Perdido (actualización lenta)

Diecisiete

Me quedo de pie sin saber que hacer ¿porque Alex tiene todas esas armas aquí abajo?
Arriba de nosotros se escuchan pasos, parece que avanzas lentamente por la casa.

- Ven aquí. - Me dice Alex haciendo que de un brinco, camino rápido hasta donde él está, al fondo, justo enfrente de las armas.

El toma una y la guarda en su pantalón, no sin antes checar el seguro y las balas, ahora mismo siento demasiado miedo. Los pasos se vuelven más constantes arriba y estoy segura que estarán aquí en un par de minutos.

- Ellos no pueden verte Jess, no tengas miedo.

Me dice pero no ayuda en nada, saben que tengo el collar y no sé si esa ahora sea algo peligroso, aparte de que ahora estaba con Alex, a él si podrían verlo. Entonces justo debajo de las armas Alex jalo una palanca que apenas era visible y segundos después una pequeña puerta debajo de la pared se abrió, para entrar ahí tendríamos que agañarnos y casi entrar pecho abajo.

- Entra. - Me dijo Alex y yo lo hice sin pensarlo aún sin saber a donde me llevaría.

Me arrastre por el piso y salí en un pequeño cuarto, mire alrededor, había una colchoneta al fondo y nada más. Ni siquiera entraba un rayo de sol ¿sería un buen momento en pensar si soy claustrofobica? Porque cualquier persona lo seria aquí, en un lugar tan pequeño y sin alguna ventana o agujero que diera aire.
Alex apareció seguido de mi y cerró la pequeña puerta.

- ¿Que es esto? - Pregunté pero él me hizo una seña con el dedo de silencio y supe que los Banshees estaban justo donde nosotros hace unos minutos, pero no lograba escuchar nada.

Alex se acercó un poco más a mí aún cuando el lugar era demasiado pequeño para los dos, estiró una mano y apago el pequeño foco arriba de nosotros que ni siquiera sabía como había prendido. Ahora solo escuchaba nuestra respiración, podía hasta sentir la respiración de Alex golpear mi cara y volví a sentir tranquilidad sabiendo que estaba conmigo aun sin poder verlo, cuando mis ojos se acostumbraron un poco a la oscuridad pude distinguir su silueta a solo unos centímetros de mi. Me había quedado en una posición incomoda así que me moví un poco para cruzar mis piernas frente a mi, escuche que Alex también se movió y después nuevamente nuestras respiraciones.

- No se cuanto tiempo se quedarán aquí. - Dijo Alex en un susurro, yo asenti pero quizá no lo vio.

Llevábamos unos diez minutos así, en completo silencio pero tenía más miedo de salir que de morir asfixiada aquí.

- ¿Ellos saben que estamos aquí? - Pregunté en un susurro que apenas yo escuche.

- Lo saben pero no podrían encontrarnos. - Respondió. - Su mundo es como un sueño.

No entendía muy bien.

- Cuando sueñas no puedes hacer muchas cosas, por ejemplo contar, leer o simplemente perderte unos segundos, nunca podrían encontrar cómo entrar aquí.

Sonaba esperanzadora su respuesta pero no podríamos quedarnos aquí para siempre, pronto se acabaría el oxigeno y teníamos que comer e hidratarnos.

- ¿Que es este lugar?

- Un refugio, ya sabes, las casas de antes tenían escondites para las guerras y esas cosas, esta casa es muy antigua.

Tenía sentido, pero no creo que las armas hayan llegado hasta aquí por si solas.

- Y si hablas de las armas. - Ahí estaba. - Eran de mi padre, él creía mucho en los apocalipzis zombies así que compro bastantes armas para protegernos.

Me quedé en silencio y seguido escuché una pequeña risa de Alex, se estaba burlando de mi. Yo alce una mano y le di un pequeño golpe.

- Eres un mentiroso. - Le dije.