Hola! No tendre tiempo en la noche entonces les subire un cap mas!
- Me encuentro tirada a un lado de la pelea y necesito encontrar una forma de hacer que Elijah deje de golpear a Damon lo tiene arrinconado contra una pared y no puedo permitirlo, me meto en el medio de los brazos de Elijah empujándolo hacia atrás, este me mira con ira pero se contiene a golpearme, en el momento no me di cuenta de una leve tos en Damon corro a su lado y toco su rostro suda ligeramente y hay un pequeño dardo en su pierna, Elijah me sonríe y empiezo a tocar el rostro de Damon. Elijah me jala a un lado y me clava algo en la espalda inmediatamente comienzo a marearme y siento como me cargan en brazos.
Me despierto y me encuentro en una cama, me muevo y siento que mis brazos me duelen, veo unas llagas abiertas pero al momento vuelven a sanar, las cuerdas me lastiman y la verbena me provoca pequeñas quemaduras, abro un poco más los ojos y veo un poco más la habitación es completamente de madera como si estuviera en un bosque hay una gran ventana pero está cerrada y una gruesa cortina color vino la tapa, intento moverme pero nuevamente me rompo las manos y hago una mueca de dolor.
En eso Elijah entra en la habitación me mira suavemente y se acerca a mí, muevo la cabeza hacia otro lado y el me hace mirarlo, toma mi barbilla y frunzo mis labios ante un beso que el posa allí.
- No te voy a dejar nunca más, ________ - dice suavemente besa las llagas que nuevamente se abrieron y comenzaron a sanar – Rompiste mi corazón, ________.
- Yo había dejado eso claro, Elijah – digo con odio – Y siempre te lo voy a dejar claro, yo no te amo, más bien te odio Elijah y si alguien me está rompiendo en miles de pedazos eres tú. Tu maldito egoísmo me destruye, ¿qué le hiciste a Damon?
- No te atrevas a mencionarlo – dice con una mano justo sobre mi cara – Te cuido, te doy de comer, te protejo y así me pagas – lo miro mal y él toma mi rostro. – Si quieres salir de aquí, hazlo pero no habrás caminando 100 metros cuando te tenga a ti, a tus preciosos hermanos Salvatore y a Katherine clavados en uno de esos árboles.
Elijah sale dando un portazo y ahí me doy cuenta que las cuerdas de mis muñecas están flojas, miro a mi alrededor y salgo por la puerta ahora si me sorprende, Elijah ya no se encuentra en ninguna parte pero no me digno a escapar porque sé que sus amenazas son reales, veo la cocina y abro el refrigerador una cabeza de lo que solía ser un chico cae de esta, me hago a un lado y saco una bolsa de sangre, me la bebo por sorbos y sigo mirando la casa.
Veo que no tiene nada interesante, me encuentro una televisión de pantalla plana y lo prendo para ver un poco de televisión, al rato escucho como alguien entra a la casa, Elijah me sonríe de lado y me extiende su mano con una reverencia decido seguirle el juego y con una mueca la recibo, toma mi cintura y dice con ligera alegría.
- Hemos sido invitados a una fiesta en la ciudad, lejos de cualquier inconveniente, me encantaría que me acompañara, señorita Pierce – asiento levemente y este me dirige a la sala, hay una caja plateada con un lazo morado en la tapa, la abro y un hermoso vestido se encuentra en la caja, es dorado y lo acompañan unas bellas joyas, unos guantes de cuero negro y unos zapatos que le combinan, en una pequeña bolsa hay un ligero maquillaje de ojos y una pintura de labios rosa suave.
- Rebekah me ayudo, le encantara verte. Ella sabe que estamos en una relación pero no sabe qué tan complicada es así que apreciaría que te comportaras conmigo de una manera adecuada como las parejas lo hacen. – levanto una ceja y suspiro pesadamente asiento con suavidad – Perfecto, la fiesta empieza en dos horas, le aconsejo que se duche y se comience arreglar, ________ nos vemos luego. – el sale de la habitación y no puedo evitar que pequeñas lagrimas caigan de mis mejillas, me coloco el vestido y luego los guantes, comienzo a acomodar mi cabello, pinto mis ojos oscuros y me pinto los labios de color rosado.