***HERIDA ABIERTA***

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Pov Sungmin

Me quede estupefacta, no fue precisamente un beso completamente, ya que nuestros labios se pegaron levemente, pero aquello era totalmente nuevo para mí, nuestras miradas se cruzaron y él quito su boca de la mía para reemplazarla por lo que debió utilizar desde un principio... su mano.

Ajenos a todo aquello mi hermana y su prometido seguían perdidos en su lujuria, de pronto tanto ellos como nosotros escuchamos.

– Quién anda ahí, salga- era la voz del ministro Leeteuk que con lámpara en mano se acercaba al jardín rápidamente, debió escuchar ruidos de aquellos dos y eso lo alerto para acercarse.

De inmediato Woocky se acomodó sus vestidos y ambos se escondieron en un espacio estrecho entre las flores y macetones, pero si Leeteuk entraba e iluminaba la instancia era seguro que los vería, los vestidos eran muy grandes para pasar inadvertidos.

-Salgan inmediatamente,- volvió a decir amenazantemente, acercándose cada vez más.

Mire a Kyuhyun, teníamos que hacer algo, mi padre era capaz de anular el compromiso si se enteraba de lo que hacía su hija, quise pedirle que interviniera con algo, pero no fue necesario, me tomo de la mano y nos acercó a la luz.

-Perdón ministro, no fue nuestra intención inquietarlo- dijo.

Tucky abrió los ojos y nos vio sorprendido, pero solo sonrió y contesto - No se preocupe excelencia yo me disculpo por inoportuno- no quise siquiera pensar en lo que estaría pasando por la cabeza de ese viejo, pero la acción sirvió porque se fue.

Al estar a solas nuevamente en la obscuridad jale mi mano y me dirigí hacia donde esos dos chiquillos se habían metido –Salgan- ordene y ambos se pusieron de pie algo apenados.

-Que descaro- dije regañando a Wocky cuando Kyuhyun me interrumpió - regaña después, ahora deberían salir sino encuentran a los festejados mandaran a alguien más listo en su búsqueda y entonces estarán en problemas, llévate a tu hermana yo me quedo unos segundos con el príncipe y las alcanzamos enseguida- agrego.

No le contradije pues tenía razón, así que guie a Woocky por el palacio, hasta un ala privada donde le acomode mejor sus ropajes.

-Si Siwon estuviera aquí, el príncipe Yesung ya estaría castrado, que descaro el suyo- le dije.

-Perdón- dijo levemente.

-Por lo que veo, tú y el no son tan ajenos como creemos, cierto- pregunte.

-No- contesto.

-Deja de utilizar monosílabos y cuéntame- le anime, jalándola a un sillón cercano, sonrió por mi ansiedad de conocer detalles.

-Fue en la última cacería que tuvimos con papá en su campo.

-Eso cuando fue - pregunte otra vez.

-Hace dos años y medio, tú no fuiste

-Lo suponía.

-Bueno entonces comenzamos a salir a escondidas de papá y después de un tiempo se dio todo, ambos acordamos que buscaríamos la manera de estar juntos y dio resultado.

- Así de simple, yo esperaba algo más romántico.

-Bueno no es un cuento de hadas pero estoy feliz.

CICATRICES QUE MATANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora