Diario de un gran vacío

Un lugar como el infierno

Por un momento ahí sentí que te tenía

Se me olvidaba que estás hecho de agua

Y del aire que le sobra a algunas personas

De ese mismo que me falta a mí

Traté de seguir el camino

Y de repente empezó a dar resultado

Pero nunca entendí por qué nunca te encontré al final

Y las señales, no las asimilaba a pesar de ser claras

La neblina sólo se encontraba en mi alma

Por alguna razón hay algunas cosas que me marcaron más que otras

Sentirte queriéndome fue una de ellas

Duró tan poco pero merodeó por tanto

Ninguna silueta tiene tanta luz como la tuya

Pero nadie sobrevive a tanto daño

A tantos choques y puñaladas en el corazón, en el alma

Es ese recóndito lugar en el que todos nos recostamos a morir

En el que nadie más puede entrar

Y todas mis pesadillas se habían vuelto realidad

Y ninguno de mis sueños pudo cumplirse

Nunca pude tocarte y caí al fondo de ese sitio

Ese mismo que solíamos llamar amor

Pero aunque así lo sigamos llamando, nunca será el mismo

El sol nunca sale y las noches son eternas

Y miras al techo esperando encontrar estrellas en lo vacío de tu alma

Pero unas manos te sujetan por el pecho

Y las lagrimas brotan por la presión del encierro

Por más que salgas nunca habrás salido del todo

Sin importar que algún día el cielo te explique el por qué...

Un lugar como el infierno, no se puede olvidar