Well, you see...

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—¿Qué conmigo? —Dijo Zhou al escuchar como su nombre salía de los labios de aquella avergonzada japonesa.

—P-pues, verás-

—Solo chocó contigo y se lastimó, eso es. —La interrumpió Mina. Sana soltó un suspiro de alivio al ver como Tzuyu ya no tenía aquella cara de confundida, ahora era una de preocupación.

—¿De verdad te lastimé? No sabes cuanto lo siento, ¿te sientes mejor? ¿Necesita algo? —Sana solo atinaba a mirarla como si fuera la obra de arte más preciosa en todo el mundo, ¿cómo podía ser tan tierna?

La otra japonesa solo miraba a la japonesa mayor con algo de preocupación, si seguía mirándola tanto se haría notable su amor por la chica alta. Por otro lado Tzuyu, estaba nerviosa, no se notaba, pero estaba realmente nerviosa, aquella tierna chica de nacionalidad nipón le causaba unas sensaciones de solo querer abrazarla y cuidarla, aparte su aroma, lo conocía, no recordaba de donde pero sí lo conocía.

—N-no tranquila, no pasa nada, estoy b-bien. —Respondió Sana tartamudeando.

—Si quieres te invito algo de comer en la cafetería, como una disculpa, ¿te parece? —La tierna japonesa quedó estupefacta, la chica que le gustaba la estaba invitando a comer con ella. Tzuyu al ver la sorpresa que transmitían los ojos de Sana, no evitó sonrojarse.

—Eh, bueno, y-yo mejor me voy con mi novia, ah y, Sana, Momo dijo que vendría a buscarnos hoy. —Mina salió rápidamente del baño, dejando a aquellas dos sonrojadas chicas solas.

—¿Y? ¿Qué dices? —Preguntó nuevamente la taiwanesa.

—Y-yo creo que, e-estaría bien por mí. —Tzuyu al escuchar aquella respuesta no dudó en sonreír.
Sana solo la admiraba. Admiraba aquella hermosa sonrisa, esa sonrisa que la volvía completamente loca.

Sí tan solo Tzuyu supiera que su sonrisa era la perdición de Sana.

notes 紅葉 satzuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora