Mi estadía con Chris y Jessica había llegado muy pronto a su fin, ya teníamos el vestido de novia y los de las damas de honor, que habían sido rojos, con un escote corazón y ceñidos al cuerpo, tenían una cinta blanca en la cadera, decorada con una rosa del mismo color. Aunque el vestido fuera muy bonito, debía de admitir que no era fanática de ellos, por lo que iba a soportar la enorme incomodidad de usarlo por ellos.
Rápidamente baje del avión, recogí mi equipaje y tomé el taxi que me llevaría al hotel, estaba muerta de cansancio. Según Kurt, mi llave estaba en recepción, ya que no había estado cuando las habitaciones se repartieron, me había tocado estar en una doble, así que tendría compañera de cuarto, por mi estaba bien, aunque, siendo sinceros, esperaba que fuera Becky, ya que debía de hablar con ella.
Resulta que Roman sí me mandó un mensaje al día siguiente de que vimos los vestidos de damas de honor, y desde ese día, habíamos estado hablando, a tal punto de que mañana, antes del entrenamiento, teníamos una cita formal, a solas y en un plan romántico, así que necesitaba apoyo moral.
En cuanto baje del taxi, entre en la recepción y pedí mi llave, eran ya las once de la noche, esperaba que mi compañera estuviera dormida, porque no tenía ánimos para platicar, quería darme una ducha y dormir. Subí en el elevador y me detuve en el tercer piso, luego salí de este y comencé a buscar mi cuarto, en cuanto lo encontré, abrí la puerta, pero de inmediato me detuve, pues acostada, con una diminuta pijama morada, estaba Sasha Banks.
—¿Qué carajos haces aquí en mi cuarto? —pregunto, yo la mire de la peor manera posible.
—Resulta que también es mi cuarto —conteste mientras sacaba mi celular y le llamaba a Kurt.
—¿A quién le llamas?
—No te interesa —replique, luego de dos timbres, él contestó.
—Rachel, ¿Sucede algo?
—Sí, tengo a Sasha en mi cuarto, ¿Hay alguien con quien pueda cambiar de habitación? —pregunte.
—Lo lamento, Rachel... No, lamentablemente ya es muy tarde para cambiar, ¿Por qué no tratan de llevarse bien por una noche?
—Imposible, no me quedaré aquí...
—¡Ni yo la quiero aquí! —grito Sasha.
—Rachel...
—¿Suceden algo, señoritas? —pregunto una voz familiar a mis espaldas, me giré y ví a Randy.
—Gracias por nada, Kurt —dije y colgué, me gire hacia Randy—, ¿Qué no es obvio?
—Yo llegué aquí primero, así que...
Y antes de que siguiera hablando, le cerré la puerta casi en la cara, ya que no quería seguir oyendola. Me giré hacia Randy, su expresión era muy divertida.
—¿Qué tal está Chris? —pregunto.
—Muy bien, lo salve de una crisis prematrimonial y lo dejé hace unas horas en el aeropuerto —conteste.
—Sí, me pidió que le avisará cuando te viera, para asegurarse de que habías llegado bien, pero creo que no le gustará que le diga que te peleaste con tu compañera de cuarto —dijo con burla mientras miraba la puerta.
—Ni la menciones, lo menos que quiero es entrar, pero quiero ducharme y dormir, así que me esforzaré... ¿Qué haces? —!e cuestione cuando tomo mi maleta y comenzó a avanzar.
—Limitate a seguirme, ¿O quieres dormir con Sasha? —se burló, yo lo seguí.
Abrió una puerta y me dejó pasar, dentro solo había una cama, pero grande, lo miré con una ceja levantada mientras cerraba la puerta.
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Lucha a mi lado (Jeff Hardy o Roman Reings)
أدب الهواةRachel Lavinge es una luchadora a tiempo completo muy buena, desde que inició su carrera, se codeó con atletas, que unos años después ya eran celebridades, así que, acostumbrada a ese estilo de vida, se preparó y luego de hacer una transferencia de...