Mes de la eterna primavera,
mes de la eterna melancolía.Encontré el diario de mi esposa.
Había muchas cosas que jamás debí leer,
una de ellas decía así:
"Los febreros y los abriles,
los más viles.
Oscuridad en la habitación,
oscuridad en mi vida.
Mi esposo dice que las almas no tienen color.
Pero si tuvieran,
la mía sería gris y la suya un arcoíris.
Lo amo.
Lo odio.
Quiero matarlo.
Quiero matarme.
Oh, tanta desdicha por una noticia.
Maldito el día en que fui al doctor.
Maldito el día en que nací.
Adiós, aves,
son libres de partir
y de librarse de su agonía
ya que la mía no tiene fin."