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El omega abrió sus ojitos apenas entró la luz del sol en su habitación, se quedó mirando el techo un buen rato pensando ¿Y si mejor terminaba su relación?, No todos sabían que eran novios así que diría que simplemente se volvieron más cercanos que su omega era Changkyun y no el pensó en millones de excusas pero a quien engañaba, el mejor que nadie sabía que amaba con todo su ser al alfa rubio le dolería mucho si el tiene otro omega, pensó otro rato y llegó a la conclusión que lo evitaría todo el día.

Se hubiese quedado más tiempo ahí si no fuera por cierto alfa rubio que entró.

-¿Porque aún no te levantas Binnie?- su hermano mayor se paró a lado de la cama del Omega.

-Aún es temprano Channie.

-Si pequeño, pero tienes que apurarle para que puedas desayunar- el omega asintió y se levantó con sus pocas ganas busco su ropa que usaría ese día primero checo el clima.

El pequeño omega salió de la ducha se colocó la sudadera que aún traía el aroma de Inpyo impregnado en ella y encima uno de sus sacos para bajar al desayunador se encontró a su madre rara vez la veía se la pasaba en el hospital no la culpaba al contrario siempre estaba agradecido con ella por todo lo que le daba y estar con ellos conforme iban creciendo, miró el guardapelo de su madre solo sabía que era una promesa que le había hecho a su padre antes de morir pero nunca se atrevió a preguntar.
El omega fue hasta su madre, ella desprendía un hermoso aroma a libros viejos, la omega le dió un beso en la frente.

-Binnie cariño ¿Dónde está Sunggie y Minnie?- el omega miró hacía las escaleras y los mencionados bajaron cuando vieron a la señora Seo bajaron corriendo ambos Omega y beta conocían a la señora Seo desde que eran cachorros, la omega los abrazo a ambos con cariño. Desayunen rápido que se les hará tarde mis pequeños- los 4 asintieron.

Desayunaron en tranquilidad hablando del hermoso omega del alfa y del alfa del omega rubio, por suerte la omega aún no sabía del predestinado de su hermoso omega.
Cuando terminaron de desayunar se despidieron de ella amaban realmente a la omega, salieron del hogar Seo para ir hacia la preparatoria en el automóvil de Chan toda la semana lloverá según las noticias el pequeño omega tenía miedo de ver al alfa con el omega o que el alfa intentará acercarse a el soltó un suspiro sabía que el caería sumiso ante el, cuando llegaron a la preparatoria el alfa con olor a canela los esperaba.

-Binnie Inpyo nos dió esto- el hermano mayor le entregó el guardapelo al omega.

-Hum, gracias hyung- el omega se bajó del automóvil junto con sus dos amigos quienes fueron hasta Inpyo.

-Binnie pequeño- el alfa sonrió al notar que el aroma a canela estaba presente en el omega.

-Hola hyung- el omega sonrió con pocas ganas, sus ojitos no brillaban como siempre como esas dos hermosas estrellas pero no detectaban tristeza alguna tal vez se esté conteniendo.

-¿Desayunaste?- el alfa comenzó a caminar con el omega y sus dos amigos a lado.

-Si desayunamos hyung gracias- habló esta vez el beta lo cual hizo al alfa sonreír.

-Lo siento Seungmin, ¿Durmieron bien pequeños?- los tres asintieron, el omega rubio vio a su ex novio entre la multitud.

-Lo siento hyung's, Honnie hyung ya vino hoy así que iré con el vamos Minnie- el beta asintió dejando solos al alfa y al omega. 

-Vaya ¿Te dieron el guardapelo?- el pequeño omega asintió por suerte sus casilleros estaban cerca así que cada uno fue hasta el suyo el omega castaño volteo a un lado y vio a su novio junto el omega hasta que lo conocía, ambos se veían felices en su propio mundo.