capitulo 2

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Llegamos a su casa, la cual era muy bonita y grande, ventanas blancas y afuera un pequeño pero bonito jardín. Estacionó la camioneta y ellas bajaron rápido de allí yo dude un poco pero baje, zoe tomo mi mochila y trisha me dio pequeños empujones hacia la puerta, cuándo la abrieron me guiaron hasta el piso de arriba, caminaba realmente miedosa observando todo lo que tendría que limpiar un par de horas. No estaba tan desordenada después de todo.

Seguimos hasta que una puerta se abrió y zayn salió de la habitación, quedé impactada por que nosotras estábamos vestidas y el no...

-¿tenemos visitas?-pregunto y yo sonreí pero por cortesía desvíe la mirada .pero fue como en cámara lenta verlo así desnudo.

-vístete...luego te explicamos-pidió zoe, el gruño y se metió a su habitación yo en cambio seguí mi camino con las mujeres de esta casa y me llevaron a la habitación de al lado. Abrieron la puerta y me mostraron la que sería mi habitación.

Una cama amplia, tamaño matrimonial. Un grande closet que seguramente estaría vació una vez que yo tratara de poner lo que quedaba de mi ropa allí. También tenía una ventana que daba al jardín intermedio entre una casa y otra.

-te traeré un par de cosas que yo ya no uso, así tendrás con que dormir y que usar mañana-sonrió y yo mordí mis labios no me gustaba ser una carga pero por ahora solo era una mantenida

-no te sientas mal-susurro trisha sentándose a mi lado

-no puedo evitarlo-baje la mirada-juro que mañana compensare todo lo que ustedes hacen por mí.

-bien...deja que zoe te traiga algo de ropa, te bañas y luego bajas a cenar con nosotros ¿de acuerdo?-sonrió y yo acepte gustosa

Zoe volvió con una maleta llena de cosas que ya no usaba, yo la mire dudosa pero ella me hizo prometer que usaría todo lo que venía adentro, le devolví las faldas y los shorts cortos, pues sabía que en un par de semanas todo esto ya no me quedaría.

Escogí unos jeans y unas blusas muy cómodas para trabajar, mi vientre se notaba muy poco, así que aun podía esconder los dos meses de embarazo.

Salí de la habitación con un pantalón gris, y una blusa negra de manga 3/4 luego baje las escaleras y camine hacia dónde provenía ese delicioso olor a comida, entré algo dudosa y allí estaban los tres trisha, zoe y zayn.

-buenas noches-murmure bajito mientras daba un paso a la cocina. Todos me miraron y sonrieron, mientras que zayn me miro de arriba a abajo, le sonreí y al final me devolvió la sonrisa.

-ven, tú siempre te sentaras aquí-mencionó zoe señalando la silla que estaba a su lado frente a zayn, asentí y fui a la cocina por unos platos, los acomode en la mesa junto con los vasos

-Skyler siéntate-pidió trisha yo volví a asentir y me senté en mi lugar-hijo Skyler estará viviendo con nosotros a partir de hoy, se encargara de unas labores del hogar y también trabajara en la panadería-menciono trisha-ella preparara la comida mientras nosotros trabajamos en la tarde-añadió

-¿sabes cocinar?-me pregunto curioso

-si-respondí tímidamente

-de acuerdo-dijo como si nada, trisha sirvió la comida y vi cuanta cantidad le daba a zayn, todos comenzamos a comer yo miraba mi plato con tanta anhelación pues mi estómago rugía como nunca.

-¿cómo vas con Kathy?-pregunto trisha a zayn. El me miro pero rápidamente desvíe la mirada se suponía que esta conversación no me importaba.

-mamá ahora no-dijo el, sabía que mi presencia le incomodaba.me levante tome mi plato y camine al cuarto de servicio.

-¿Sky?-me llamo zoe una vez que yo estaba sentada sobre la lavadora con el plato en mis piernas-¿qué estás haciendo aquí?-pregunto.

-tu hermano necesita hablar con tu mamá y es claro que le molesta mi presencia así que decidí comer aquí-sonreí-no te preocupes estoy acostumbrada, luego lavare la loza.

-¿no habíamos hablado ya sobre las reglas?-medio sonrió.

-lo sé pero soy una inquilina más en tu casa, no quiero incomodar a nadie y menos a tu hermano, él no tiene la culpa de que yo sea una pobre...-zoe tomo mi mano y me bajo de la lavadora.

-camina no seas ridícula-menciono ella bastante convencida, puso mi plato en su lugar y me senté donde estaba.

-no quise hacerte sentir mal Skyler-informo zayn, le sonreí y él también lo hizo.

-no es eso solo quería darte privacidad con tu familia-sonreí a todos, seguimos comiendo en silencio hasta que zayn hablo.

- juro que no la entiendo mamá...le doy todo, le hablo bonito, soy lindo con ella, pero siempre me ignora y cuando decido alejarme ella regresa.

-hijo, ella está jugando contigo y con tus sentimientos-dijo trisha mientras yo pasaba un pedazo de pan-deberías ser claro con ella y decirle que tú no eres otro del montón.

-¿cómo?-pregunto el desesperado, escuchaba como zoe lo ponía en su lugar yo casi no puse atención hasta que el gruño y se fue rápido hacia su cuarto.

-es un niño-menciono zoe suspirando.

Termino la cena y me obligaron a retirarme, no querían que lavara la loza, suspirando entre a mi habitación y busqué mi mochila saque el bote de pastillas que me habían regalado en el centro de salud para mi bebe, la tome y me recosté en la cama, estaba realmente cansada.

***

Abrí mis ojos y escuche que alguien sollozaba, me levante con cuidado y salí del cuarto en silencio, esos sollozos eran demasiado adoloridos ¿y si me metía y se enfadaba conmigo? Caminé un poco y supe que los sollozos provenían del cuarto de zayn. Dudosa mordí mis labios y di un leve golpe a la puerta.

no recibí respuesta pero los sollozos seguían, abrí lentamente la puerta y asome solo la mitad de mi cara, la oscuridad no me dejaba ver bien, pero podía ver a penas a zayn sentado en la cama con un montón de alcohol, el olor era impresionante, entré en la habitación realmente asustada y el me miro sorprendido.

-¡¿pero qué?!-dijo sorprendido, levanté la mano para que bajara la voz.

-solo...te escuche llorar y me preocupe-confesé-¿estás bien?

-sí, veté a tu habitación-pidió y bajo el rostro difícilmente pude distinguir que estaba herido.

-¿qué te paso? ¿Qué hiciste?-camine hacia él.

-¡Mierda Skyler Nada, veté a tu habitación!-volvió a decir, pero me negué, encendí la lámpara de noche y me senté frente a él, tome las gasas y mire su rostro.

-tienes que ponerte hielo o el ojo te amanecerá peor que una pelota de béisbol-mencione y el aún me miro con recelo-¿peleaste?

-si -confeso- no le digas a mamá-Pidió.

Se que cuidaras de miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora