DALE HIJO DE PUTA SALI- dijo la senil victoria. Todos se sorprendieron ya que tenían una imagen menos gángster de ella. - COMO ES POSIBLE QUE TENGAS UN ARMA? mínimamente tienes licencia para portarla?!- dijo enojado el detective, a lo que ella responde - si la tengo fui a sacarla con...- victoria mira a Mateo y él le hace un gesto como que guarde silencio - fui a sacarla sola, y si, tengo la licencia idiota- corrige victoria. Todos algo asustados la miran aterrados, como era posible que tuviera un arma, acaso le había disparado a alguien?, pensaban todos, por lo que comenzaron a buscar por la casa. Mientras todos se disponen a buscar a la supuesta voz de los gritos, Mateo agarra de un brazo a victoria y le dice: - casi me delatas? Acaso estas loca, tengo una reputación que proteger- a lo que ella responde: - bueno perdón-. El resto continuan buscando, con la gran tensión que el tiro de victoria había dejado por lo que Isabel, se le acerca y le pregunta:-me parece que te falta practica ehh, uno de estos días me la prestas? Pasa que tengo una pequeña restricción respecto a el uso de armas, dale viejilla, préstamela por un dia- victoria indignada, responde que ni se imaginara, que se acuerda muy bien porque tenia restricción. Entraron al cuarto de ramiro, para ver si se encontraba bien, por lo que se llevaron una gran sorpresa. Estaba el, en un rincón de su habitación, asustado por el disparo, hablando solo pero refiriéndose como Sebastian. Mateo asustado se le acerca y le dice -ramiro, soy yo, estas bien?- y el contesta, - que te importa, nada mas me asuste por los disparos, tranquilo, estamos bien- -estamos?- piensan todos, pero no dicen nada por si acaso. Catalina le pregunta si había escuchado unos gritos horribles y el responde que no, que se vayan de su cuarto, que estaba jugando fortnite. Todos se van de la habitación y sienten un grito proveniente de la habitación de Ramiro. Asustados regresan y era el gritando porque había perdido, pero los gritos eran idénticos a los de antes por lo que le preguntan si el habla gritado antes por lo que responde que si. Todos, furiosos, se van de su habitación a continuar la velada, ya que los gritos eran los que habían alterado la tranquila conversación pero bajando la escalera, sienten la pegadiza canción que habían oido al principio. Ya agotados de esta mediocre investigación se dirigen rápidamente a donde provenía esta insoportable melodía, la ultima puerta del pasillo. Corren hasta alla y abren la puerta. Se encontraba la misteriosa sobrina de Mateo arriba de su cama dibujando ratas con forma humana, mientras acariciaba a el gato blanco, escuchando Hatsune Miku (vocaloid rap versión) a todo volumen. Al verlos, aterrada se cubrió con un acolchado y les pidió que se vayan; ellos le dijeron que apagara esa insoportable música. Ella enojada, salió de su escondite diciendo -no saben apreciar el arte-Todos se fueron, luego de que isabel apagara su computadora, desde donde salía esta agobiante canción. Volvieron mucho mas tranquilos al living donde encontraron a Julia aterrada, llorando mientras grababa un storytime, abrazada de Paton. Todos se acercaron a ella para calmarla pero Antonio, fue quien realmente lo hizo. En esa meditación que hicieron Antonio y julia para calmarla, se cruzaron un par de miradas, todos lo notaron y optaron por no decir nada, pero isabel y la risueña catalina, comenzaron a reír y isabel dijo - Consiganse una habitación, causan lo que viene a ser asco- ellos estaban tan perdidos en la mirada del otro que no respondieron. Mateo, ya harto de la situacion, aplaudiendo dijo-buuenoo nos vamos calmandoo- y le dijo a catalina - presiento una futura pareja aca--detective me parece que se tiene que ir- dijo mateo -ya es tarde y tenemos que dormir- pero al detective no le pareció asi, como excusa para quedarse con julia dijo que tenían que quedarse a pasar la noche para encontrar el ruido que les molestaba, por lo que había empezado todo. Nadie dudo y todos se fueron a dormir. A eso de las 5 am se sintieron esos ruidos que los molestaban, pero ahora eran mas fuertes, el detective no sintió nada ya que estaba en el living dormido en un sillón al igual que catalina. Isabel no habia podido dormir, ya estaba cansada de esos gemidos y aullidos nefastos que se sentían por lo que silenciosamente, salió de la habitación, donde se encontró con Mateo, quien tampoco podía dormir porque empezaron estos ruidos. La misteriosa figura bajo la escalera, paso por el living y arribo a la cocina. Isabel y Mateo, iban a una distancia razonable de esta misteriosa sombra, pasaron por el living y vieron a catalina tirada en un sofá, despeinada y sin pantalones, por otro lado, vieron al detective sentado en un sillón roncando, por lo que isabel le dijo a mateo:-incompetentes, te dije que no necesitábamos detectives para esto, nosotros somos mejores que ellos- a lo que mateo responde:- ya lo se, pero su inutilidad nos sirvió para ver lo tan superiores que somos- isabel asiente. El desconocido aullador, abrió la heladera y saco un tapper de helado crufi, se sentó en una butaca y comenzó a comerlo. Mientras tanto los otros dos se dirigían a donde se encontraba la oculta figura para llevarse una gran sorpresa. Llegaron allí, prendieron la luz y isabel dijo -Aja!- donde se encontraron a la misteriosa sobrina, comiendo helado de vainilla mientras miraba el microondas donde estaba una milanesa recalentada que comería. Ninguno de los tres entendia nada, fue mateo el que hablo primero: -que haces, julia?- a lo que ella responde:- comiendo--ya nos dimos cuenta- dijo isabel-entonces para que preguntan?-- paraparapara, eras vos la que gemia y aullaba??!--si, quien pensabas- responde la rara sobrina-pero porque mierda lo haces??! Sos consciente que no pudimos dormir por semanas por tu culpa pedazo de idiota!?- dice isabel-si, siempre fui consciente pero soy un furro, que esperas que haga?- un furr... sos un furr...- dice mateo, alterado porque siempre los había detestado.
Mateo furioso, dice gritando -VENGAN TODOS, DESPIERTENSE IMBECILES- mientras ríe. Todos se despiertan y van a la amplia cocina, donde mateo les cuenta que era ella la que había hecho los perturbadores ruidos, hubo un asombro general ya que la mayoría no sabían que ella existía hasta hace horas.
Todos tranquilos, ya que no iban a sentir mas esos ruidos molestos, brindan, conversan y rien; el detective y catalina se despiden, otro misterio resuelto por el detective. Unos gritos despiertan al detective, pero no se encontraba en esta brillante mansión, se encontraba en una habitación grande y blanca con el resto ya que esta investigación, nunca fue una investigación, nunca había ocurrido, o al menos no en el mundo real, había pasado en la mente de Antonio o conocido como el paciente 127 porque el nunca fue un detective, era un paciente psiquiátrico, que se encontraba internado en un manicomio junto al resto. Todos observaban como el guardia Sebastian le ponía un chaleco de fuerza a Isabel y a Mateo por haber intentado asesinar a Ramiro. Asi termina este misterio, que nunca ocurrió, nunca paso, nada mas fue el delirio de un paciente psiquiátrico, esta novela que no es una novela, es nada mas que la trágica y dramática historia sobre 8 pacientes, en la mente de uno de ellos.