POV Sungmin
Que únicas se ve la hojarasca al ser parte del vaivén del viento, todas sin parar danzan a su alrededor, el viento sin ellas no se nota, y ellas sin el viento no son nada, aunque juntas, parecieran no necesitarse , así me sentía yo a su lado, creía que me era indiferente, me mentía a mí misma.
Cuando los cuernos sonaron anunciando que habían vuelto corrí llevando de la mano a mi hija a recibirlos, vi los rostros de los vasallos regocijarse por el acontecimiento, madres, padres, abuelos, hijos, nietos, esposas, todos ahí reunidos esperando por alguien, vi el llanto de aquellos que sabían de antemano que nadie volvería, no imagine en ese momento que iba a sufrir el mismo dolor.
Vi a Eunhyuk bajar del caballo y me extraño que Kyuhyun no estuviera con él, traía un obsequio para el rey envuelto en una túnica, claro eso fue lo que pensé en ese momento.
-Buen trabajo mis generales, la nación de Joseon, dormirá tranquila esta noche- dijo mi padre a toda voz, pero la cara de los generales no tenían felicidad como la suya, mi padre se dio cuenta- Que sucede- pregunto.
-Lo sentimos señor- menciono uno de ellos para después agregar- lo sentimos su alteza- pero dirigiéndose ahora a mí.
Eunhyuk entrego el objeto que al ser destapado era el casco de guerra de Kyuhyun, lo reconocía por los motivos dorados que llevaba, regalo de mi padre al cumplirse un año de nuestra boda.
-Noooooooooo- escuche un grito que identifique como el de Seohyun.
Para mí la voz se me fue, mi hija comenzó a llorar y se abrazó a mis pies, mis lágrimas se congelaron, mis ojos estaban llenos de ellas pero ninguna resbalaba por mis mejillas.
Eso no podía ser, no podía, no era cierto, me decía a mí misma.
-Qué paso- pregunto el rey.
-Veníamos para acá, se suponía que los nómadas ya no estaban, pero un grupo reducido de veinte hombre nos atacaron en el cañón rojo, el objetivo éramos los generales, se le extermino fácil, pero cuando creímos que ya no había ninguno con vida, uno de ellos clavo una espada por la espalda al general y lo jalo con él al vacío, su cuerpo quedó destrozado, le dimos sepultura ahí mismo, su espada se perdió solo el casco pudimos traer.
Trague saliva, - Mi señora- dijo Donghae.
-NO ES CIERTO- grite, Donghae aparto a mi hija, pues me deje caer, Woocky corrió abrazarme, me sostuvo , aquellos litros de lágrimas que había guardado de repente salieron a montones empañando mi vista.
Lloraba y lloraba sin consuelo, no me importaba nada hasta que escuche - No Kibum, déjame, yo quiero estar con mamá.
-Tu mami no está bien ahora, ven vayamos adentro.
Entonces lo pensé, Kyuhyun no estaría más, pero mi hija si, Kyumin me necesitaba, por ella debía de dejar de llorar y actuar, ser la madre que necesitaba, ser lo que siempre debí ser.
Me solté de mi hermana, seque mis lágrimas, la abrace, se pegó a mí y escondió su carita en mi pecho.
La cargue y levantando el rostro, entre al palacio. Mi padre dio aquel día como festivo, pero los siguientes siete fueran de luto por la muerte de Kyuhyun.
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CICATRICES QUE MATAN
Romance*¨*¨*¨*¨*¨* Kyuhyun el hijo del ministro de guerra de Joseon ultraja a la hija menor del rey al confundirla con una gisaeng, para limpiar su falta y teniendo el favor del rey ya que le salvó la vida en una ocasión, es obligado a casarse, que...