Las clases habían terminado y Koretsu se dirigía a la sala 'club' para hablar con Rias sobre esos detalles que faltaron durante la noche de ayer. Una vez llego a la sala club entro como si fuera perro por su casa y dio un saludo rápido a Akeno quien era la única quien se encontraba en ese momento.
Koretsu: Hola Himejima-san.
Akeno: Ara~ara. Buenas tardes Koretsu-kun, hoy llegas temprano, ¿sucedió algo?.
Koretsu: Nada importante, solo el echo de que ayer casi me mata una loca, Rias me salvo el pellejo y después me obligo a venir a este salon de lo demoniaco para contarme el resto de mis preguntas.
Dijo el pelinegro con cansancio mientras se sentaba en el sofá y echaba su cabeza hacia atrás.
Akeno: ¿Así que también fueron a por ti?. - Menciono la chica. - Es bueno de que Rias sea una persona precavida.
Koretsu: Tal vez. {Aunque ella tampoco debería ponerse en riesgo}. - Susurro el demonio novato.
Akeno: ¿Dijiste algo?. - Pregunto con duda la chica voluptuosa.
Koretsu: Nada importante.
En eso Rias entro por la puerta principal al club, ambos demonios dirigieron su atención a la pelicarmesí.
Rias: Buenas tardes Akeno, siento la demora la maestra me pidió ayuda con unas cosas y... - De repente la presidenta se corto viendo a los ojos al pelinegro quien solo levanto una mano para saludarla.
Koretsu: Hola Buchou. - Dijo tranquilamente el pelinegro.
Rias: Si viniste. - Respondió la pelirroja.
Koretsu: Tu me obligaste, ¿recuerdas?.
Rias: Cierto... pero... - Rias se quedo pensando por un breve momento hasta que le dirigió la palabra a su vicepresidenta.
Rias: Akeno, me prestarias tu teléfono un segundo.
Akeno: Oh, claro. - Decía la otra pelinegra del salón mientras le prestaba el aparato a su amiga. La chica de ojos marinos se dio la vuelta empezó a marcar un numero y espero a que contestarán.
Rias: Hola, Koneko. Si soy yo, ya nos necesario que vayas a buscar a Koretsu. Si, el vino por su cuenta... Lo se tampoco puedo creérmelo... Okay adiós.
La pelirroja volvió a dirigir su atención a sus dos compañeros y se dio cuenta de que Akeno solo cubría su boca como si tratara de contenerse de decir algo mientras que el pelinegro solo la miraba con un pequeño tic en su ojo. Rias le devolvió el teléfono a su amiga mientras que esta aun cubría sus labios y bajaba un poco su cabeza.
Rias: ¿Pasa algo?. - Pregunto confundida la chica.
Koretsu: ¿Que es eso de que necesitas mandar a otra persona para buscarme?. - Dijo el novato con un tono y una mueca de molestia.
Rias: ¿Ah?... bueno jeje. Es que pensé que tratarías de escapar o que te irias por... ya sabes... ser el vago de Kuo y contando los problemas que surgieron, así que tuve que idear un plan de emergencia. P-pero ahora que se que vendrás cuando se te pida no habrá mas problemas de confianza entre nosotros... ¿verdad?.
Era la primera, literalmente la primera vez que Koretsu noto a Rias actuar de una diferente a lo que ella suele aparentar y con lo poco que la conocía. Aunque eso no es importante, todas la personas, y al parecer los seres sobrenaturales, suelen cometer errores... aun así el chico juro que se vengaría por atreverse a llamarlo (o mejor dicho a confirmarlo) un vago.
Koretsu: *Suspiro*. Solo dime la información que falta y ya. - Dijo el va-... el pelinegro a su compañera.
Rias: Tranquilo, solo esperemos al resto antes de responder tus dudas. - Dijo de forma tranquila la pelirroja mientras tomaba asiento en su lugar.
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"Entre las Sombras" (High School DxD Fanfiction)
Fanfiction"Somos capaces de hacer lo que sea por nuestros seres queridos, sin darnos cuenta en lo que podemos acabar convertidos"