{Más Que Una Niñera} // Kevshica

En la oscuridad

(Capítulo 23)

(Narrador Omnisciente)

La cena fue normal, y muy aburrida para los chicos; quienes solo sonreían y asentían fingiendo escuchar. Los más grandes no paraban de presumir sus grandes y lujosas estancias o de sus increíbles vacaciones en el Caribe. Aquellas conversaciones eran típicas en las cenas de negocio. El plan de todos era salir beneficiado; ya sea con una buena impresión de los demás, mejorías en sus trabajos o el aumento del suelo. Todos tenían mucho, pero para ellos nunca era suficiente. 

- y cuéntanos Kevin, ¿seguirás con la empresa? que yo sepa si no la sigues estarán en banca rota -comentó la esposa del licenciado.

Kevin miró vacilante a su padre al escuchar aquella pregunta. Estaba entrando en un terreno complicado. Si decía la verdad, la reputación de su padre y toda su familia se vería afectada. Pero si mentía, se sentiría mal consigo mismo.

- Si -respondió mirando su plato fijamente, y agregó mirando a la señora- seguiré con la empresa, ademas, mi familia jamas quedará en banca rota, y nuestra clase nunca bajará -dijo con un nudo en su garganta, pero mantenía su postura.

- ¿Como estas tan seguro? -Preguntó Benjamín metiéndose en la conversación. 

- Son cosas obvias -sonrió Kevin de manera cínica. Aunque por dentro no era así. 

La cena estaba llegando a su fin, pero en medio del brindis, repentinamente las luces se apagaron, dejando completa oscuridad a los comensales.

- Lo siento, de seguro hubo un corto circuito. Enseguida llamo al electricista.

Mientras Thomas llamaba al electricista, los invitados se sirvieron una taza de té y se fueron al patio trasero, el único lugar con luz.

Todos fueron a tomar el té, excepto Kevin. Que ya estaba muy cansado de toda esta gente.

- Si me disculpan, debo retirarme -dijo Kevin dirigiéndose hacia las escaleras.

- ¿Tan rápido te vas Miller? -Preguntó Benjamín con descaro.

- Estoy cansado -se excusó Kevin con la poca paciencia que le quedaba.

- Deberías ser más amable y acompañarnos -recomendó dando un sorbo a su té. 

- No me digas lo que debería o no hacer.

- ¿Sabes que? Con esas actitudes no debías pertenecer a nuestra sociedad, deberías estar en la calle.

- ¿Así? ¿Sabes dónde deberías estar vos? En un internado tratando tus actitudes de mierda -exclamó Kevin.

- ¡Kevin! -gritó su padre avergonzado de aquellas palabras emitidas por su hijo.

- Lo siento, pero no voy a seguir perdiendo mi tiempo con tremendo pelotudo -dijo Kevin acercándose mas a las escaleras.

- ¿Perdón? -preguntó Benjamín victimizado.

- Kevin, por favor -lo tranquilizó su padre.

- Que tengan una linda noche -dijo Kevin mientras subía por las escaleras.

Mica sin pensarlo dos veces decide seguirlo, pero Benjamín se cruza en su camino y la detiene.

- ¿Que haces? -preguntó Mica intentando esquivarlo.

- ¿A dónde vas? 

- No es de tu incumbencia -dijo Mica cruzándose de brazos.