Robándole las Alas a un Ángel.

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18.

Ese mismo día, en esa misma hora.

PUNTO DE VISTA DE SHAWN MENDES.

Pasé toda la tarde y noche del trece de febrero en la ventana de Camila.

Ya no podía darme el lujo de entrar y observarla mejor, pues ella había cerrado cautelosamente la ventana de su habitación. Esa noche ella se acostó más tarde de lo normal, al parecer estaba emocionada por el día siguiente, algo en mi se revolvió al pensar que estaría emocionada por otra persona y no por mí. Yo debía de ser su cita.

Apreté mi puño y me limité a observar toda la noche.

Era increíble como la chica vivía en una burbuja, casi nunca se daba cuenta de nada, ella sólo pensaba en sus cosas, en sus problemas. Ella no era egoísta, pero estaba desconectada del mundo.

También me parecía interesante la extraña obsesión se Camila por siempre ser diferente, no de resaltar, pero sí de no ser alguien común. Esa extra obsesión por ser mejor. Hacía cosas que otras chicas no, quizás por eso siempre me llamó tanto la atención.

Mientras otras chicas estaban en citas con chicos, ella leía.
Mientras otras chicas iban de compras, ella dibujaba.
Mientras otras chicas iban al salón de belleza, ella convertía en belleza todo su alrededor.

Era única. Y realmente no podía permitirle ser única en un mundo de puras copias, cada una peor que la otra.

Sí, Camila a veces iba al centro comercial, es cierto. También de vez en cuando salía con Lauren, quizás ella en el fondo también era una persona. Lo extraño es que nunca hacía algo común. Siempre volvía la situación más normal en algo nuevo.

Pensé toda la noche mientras la observaba dormir, esa noche se había dormido con una pequeña sonrisa en sus labios.

Finalmente amaneció. Me alejé un poco de la ventana, pues ahora sí tenía un fácil campo de visión para ser descubierto.

La escuché le levantarse y dar Gracias a Dios, la escuché ducharse y cantar que Estaba Perdidamente Enamorada.

No sé porqué, pero ella era muy extraña y realmente lo extraño no es bienvenido a este mundo.

...No te preocupes, yo me encargaré de eso, Camz....

Finalmente ella se vistió y salió junto a Normani en su auto.

Rápidamente tomé mi bicicleta que estaba escondida en un arbusto y las seguí a distancia prudente. Cubrí mi cabeza con el gorro de mi chaqueta gris.

Esa noche, había decidido dejar mi auto en casa.

Luego de un rato llegamos al centro comercial, ellas bajaron corriendo emocionadas.

Yo me limité a seguirlas con la mirada.
Me iba acercando muy lentamente, en mi mano tenía un Bat de béisbol, mi favorito.

Las personas del centro comercial me miraban extrañados por mi aspecto y por lo que traía en brazos. Pero no me importó.

...Tal vez si ellos supiesen que podría matarlos ahí mismo con ese bate, dejarían de ser tan quisquillosos.

Me quedé observando la tienda en donde estaban las chicas desde lejos.

Estaba molesto, ella estaba feliz porque se iría a ver con la gótica pálida, ella no era mejor que yo. Yo siempre he sido mejor que Jauregui, siempre he querido más a Camila.

Mi sangre hirvió como nunca cuando ví desde lejos el globo que decía "quieres ser mi novia?" Mi corazón latía desesperado, mis puños temblaban.

ECLIPSE: La Historia de un Amor Perdido [CAMREN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora