El chico pelinegro se encontraba sentado el aquel verde césped con sus ojos cerrados, su pelo bailaba con la suave brisa mientras aspiraba el fresco olor de las rosas mezcladas con el rocio de la mañana, abrió sus ojos con lentitud mientras en sus labios se formaba sonrisa.
- ¡Zhan Zhan!...- Peng Chu Yue se sentó a su lado.- Llevo rato llamandote...
- ¡Lo siento!.- Zhan sonreía con su mirada hacia el frente.- Es que cuando estoy aquí sentado mi mente se va lejos...
- Ya es hora...los ensayos iniciarán...¿Estudiaste la partitura?
- ¡Por supuesto!
- Ansío escuchar tu solo...- Chu Yue sonrió.- Vamos...dejame ayudarte...
- ¡Huan Huan!...- Xiao Zhan resoplo mientras sonreía.- ¿Cuándo dejaras de tratarme como a un pequeño?
- No te trato como a un pequeño...te trato como mi mejor amigo y hermano...
- Has sido mi bastón desde que éramos pequeños...- bajo la mirada mientras sonreía.
- Y lo seguiré siendo...asi que soportalo...- Chu Yue se levantó y con cuidado tomó el brazo de Zhan.- Estoy a tu lado porque te quiero y quiero cuidarte...quizas...solo quizas...el día que encuentres por fin a tu destiando...ese dia pueda...pensar en dejar de sobreprotegerte...
- ¡Gracias Huan Huan!
- Ya dejate de tonterías y vamos.
Desde el momento en que Xiao Zhan abrió sus ojos al mundo todo fue oscuridad, había nacido sin la capacidad de ver, a pesar de ello su vida fue feliz y llena de amor, tenía a los padres más amorosos y protectores, sus amigos siempre cuidaban de el y lo consentian, sobre todo Peng Chu Yue, un alfa y su mejor amigo desde la infancia.
Desde la temprana edad de 10 años Zhan había demostrado un gran talento, amaba la música y su deseo era ser violinista, sus padres lo habían ayudado investigar algunas escuelas, querían que su hijo lograra su sueño pero la fe que tenían sus padres en el no era la misma que tenían las persona que lo veian, pensaban que era imposible que una persona invidente fuera capaz de incursionar en el mundo de la música, no sólo lo pensaban sino que también lo decían, se lo hacían saber tanto a los padres como al pequeño al cual alentaban a que tratara de experimentar con otras cosas.
Pero rendirse no estaba en el diccionario de ese pequeño el cual decidió demostrarle a las personas que no le tenían fe que si podía lograr su cometido, fue un año después que el pequeño asistió a una última entrevista, el pequeño Xiao Zhan se encontraba sólo en el escenario, sentado en una pequeña silla tomaba su violín en sus manos y cerrando sus ojos empezó a tocar, aquella melodía era hermosa la cual emanaba dulzura y nostalgia, el pequeño Zhan logró cautivar a quien sería su mentor durante años.
- ¡Excelente!...Xiao Zhan...te has superado a ti mismo...- El maestro felicitaba.- Cada día me sorprendes más.
- Todo es gracias a sus enseñanzas maestro...- Xiao Zhan se sonroja mientras sonríe.
- ¡Vamos Zhan Zhan!...no seas tan modesto...todos aquí sabemos que eres un genio.- Wang Zhuo Cheng felicitó.
- A-Cheng tiene razón Xiao Zhan...- El maestro tocó su hombro.- Tienes un gran talento y eres único...avaces creo que este lugar te queda pequeño...si tan sólo aceptaras la beca que te ofrecieron...
- ¡Maestro!...- Zhan sonrió.- Agradezco que me haya ayudado con el tema de la beca pero...yo me siento extraordinariamente bien aquí con ustedes...nunca he pensado en abandonarlos...
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Muskaan (Finalizada)
RomanceXiao Zhan es un violinista invidente desde su nacimiento, es el tesoro más grande de sus padres por lo que es muy protegido, sus amigos también lo cuidan fielmente, sobre todo tratan de proteger su dulzura y calidez, Xiao Zhan nació como un Omega a...