Here we go again! | (Zed y Tu) ZOMBIES

Do it like the zombies do

(Zed)
Al siguiente día nos pidieron asistir a la sala de reuniones donde la alcaldesa hablara y estoy seguro que no será nada bueno. Llego con papá y Zoey. Veo a lo lejos como Bucky habla con sus tíos. El se ve muy desesperado contándoles algo. Seguro les está hablando de los hombres lobo.
Esto no terminará bien.
Zoey se emociona por el tema de los lobos.

—Papá, ¿puedo tener uno?- dice Zoey.

—Claro que no, son salvajes.- responde papá.

Veo a (t/n) entrando a la sala y bajo a paso rápido las graderías. Ella me busca con la mirada, cuando llego donde está ella me mira aliviada y me abraza.

—oh, Zed.- dice y la alcaldesa pide a todos que se sienten.

La tomo de la mano y la llevo a sentarse conmigo en las graderías. Nos sentamos cerca de Bonzo y Bree. Eliza está un poco más atrás. Cuando finalmente todos se sientan y guardan silencio la alcaldesa habla.

—Debido a los terribles acontecimientos relacionados con los hombres lobos las leyes anti monstruos se restituyen y habrán toques de queda.—dice y sin más así queda todo.

Escucho a todos los zombies renegar. Veo a Bucky bajar y (t/n) me toma de la mano y hace que baje con ella. Llegamos hasta donde está Bucky. El se da vuelta y nos mira.

—Los zombies no irán al baile, ouch.- dice Bucky y este se va.

—No puedo creerlo.- dice (t/n). La tomo con una mano de la cintura y la pego a mi.

—Buscaré la forma de ir al baile. Tiene que haber una forma.- ella sonríe pero no la veo muy convencida.

Luego nos vamos a la escuela. Dejo a (t/n) en la biblioteca. Quedo de reunirme con Eliza. Bonzo tiene práctica de la banda así que seremos solo nosotros. Antes pensé que no iría solo yo por mi castigo pero, ahora resulta que ningún zombie irá a su baile de graduación. Es inaceptable. Debo encontrar la forma. Cuando llego Eliza ya está ahí. Está igual de angustiada que yo.

—¿Que haremos?- dice ella pero no parece que me lo esté preguntando a mi. Se lo pregunta a ella misma.

—Nos están haciendo quedar mal.

—Ni me lo digas. Camino aquí los vi rayando los casilleros con sus uñas. También intimidaron a unos chicos.

—¿que? Oh, no. No puede ser. Las cosas no mejorarán así. Y debemos encontrar la forma de ir al baile.

—Claro.- dice cruzándose de brazos.- es nuestro derecho.

—Aparte...- digo girándome hacia el muro.- quería que mi foto con (t/n) estuviera en el muro de fama de los camarones.

—¿en serio? Yo soy la que se encargará de las fotos. Te prometo que sí logramos ir, su foto será la mejor que habrá visto Seabrook.

—Gracias, Eliza.- eso espero.

Quedo de verme al medio día con (t/n) para almorzar. Solo que decidimos salir de escuela y solo los dos. Entre tanto alboroto de los hombres lobos ni notarían nuestra ausencia. Así que después de clases nos vamos a un lugar de hamburguesas pero como la antiguas leyes volvieron no me dejaron entrar. El dueño se disculpó de verdad. Hemos ido muchas veces con (t/n) junto a Eliza y Bonzo. Pero teme que lo penalicen al infringir la ley y que le quiten su negocio, que es lo único que tiene. Además de alejar a la clientela. Sin embargo, nos ofreció algo mejor. Atrás tiene una zona de descanso privada para los empleados. Así que nos ofreció el lugar y por supuesto aceptamos. Es una pequeña área verde con varias mesas para comer.
Luego de un rato nos lleva las hamburguesas y malteadas. Le agradecemos infinitamente.  Empezamos a comer y me siento tan feliz de estar aquí con (t/n). Después de todos los problemas. Aquí seguimos nosotros, juntos.