No voy a perderte (panavene)

🔞obsesión🔞

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[...]

—¡No, no lo hagas!—gritaba Venezuela una y otra vez en su cabeza.

Tan sólo seguía con su plan, ignorando por completo sus incesantes súplicas. Pasó por el pasillo en dirección a la habitación del istmeño, lleva su oído a la puerta corroborando el silencio tras de ella, giró el picaporte enterándose que cerrada se hallaba, gruñe molesto, se encaminó hasta la cocina, abrió uno de los cajones casi volaron los cubiertos y tomando uno de los cuchillos, regresando nuevamente a la puerta, con el objeto en mano, maniobraba la cerradura, después hay un sonoro "click" en el pestillo; el cerrojo cedió, parecía no ser la primera vez que abre una puerta a esas.

—¡Por favor, por lo que mas quieras no lo hagas!—rogó Venezuela.

—¡Cállate!—

Pasó al interior de la habitación completamente decidido, esta vez no se quedaría con las gana de hacer su perversidad.

Como solía hacerlo, encendió la lampara de noche, visualizando de pies a cabeza a su victima inconsciente de lo que pasaría.

—demasiado lindo—susurró llevando su cuerpo al borde de la cama y sentados allí.

—¿por que?, de todas las cosas que podrías hacer, ¡quieres hacer esto!—

Únicamente continuó, se posicionó sobre él, llevando sus manos a cada lado de su cabeza y comenzó a besar el cuello del que aun dormido estaba.

Con los minutos Panamá reacciona, por el peso extra y los húmedos beso.—nhg, vene—se despertó.

Al escucharlo se detiene, mira fijamente al canalero, con esa sonrisa sínica.—eres mío...—susurró y justo cuando Panamá gritaría tapó su boca.

[¡wow, wow, wow alto ahí!. ✋🚫]

[¿Tiene más de 18?]

[¡¿No?!]

[Pasele pues, que lo disfrute mucho :D]

El pequeño intentaba con todas sus fuerzas quitárselo de encima; era inútil, con una mano apresaba sus manos y con la otra seguía cubriendo su boca evitando sus gritos.

El se cansó, hizo su mejor esfuerzo, el venezolano al notar esto, lo aprovecha, le da la vuelta al pequeño sin dejar ningún segundo dejar de mostrarse dominante, el menor resistía asustado.

—¿Qué hiciste?~, ¿Qué estabas haciendo?~—preguntaba en una ronca voz a su oído, percibía un aroma ajeno a el—Hermoso~—apreciaba deseoso la figura del menor.

[...]

La cama fue desecha por completo, las sabanas ahora recubrían el cuerpo del menor estando amordazado, se movía debajo de el como gusano queriendo deshacer los fuertes nudos.

—La cama nos podría delatar, me gustaría que fuese largo y sin interrupciones~—Por esa razón lo sometía en el suelo y sobre la alfombra. —No tengas miedo, yo no te lastimaría... no, no, no, se lo prometí a Venezuela, sólo quiero algo que tu tienes para mi.—sonrió, tan cerca de su rostro percibiendo su aliento, se quedó estático del miedo.—asi me gusta~ —sujeto sin mucho cuidado el rostro el amordazado, notando las gruesas lagrimas que surcaban sus mejillas enrojecidas. —Dame más razones para querer encajártela toda—rio, se recostó sobre y continuaba con su juego.