One Shots Batman

Damian Wayne

Era de las típicas tardes de otoño, nublada y corría un viento sur, que chocaba con tu cara, te encontrabas en la entrada al gran parque de Gotham, dónde ibas un rato un pasear a Apolo quien era tu perro, mediano, y de color marrón con manchas blancas, quien había sido encontrado de camino a casa, por tu hermano James, hace dos años.

Todos los días, luego de llegar del instituto, realizar algunas tareas, corroborar el correo, le colocabas la correa a Apolo para irse a caminar por el parque, era como tú momento de desconexión, al llegar le soltabas la correa, y te sentabas bajo uno de los árboles a leer algún libro que solías llevar contigo.

Mientras tanto en la Mansión Wayne, Damian, había acabado de entrenar, no estaba teniendo un buen día, así que luego de entrenar, se retiro a darse una ducha, al salir, se recostó sobre su cama, y después de debatir, decidió salir a caminar por la ciudad, no es algo que hiciera con frecuencia dado que los reporteros, siempre estaban encima de él y su familia, analizando cada movimiento que estos hacían, pero de verdad necesitaba despejar un poco su mente.

Se encontraba frente a la entrada del parque, la tarde está preciosa para caminar, el parque se encontraba un poco desolado, tal vez por la época, mucha gente no disfrutaba del frío, y preferían quedarse en sus casas. Comenzó a caminar, disfrutando de la fría brisa que de colaba por la bufanda que llevaba, debía pensar seriamente sobre las decisiones que debía tomar. Hace unos meses Talia, reapareció en su vida para pedirle que volviera a su lado, luego que su abuelo, Ra's al Ghul, muriera definitivamente, el era el sucesor para ocupar aquel trono, y su madre esperaba que tomara aquella decisión.

Pero el joven de ojos esmeralda, tenía otros planes, ya hacía 10 años, que se encontraba viviendo con su padre, se había acostumbrado a una rutina que consistía en ir al instituto, entrenar, cuidar de aquella ciudad, a la cual ya había llamado hogar, e ir a la empresa la cual heredaría en un futuro, no tan lejano, ya que Bruce quería que a los 21 años el tomara el mando de la empresa, y  le quedaban unos 3 años para estar al frente de aquella compañía. Estaba bastante agobiado con tantas decisiones, y pensamiento que le agobiaban, que no se dió cuenta cuando tropezó con aquella chica de cabello negro y ojos color miel..

Damian: No venía viendo el camino, lo lamento - dijo mientras le tendía la mano aquella chica quien la tomo, y al hacerlo Damian sintió como una corriente eléctrica le recorrió todo el cuerpo-

Alice: No es ningún problema, yo también venía un poco distraída - dijo mientras se le notaba un leve sonrojo debido a que ella también había sentido esa corriente eléctrica-

Damian, viendo que la noche ya se comenzaba hacer presente en aquella ciudad, dónde el crimen no descansaba, y dónde a la vuelta de cada esquina podía encontrarse con alguno de estos personajes que en Gotham ya eran moneda corriente, tuvo el ofreciendo de acompañarla hasta su casa, el cual la chica acepto, no iba a dudar que aquel chico era apuesto, tenía unos ojos esmeralda que podían lograr hacer que cualquier persona quedará hipnotizada.

Alice: Por cierto, creo que no me eh  presentado - dijo con un poco de sonrojo - Me llamo Alice Miller y el - dijo señalando a su pequeño acompañante perruno - es Apolo.

Damian: Creo que también fue mi error no presentarme como es debido - dijo, mientras se bajaba un poco la bufanda, viendo cómo la cara de la chica se tornaba en una de asombro que logro sacarle una sonrisa- Soy Damian Wayne.

Alice: Wow, te vi varias veces en el instituto, pero jamás pensé en verte en un lugar tan.. - dijo mientras buscaba una palabra en su cabeza - común - dijo mientras que su cara mostraba un poco de confusión- No me malinterpretes, pero es poco usual ver alguien como tú, caminando por lugares así - dijo mientras miraba a Damián, quien tenía una leve sonrisa-

Damian: No es muy normal que venga a caminar, pero suelo hacerlo seguido, más cuando quiero tener tiempo y espacio para mí -sentencio el pelinegro- Deberíamos comenzar a caminar, antes que se haga más de noche -dijo, mirando a su acompañante, y haciendo un ademán para que comenzarán a caminar hacia la salida-

Comenzaron así a caminar de regreso a la casa de la chica,mientras hablaba de cosas triviales, y Damian en un momento termino llevando Apolo, con el cual se había encariñado y parecía que el sentimiento era mutuo. No tardaron mucho en llegar, entre la conversación y risas, el camino se había hecho corto, Alice no vivia tan lejos de la mansión Wayne, vivía en uno de los barrios, que podría llamarse seguro, no porque no ocurriera nada, si no porque era uno de los barrios dónde la policía tenía control, los cuales se contaban con los dedos de la mano...

Alice: Gracias por acompañarme, espero no te haya molestado Damian -dijo mientras miraba a Damián, quien se veía que tenía una sonrisa ladina -

Damian: No fue ninguna molestia  acompañarte Alice, de verdad se hizo corto el trayecto, pero debería volver a casa -dijo pero la castaña lo detuvo-

Alice: No deberías llamar para que te busquen, no es que piense que no puedes defenderte, pero... - dijo analizando cómo continuar la oracion- me quedaría más tranquila -solto finalmente, ganándose el asombro de su acompañante-

Damian: Está bien, llamaré a Alfred para que venga por mi -dijo mientras, miro una expresión de tranquilidad en el rostro de Alice-

Alice abrió la puerta de la casa, e invito a Damián a pasar, le soltó la correa Apolo, quien se fue corriendo en busca de alimento y agua, mientras que ellos dos se quedaron en el salón, sentados en el sillón, Damian llamo Alfred quien le dijo que en 15 minutos, llegaba por él.

Aquellos 15 minutos que para Damian, en otra ocasión serían demasiados largos, se hicieron cortos, siguieron conversando, respecto de sus vidas, como si se conocieran hace años, luego de un rato, la bocina de un auto, los hizo dejar de conversar, ambos se dirigieron a la puerta, y antes que Alice pudiera decir algo, Damian quien le sacaba unos centímetros de altura, le plantó un beso corto en los labios, a lo cual Alice se ruborizó completamente, Damian Wayne era el chico que volvía loco a medio instituto, y ella no era la excepción...

Damian: Nos vemos mañana Alice -dijo con el, mientras la miraba- Gracias por haberme mejorado el día

Alice quien seguía en un trance, por el asombro del beso, solamente asintió levemente. Le abrió la puerta a Damian, quien salió dirigiéndose al auto pero antes de subir se dió la vuelta y la miro, ella solamente hizo un pequeño gesto con la mano, saludando así aquel chico, el cual se mostraba con una carcasa, la cual lo hacia ver como una persona seria, y poco preocupado. Pero en realidad era un chico como cualquier otro, con problemas con miedos, y estaba feliz de haberlo podido conocer, al cerrar la puerta, se dejó caer contra está, Apolo quien admiraba desde las escaleras, ladró, indicándole a la chica que era hora de terminar los trabajos pendientes de la academia, Alice subió la escaleras, con una sonrisa que dudaba se fuera en toda la noche...

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Reaparezco por aquí con un OS de la bolita de odio, que espero les guste.

Estoy demasiado a full, con la facultad pero prometo tratar de actualizar más seguido 🙌🏽

Espero que estén bien ❤️