Capítulo Cuarto;)

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YAEL

Estoy emocionado.

Luego de la conversación con Chantal vine a mi casa porque papá llamó diciendo que iban a traer una mercadería a las 7:30 pm.

Escucho el timbre, es raro porque no espero a nadie, Vico salió con sus amigos y dijo que iba directo a la obra en la noche, Dody está ensayando, papá está en su trabajo y aún no es hora para que sean los que traen la mercadería.

Me asomo y veo a Milo, pienso en no abrirle un rato para molestarlo un poco, pero esa idea se va cuando lo escucho decir...

—Yael Estefanio Hijo de tu madre y de tu padre, ábreme la puerta, te estoy viendo por la ventana, genio.

Miro por la ventana y me saca la lengua, pero que maduro que es— No hay nadie, vuelva mañana —me carcajeo cuando me saca el dedo medio y le abro.

—Necesito una silla de ruedas, mis piernas quedaron sin funcionamiento de tanto esperar que me abras la bendita puerta. —Es un dramático, siempre lo ha sido, es todo un chiste.

Suena de nuevo el timbre y lo miró. — Abre, no hagas que haya otro lisiado —le digo molestando.

—Es tu casa, abre tu.

—También es tu casa hermano, anda abre con confianza.

Nos miramos fijamente y decimos al mismo tiempo — Piedra, papel o tijera! —Milo saco tijera y yo papel, el muy idiota me da una mirada de arrogancia.

—Anda esperanzito, abre la ventana grande — Lo ignoro y voy a abrir.

—Hola. —Sophie entra a mi casa con toda la confianza del mundo, saluda a mi amigo y se sienta en el sofá— No sabía que ya estabas aquí, —Milo y ella empiezan a hablar y yo sigo parado con la puerta abierta un poco raro, estoy a punto de cerrarla cuando ponen el pie y la abren.

—Hola, Yael —Ivy me sonríe y entra a mi casa tal cual como lo hizo su hermana.

Me asomo en la puerta, — ¿Alguien más va a entrar a mi casa como si nada? —preguntó al aire, me doy la vuelta y por fin cierro con éxito, mis amigos me miran como si estuviera loco, suspiro y me siento en el mesón.

—Que hacen aquí chicas?, —ellas me miran y noto que se ponen molestas— Olvidas que quedamos en que hoy veníamos a tu casa a ver si cada quien compro todo para la fogata de mañana? —me reprocha Ivy y me siento mal porque no he conseguido las pacas de refrescos que tenía que llevar.

—Si, lo has olvidado. —afirma Sophie al ver mi cara— Esta bien no importa, tienes lo que queda del día y la tarde de mañana para conseguirlas, Milo tu ya apartaste los Sándwiches donde la Señora Rosa? —mi mejor amigo la mira como si Soph tuviera tres cabezas, él es muy despistado y sé que las chicas se enojaran porque son 30 Sándwiches que tenía que apartar y la Señora Rosa siempre dice que le avisen con antelación de un día los pedidos.

—¡Milo Horacio Fernández, te matare! —Soph se abalanza sobre él y lo empieza a ahorcar, esto es muy divertido, ese ni siquiera es el nombre de mi amigo.

—Yael deja de grabar y quítame a la loca de encima —me dice con desesperación, fácilmente la puede apartar, pero como es Milo recurre al drama y yo sigo grabando mientras me rio.

La chica Brown aun molesta lo sigue ahorcando —Una cosa que te pedimos, ¡UNA! y no la haces!!—Ivy ya piensa que es suficiente y coge a su hermana y la calma,— Nosotras ya tenemos todo, mañana la fogata es a las ocho como siempre, lleven las cosas si?, yo calmo a la desquiciada— Milo y yo asentimos algo asustados al ver la cara de Sophie, las chicas se van y nosotros respiramos por fin.

Mi mejor amigo quedó ¿ofendido? ― A ti qué te pasa? ―está mirando a la nada, asusta.

―Horacio?, ¿enserio me puso Horacio?, ¡ese nombre es horrible! ―lo miro con cara de ¿enserio? ― Vamoooos tú también sabes que es horrible.

Le doy la razón porque ese nombre si es feo, sin ofender a los Horacios.

Suena el timbre por 5272 vez en lo que va del día― Me mudare de casa ―resoplo y voy otra vez a abrir la puerta que ha de estar a un movimiento de autodestruirse.

Es la mercadería, ni siquiera me había fijado de la hora, le doy las gracias al tipo y dejo la entrega en la "bodega", es decir el cuarto de juegos de Dody.

―Ya no le quedan gomitas al monstruo ―miro a Milo con ganas de matarlo y se mete la última gomita de Dody a la boca― Ahora si ya no le quedan.

Vamos Yael, matar es ilegal y aparte tu vida seria aburrida sin ese animal que tienes por mejor amigo, ―Vamos a comprar las cosas para mañana y de paso compramos más gomitas para que el demonio que tengo de hermano no me deje calvo mientras duermo.

Milo se empieza a reír a carcajadas y yo tuerzo los labios con molestia y humillación, ― Para que no te deje calvo otra vez querrás decir ―le pegó en la cabeza y cojo las llaves de casa.

―Vámonos Horacio. ― lo molesto y él me tira un trapo y camina hasta la puerta para abrir su mano en plan "después de ti"

―Después de ti, Estefanio.

―Te odio.

―Me amas.


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DATO de MUA: HOLAAAAAAAAA

Espero que el capitulo sea de su agrado y se rian como yo al escribirlo.

¿Como les va cayendo Milo? 

Chantal no sale en este capítulo pero ya la veran en el siguiente, diganme que les va pareciendo la historia hasta ahora.

Se les quiereeee:D

No salgan de casa y que Dios los bendiga;)

¡Agur!

;-;

Chantal, ¿me ayudas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora