Prólogo

3K 231 135
                                    

Alice P

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Alice P. O. V.

Oh vaya, aquí estamos. Una casa nueva y un comienzo nuevo, con la persona que amas. ¿En realidad tenemos amor? Él me engaño con su secretaria, mientras yo me quedaba en casa y cuidaba a Sebastián. Él se divertía y yo me cansaba y tenía ataques de nervios. ¿Por qué la gente hace cosas que luego se arrepiente? Nunca entendí, pero aquí estoy, haciendo algo que está en mi ideología, en una casa nueva con él, Sebastián dormía en mis brazos, mientras Lionel estaba acomodando el armario.

—Estaba pensando, que antes de ir al hospital, podemos hacer un pequeño picnic en el jardín para nosotros —comentó, ¿por qué? ¿Por qué lo hace? Él sabe que lo odio, que no lo quiero cerca, pero ahí estaba, tratando de volver acercarse a mi, volver a ser una familia—. Esta casa será buena para Sebastián, crecerá con el amor y el olor a un hogar.

—Estamos de acuerdo —por fin hable—, crecerá con el amor y el olor a un hogar, lastima que nosotros no tenemos aquel amor, solo un amor por él.

Él se acercó a mí y me observo fijamente.

—¿Podemos hablar? —preguntó él, yo sólo asentí, dejé a Sebastián en la cama y salí de la habitación para entrar a otra, Lionel cerró la puerta—. ¿Hasta cuando? —preguntó, yo lo observe confundida—. Deja de estar jugando, Alice. Te conozco perfectamente para saber que sigues enojada y no me perdonas.

—Claro que te perdono —confesé, él me observo enojado, cruzó su brazos—. Te perdono, pero no lo olvido. Porqué si lo olvido, me en cariño contigo, y luego otra vez me hagas lo mismo. No estoy pendeja, Lionel. No soy tu puta secretaria, ni tu mamita.

—¡Por el amor de Dios! ¡Hablame en Inglés, que no te entiendo ni una mierda, Alice! —gritó, comenzó a caminar por toda la habitación, mi enojo comenzó aparecer.

—¡Qué no estoy pendeja como tú mamá y tu puta secretaria! ¿Así o te lo repito pero más fuerte? —exclame para caminar hacia la puerta y poder abrirla, pero Lionel me detuvo en el camino.

—¿Hasta cuando, Alice? —preguntó haciendo que lo mirara a los ojos, no quería volver a caer, ya no, pero él siguió observandome, su rostro ya no era de enojo, era de tristeza—. Te amo, Alice. Dejé todo por ti, hice lo posible para estar a tu lado, me equivoque. Y lo confieso, estuvo mal, hice mal... Pero te amo, Alice. Y quiero que volvamos hacer una linda familia, como antes —comentó tomándome del rostro, se acercó a mí y me plantó un beso en la frente.

—Sólo quiero poder olvidar, perdonarte en verdad, Lionel —comenté mientras él acarició mi rostro—. Pero me es difícil, Lionel. Yo te amo, y demasiado, pero me pusiste los cuernos, me engañaste, y no sólo a mi. A ella, a mi madre, a Sebastián, y a mí...

—Y por eso, quiero recopensartelo —comentó, acercó sus labios a los míos para poder besarme, pero algo lo detuvo, un ruido de escucho afuera, con miedo, ambos salimos de la habitación.

𝐓𝐎𝐗𝐈𝐂 𝐏𝐎𝐒𝐒𝐄𝐒𝐒𝐈𝐎𝐍 || ʙʀᴀʜᴍꜱ ʜᴇᴇʟꜱʜɪʀᴇDonde viven las historias. Descúbrelo ahora