ECLIPSE: La Historia de un Amor Perdido [CAMREN]

Un recuerdo Especial.

2.

Presente

2015, Febrero 19.

PUNTO DE VISTA DE LAUREN MICHELLE JAUREGUI

Comenzaba a estresarme aún más, todos hablaban del tétrico caso Cabello.

Las personas en la escuela hablaban de ello todo el día, algunos en forma de cotilleo, otros para espantar a los de primaria o secundaria, otros con lástima, y muy pocos lo tomaban como en verdad fue, algo triste y desafortunado, para alguien tan noble como fue ella.

Caminaba por los pasillos junto al clásico e inseparable grupo.
Estábamos todos, menos ella, claro.

Austin miraba con rabia a los chiquillos y curiosos que le preguntaban como había sido el "accidente de Camila".

¿Donde quedaba la compasión?
Estábamos pasando por el peor momento de nuestras vidas, tanto que esto nos estaba generando un trauma psicológico, imposible de superar.

Normani y Ariana no se quedaban atrás, ambas eran acosadas con extrañas y descaradas preguntas.
"¿Viste como la descuartizaban?" "¿Sus ojos estaban fuera de su cabeza?" "¿Gritó mucho?"

A diferencia de ellas, Allyson, Dinah y yo, no podíamos ni evadir, ni contestar, ni siquiera ignorar aquellas preguntas. Tanto así que DJ y yo, llegábamos al punto de estallar con golpes o hasta mal herir a quién preguntase descaradamente. Claro, eso no nos pasaba por desapercibido las miradas de miedo y quizás odio y temor de los estudiantes.
Ally siempre se echaba a llorar.

No existía la compasión, claramente no se imaginaban el dolor que sentíamos al recordar aquél acto.

Estaba caminando junto a Allyson y Normani cuando alguien se tropezó conmigo. Casi calló al suelo.
Quizás mi Vaivén interno no me permitió reaccionar, así que no lo levanté, seguí caminando.

Miré su rostro, era un chico extraño, jamás lo había visto. Sus ojos al impactar con los míos rebotaron de miedo y desesperación. Tanto era su nerviosismo que se levantó de un brinco, susurró con vos temblorosa un "lo siento" y sin más salió corriendo.

En otra circunstancia lo hubiese ayudado, pero qué más da.

- ¿Lo conoces? - preguntó mi amiga bajita, Ally. Con cierta duda.

- No.

- Se ve algo extraño... Como si tuviese pánico - decía Normani, mientras miraba por donde se había escabullido. - quizás lo vienen persiguiendo, o el director lo retó... - finalizó, levantando sus hombros sin importancia.

Cierta duda quedó rebotando en mi cabeza desde ese día.

Ally, se despidió con la escusa de ir a iglesia, quizás ese era su único apoyo emocional en aquél momento, la pobre chica estaba totalmente rota. Troy, su amor, cada día la intentaba animar y sacar de su constante desdén, pero le era imposible, tanto a él, cómo a nosotros, le era.

Normani me acompañó hasta casa, donde Dinah había dejado una curiosa nota que decía "volveré pronto, estoy con mamá"

Por lo cuál decidí aislarme un rato, como solía hacerlo cuando me sentía triste y sola.
Meditando un rato, llegó a mi un curioso pensamiento, "¿Cómo pasó?"

Dinah relataba un accidente.
Ally un muerte infortuita.
Austin un suicidio.
Ariana un mal día con malas decisiones.

Pero sólo una persona sabía la verdad, esa era Normani Kordei.

Quién estuvo ese día junto a quién fue mi amor.

Antes y después de su muerte.
Presenciando los últimos segundos de su hermoso cuerpo lleno de vida.
Presenciando su última sonrisa, su última lágrima. Su última suspiro.