Siete

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Ese preciso instante en el que crees que nada ha cambiado

y la quietud te agobia,

entonces despiertas

Miras a tu alrededor y efectivamente es lo mismo

o por lo menos se le parece

Pero las personas modifican sus ideas

y también su dirección

Te piden que nunca cambies

pero no te advierten que ellos van a cambiar...

Cambiar sus vidas, cambiar la cafetería que frecuentan

Y tú recurres a tradiciones que nunca creíste fuesen a acabar

Sigues en el mismo lugar

Te vistes y te arreglas

no hay nadie

ni siquiera tú mismo

Sonries

pero ya no para impresionar,

sino para ahorrarte el derramar un par de lágrimas

Sigues en el mismo lugar,

en el mismo escenario,

ni el tiempo ni la vida se detienen;

al contrario, se aceleran

pero todos se han ido.

Nota: gracias a @DiValencia por la nueva portada. (no sé por qué no me deja mencionar)

Diario de un gran vacíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora