labios con los míos.

Y automáticamente la cara de Alex se vino a mi mente.

A ver cómo sales de esta Ellie.

———————-
Hola chic@s!!!!

De aquí en adelante la historia se pondrá mejor.

¿Que piensas de la decisión apresurada que tomo Ellie?

Dejen sus comentarios 💕

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