Leo y Lara...

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El tiempo pasa incansable, pronto completaría su espera y mas en calma ahora podrá estar...

Aun se encontraba despierto, los dolores no lo dejaban dormir, cada vez siendo mas frecuentes, pero soportables.—Nhg...—experimenta un ligero dolor recorrer su parte baja, quita la almohada posicionada en su cintura y la otra de sus piernas, baja de la cama con lentitud.—nhg...—el dolor se intensifica—n-no, no ahora no—se percata de la humedad en su ropa asustado. Fue caminado recargándose un poco de las paredes, llega hasta el comedor, posa sus 2 manos sobre esta; se estira estando algo fatigado y adolorido, el anterior dolor cesó para después volver a padecerlo con mayor intensidad, sujeta su gran barriga de 8 meses y medio.—u-uy...—Se sienta en una de las sillas no soportando estar de pie—Mmhg... m-mi celular—busco con la mirada, lo ve en la mesa de centro en la sala, es un distancia considerablemente corta; aunque no para el. Camina descalzo hasta allá, toma entre su dedos el dispositivo y marca al numero de emergencia, en su pantalla se interpone la llamada entrante del ecuatoriano, justo a la hora de siempre, 9:10 PM. Contestó rápido solo para pedirle que no lo volviera a llamar, estaba apunto de entrar en labor de parto.—nhg... Ecuador—su rostro expresaba dolor el otro se percata de esto.

—¿Panamá, que pasa?, ¿Qué tienes?—pregunto velocidad, temiendo que haya pasado un accidente.

—¡uy!...  n-no, no.—toma aire—¡voy a parir!, p-por favor no me llames pronto.—dice controlando medianamente su respiración.

—bien, bien— el ecuatoriano no sabia que hacer, no encontraría paz hasta saber lo que pasaría.

El panameño corta la llamada, hablar con el no serviría de mucho por ahora.

[...]

La sirena roja y azul iluminaban las calles, la ambulancia recorría estas mismas a gran velocidad, al llegar, ayudan al adolorido país a sentarse en la silla de ruedas y continuado su camino por los pasillos del hospital, Pan empezaba a desesperarse y solo era el comienzo.

—Buenas noches, una mami tendrá a sus babys hoy al parecer—Una enfermera llega hasta la habitación diciendo aquello en un tono divertido, el istmeño no responde, estaba mas ocupado soportando las contracciones y maldiciendo todo lo que mirara, una forma de desahogarse, al menos para el.

"les voy a cortar los huevos a los dos xuxa, co*olamad*e, pe*** h**ue**ta... "

—Apúrate, Nani, rompió bolsa.—contesta la otra mientras que traía consigo la útiles para el trabajo, deja las toallas sobre un mueble a un lado de la camilla.

—Oh, claro.—se apresura ponerse los guantes de látex.—con su permiso—Pasa directamente a revisar la dilatación del paciente.—mmh... 8 cm.

—todavía...

[...]

El sudor corría por su frente mas que antes.—¡ahh!... nhg—el pequeño país gritaba con cada contracción y pujando con cada una de ellas en consecuencia. 

—vamos, aprieta un poquito mas—decía la mujer, ella recibiría en sus manos al primer bebe.—falta poco—

El de estrellas sudando y quejándose hacia lo pedido.—a-aghh n-no puedo. ¡Agh!—el tiempo que llevaba ahí se alargaba mas y no sentía que hubiese avanzado mucho con esto. 

—Lo estas haciendo bien, cariño—alienta, pasa una toalla por su rostro.

—Si puedes, anda, si puedes—alentaba.—respira... soló respira.

Inhala por la nariz, exhala por la boca—s-si, ¡ahh! nhg...—aprieta con fuerza la mano que le proporcionaba la enfermera junto a el, soltando un fuerte alarido y por fin escuchando el llanto de un bebe.

—es un niño, felicidades—sostenía en brazos al pequeño recién nacido, lo acerca al padre, colocando a la criaturita en su pecho.

Únicamente pudo sentir alivio momentáneo pronto vuelve a sentir las contracciones.—nhg...

—aquí viene el otro—observa la dilatación por debajo de las sabanas —no te preocupes el segundo es mas rápido.—menciona como si fuese de todos los días.

—p-pero igual va a doler... ay dios.—suspira.

[...]

Después de unas 6 horas que parecieron eternas ya tenia en brazos a los mellizos.

Muy orgulloso agrega—no es por que sean mis hijos pero... Mis hijos me salieron bonitos.—rie en compañía de las dos mujeres que lo ayudaron. Mira con ojos de completo amor a sus dos pequeños—Leo y Lara... su papa estará feliz cuando los vea.—sonríe, su vista se nubla y una gota se desliza por su rostro. Esas lagrimas no contenían dolor en lo absoluto, a diferencia de antes estas eran de felicidad.

—jeje tiene visita—interrumpe la amable mujer que disponía a irse.

—¿Pan?...

—...

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~cherry~

Ellos son los mellizos uwu

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Ellos son los mellizos uwu. Agradezco la ayuda de Melihuwu con el diseño.

Okey otro Cap, mmh...tenia pensado hacer otro libro, detallando que fue lo que paso en territorio venezolano, tratos, conflictos y muerte. Son tantas cosas que... hubiese sido bastante relleno. O nose.

Titulado: tu causa. (no estoy segura)

No voy a perderte (panavene)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora